Tengo que admitir que no me entusiasmó mucho la idea de jugar a un shooter competitivo online cuando nos lo ofrecieron, no es mi género favorito y no soy nada fan del juego en línea, pero también tengo que admitir que Agents: Biohunters me ha dejado unas sensaciones muy buenas tras haber jugado a su beta cerrada el pasado fin de semana, así que paso a resumir un poco mis primeras impresiones para que os hagáis una idea de lo que ofrece este juego de origen catalán.
Agents: Biohunters se promociona, según sus propios creadores, como «una mezcla entre Fortnite, Overwatch y Monster Hunter», una combinación un tanto extraña aunque…no es cierta, no es que sea mentira, sino que la cosa no es exactamente así. Es verdad que coge ideas principales de los tres juegos, pero lo hace de una forma muy básica y superficial que no destacan por ser las mecánicas principales de los juegos a los que dice referenciar. Lo que quiero decir es que podrían haber dicho que se inspira en Team fortress 2 y World of Warcraft -por poner un ejemplo- y sería igual de válido porque son referencias muy vagas a dichos juegos.
Quizás la mayor particularidad de este juego es que combina PvP con PvE simultáneamente, no solo nos enfrentaremos a los monstruos del escenario sino que al mismo tiempo también lo haremos contra los otros jugadores. Esto supone un reto añadido, ya que tendremos que andar con mil ojos para sobrevivir, más de lo que ya suele ser habitual en los juegos competitivos.
Pero veamos cómo se juega a Agents: Biohunters y como es una partida estándar: nos enfrentamos en equipos de 3vs3, eligiendo entre 6 personajes diferentes de distintas clases -dos artilleros, dos tanques y dos médicos-. El objetivo del juego es ser el primero en vencer a la biocriatura, un monstruo enorme que requiere de la colaboración de varios jugadores para ser derrotada, y para abrir la puerta de su guarida tendremos que reunir tres cristales que irán apareciendo a lo largo del mapeado.
A su vez, para eliminar el escudo que protege dichos cristales tendremos que matar una cierta cantidad de monstruos -aquí es donde entra el juego el PvE- para hacer que el escudo caiga y ser los primeros en cogerlo. Y aquí es donde aparece el PvP, pues para conseguir el cristal tendremos que permanecer dentro de su radio de alcance durante unos segundos, tiempo que el otro equipo puede aprovechar perfectamente para emboscarnos y conseguir ellos el valioso botín.
Tras haber jugado unas partidas, tengo que decir que el gunplay es bueno y efectivo, tampoco para tirar cohetes pero consigue convencer. En general cualquier jugador podría ganar fácilmente una partida, en ese sentido no hay mucha diferencia de juego entre alguien que le ha dedicado varias horas y un novato, o al menos así lo he percibido en un principio. Para movernos por el enorme mapeado contaremos además con un vehículo que podremos «invocar» pulsando la tecla B, el cual nos permitirá colocarnos en cualquier lugar en un momento, y lo cierto es que vamos a morir tanto que lo vamos a utilizar mucho para llegar desde el punto de respawn hasta el objetivo.
En general puedo decir que me ha gustado bastante, pero tengo que poner la nota discordante con algunas decisiones jugables que arruinan un poco la experiencia. La primera es que así de primeras no nos proporcionan mucha información, nada más empezar nos sueltan en el mapa y nos toca buscarnos la vida, no nos explican nada sobre el ataque especial de cada personaje, los artilugios que podemos construir o las funciones de la subida de nivel, por lo cual nos va a llevar varias partidas averiguar por nuestra cuenta todo lo que podemos hacer. Otra de las quejas que tengo es la distribución de las teclas, algunas acciones están asignadas a teclas nada intuitivas y de manera confusa, nos va a pasar mucho lo de querer guardar el vehículo por ejemplo y darle a todas las teclas excepto a la que corresponde.
En resumen, que tras unas primeras impresiones puedo decir que no me ha resultado para nada un mal juego ni algo aburrido, me parece un juego entretenido pero que tampoco aporta demasiado al subgénero de los «hero shooter», no hace nada que no se haya visto ya. Lo que sí necesita es mucho contenido a corto plazo, pues un único mapa con dos o tres criaturas clónicas y el mismo jefe final puede llegar a cansar rápidamente, a ver como hace Playstark para mantener el interés de los jugadores en un mercado ya copado.
Este artículo ha sido realizado mediante una copia cedida por Big Games Machine