De vez en cuando, cada mucho tiempo, aparece uno de esos juegos que es capaz de de transmitir mucho con tan poco, de esos que no necesitan multitud de mecánicas y contenido para dejar huella. Ese es el caso de el título que nos ocupa hoy, Henry Halfhead, juego desarrollado por el estudio Lululu Entertaiment y distribuida por Popagenda, el cual nos cuenta una peculiar historia utilizando las físicas para ello.
En Henry Halfhead se nos cuenta la historia de Henry, une niñe de género neutro -no es cosa mía, el propio juego le denomina así- cuya mayor particularidad es la de no tener cuerpo y ser una cabeza rodante, algo que como veremos más adelante, resulta parte esencial de la jugabilidad. La trama nos cuenta la vida de Henry desde su nacimiento y y cómo va viviendo varias etapas importantes de su vida, todo ello narrado con una voz en off como si se tratase de una especie de cuento interactivo.
Respecto a la jugabilidad, estamos ante un juego de puzles basado en físicas. Nuestro personaje, aparte de tener la peculiaridad de ser una simple cabeza moviente, también tiene la habilidad de poseer objetos y poder manipularlos a su antojo. De esta forma tendremos que resolver las diferentes situaciones que nos vaya planteando el narrador. El manejo es bastante sencillo: nos moveremos con el joystick, contaremos con un botón de salto y otro para poseer objetos, y con esa combinación ya podremos hacer todo.
De esta forma, el narrador nos irá contando situaciones que Henry va viviendo en su vida diaria y tendremos que realizar esas acciones utilizando nuestro poder para ello. Desde construir una torre con bloques de construcción hasta preparar la maleta para ir al colegio, pasando por hacer un dibujo o preparar el desayuno. Otra de las peculiaridades es que la mayoría de objetos que podemos poseer son funcionales, si por ejemplo poseemos un ventilador podremos apagarlo y encenderlo, algo que aunque no siempre se utilice en el avance del juego, queda como un añadido curioso y divertido.
Quizás el mayor defecto de Henry Halfhead es que se autolimita mucho en su desarrollo y nos nos deja mucha libertad a la hora de resolver las diferentes situaciones, la mayoría de misiones tienen una única solución posible y realizarlas de otra forma a la que el juego quiere que lo hagas resulta en fracaso. Otro de los problemas es que en muchas ocasiones no queda del todo claro lo que tenemos que hacer ni cuanto queda para terminar. Por poner un ejemplo de esto, en una de las tareas se nos pide poner la mesa para celebrar nuestro cumpleaños, sin embargo no nos dice qué objetos exactos hay que poner ni cuanta cantidad de ellos, simplemente tendremos que colocar objetos al azar hasta que el juego decida que ya hemos terminado, lo que en muchas ocasiones hace que nos tengan dando más vueltas de las necesarias.
A modo de extra y para añadir más contenido jugable, en cada uno de los niveles tendremos que encontrar seis piezas para poder montar un rompecabezas y poder ver la imagen que se muestra, lo que nos obliga a interactuar con el entorno y los objetos de alrededor para poder localizarlas. También como añadido, Henry podrá conseguir diferentes accesorios tales como corbatas, sombreros o artículos de broma para poder personalizar a nuestro personaje, lo cual no influye para nada en el juego pero le da un toque gracioso y divertido al título.
Y más agradable que jugar solos es hacerlo en compañía, algo que podremos hacer gracias al modo cooperativo incluido. En este modo para dos jugadores, cada uno controlaremos a una cabeza diferente y podremos cooperar para completar las misiones que se nos plantean, las cuales son las mismas que en el modo de un jugador. Aunque no es un añadido totalmente diferenciador en un juego de este tipo, se agradece su inclusión y resulta bastante divertido ir interactuando con todos los objetos en pareja.
Pasando ya al apartado audiovisual, Henry Halfhead apuesta por un estilo minimalista y low poly en el que destaca sobre todo el sistema de físicas de los objetos y sus interacciones entre ellos, mostrando un rendimiento notable con el que nunca bajamos de los 60 fps ni en máxima calidad. Respecto al sonido, la música estará ahí ocasionalmente pero tan discreta que ni le prestaremos atención, siendo la voz del narrador la que se lleva todo el protagonismo al ir narrando la historia y comentando algunas de las interacciones que hagamos. En cuanto al idioma, contaremos con voces en inglés pero textos en castellano, aunque como ya hemos avanzado, con predominancia del lenguaje inclusivo.
En definitiva, Henry Halfhead es un juego modesto en su contenido pero grande en cuanto a lo que logra. Estamos ante un título que mezcla con acierto la narrativa con la jugabilidad para crear una experiencia agradable con la que pasar un pequeño rato, ya que en apenas 3 horas podremos terminarlo. No estamos ante un título profundo y sus carencias, más por decisión de diseño que por error, empañan un poco la experiencia, pero aun así no deja de ser un juego bastante recomendable y entretenido.