Hace unos meses, Treasures of the Aegean sorprendió a todos con su trailer y su impactante estética visual. lo que podíamos ver era un juego de plataformas y exploración que más bien parecía un comic en movimiento gracias a su estilo artístico. Finalmente, Treasures of the Aegean ha salido a la venta hace un par de semanas escasas para PC, Switch, Xbox y Playstation. Viajamos a las regiones balcánicas para desvelar el misterio que allí se nos plantea.

Los padres de la criatura son el estudio barcelonés Undercoders, unos viejos conocidos de nuestra web. Si no os suena su nombre, son los creadores de juegos como Superepic -el cual ya analizamos aquí– o Mail Mole, por nombrar sus juegos más recientes. De la distribución, en cambio, se encarga Numskull Games, otros viejos conocidos con los que ya hemos colaborado en varias ocasiones.

Y la historia de Treasures of the Aegean comienza con nuestra protagonista, Marie Taylor, disfrutando de unas merecidas vacaciones en las islas griegas, cuando de repente un fuerte terremoto sacude toda la tierra y en medio del mar surge una impresionante isla volcánica que antes no estaba ahí. Marie, cazatesoros de profesión, no puede resistirse a visitar la isla y viaja hasta allí con la ayuda de su compañero James Andrew, solo para encontrar restos arqueológicos de la civilización Miónica, aparentemente extinguida hace más de 4000 años.

Como ya hemos comentado, quizás lo más llamativo de este título es su estética, no solo visual, sino también narrativa, que recuerda mucho a viejos comics de aventuras alrededor del mundo como Tintín o Spirou y Fantasio, entre otros. Su formato también bebe de este medio, mostrando escenas cinemáticas a través de viñetas y diálogos dentro de bocadillos que por momentos nos hacen sentir que estamos dentro de una novela gráfica interactiva.

En la jugabilidad, estamos ante un juego que, sin ser un metroidvania puro, sí que bebe muchísimo del género. Tendremos un mapeado enorme que podremos recorrer y en el que tendremos que ir recolectando los diferentes tesoros de esa civilización perdida, así como resolver puzles y activar mecanismos que permitan abrir puertas para poder continuar explorando. Todo esto, nuevamente dicho, bajo una perspectiva 2D plataformera con aspecto de dibujo de comic.

La mecánica más interesante de este juego es la del parkour. Marie podrá moverse por todo el mapeado con una velocidad vertiginosa, pudiendo deslizarse entre huecos, escalar paredes o columpiarse en lianas. Esta mecánica es bastante entretenida y funciona bien, el personaje responde bien a los controles aunque en ocasiones no llega a detectar del todo las direcciones en las que movemos el joystick y nos obliga a hacer más de un intento.

Más adelante y debido a detalles argumentales que no vamos a desvelar para no estropear la sorpresa, el juego cambia de formato y se convierte en una especie de roguelite. En cada nueva run, tendremos 15 minutos para jugar y explorar el mapeado antes de que el tiempo se reinicie y empecemos todo de nuevo. Por suerte, la porción de mapa explorado en cada partida se quedará fija y señalada en nuestro mapa personal, de manera que ya sabremos lo que hay en esa zona y podremos dedicar nuestro tiempo a abrir nuevas áreas o recoger esos tesoros que nos quedaron pendientes.

A pesar de ello, hay que decir que el juego llega a hacerse un poco monótono, el mapeado es literalmente enorme y la escasa variedad de escenarios hacen que las zonas nos resulten muy similares entre sí, resultando muy difícil orientarse. Tendremos marcadores que podremos poner en el mapa para señalar lugares importantes, pero el problema es el mismo, si queremos orientarnos bien tendremos que estar abriendo y cerrando el mapa cada pocos pasos, cortando bastante el ritmo de juego.

Hay que destacar también el valor cultural de Treasures of the Aegean, pues el equipo de Undercoders ha realizado una importante labor de investigación sobre la civilización miónica en cuestión, haciendo que tengamos que recoger tesoros basados en reliquias reales encontradas, así como mostrar información sobre la cultura, sociedad y jerarquía de la época. Sin duda, un detalle de agradecer y que le aporta al producto un pequeño plus de aprendizaje.

Ya hemos hablado largo y tendido del apartado gráfico, el cual se mueve bien y sin problemas a 60fps, aunque tengo que decir en un par de ocasiones he llegado a sufrir un extraño bug que hacía que el efecto de daño al caer de grandes alturas se mantuviese  en pantalla incluso en los menús, pero nada grave En cuanto a la banda sonora, unas increíbles melodías que evocan a la Grecia clásica nos acompañarán durante nuestras correrías y hay que reconocer que son bastante buenas. En cuanto al idioma, no tendremos voces de ningún tipo, pero por suerte los textos los encontraremos en castellano como es obvio.

Podemos decir que Treasures of the Aegean es un buen juego, sabe ofrecer un formato interesante mezclando mecánicas que se complementan bien entre sí y nos muestra una civilización muy poco explotada. A pesar de eso, es verdad que sus defectos son notables y empañan la experiencia, pero solo por su apartado artístico y su control merece la pena darle una oportunidad.

 


Este análisis ha sido realizado en PC mediante una copia cedida por Numskull Games