Triple ración de terror recibimos con la publicación de Amnesia Collection en Nintendo Switch, un género que por el momento apenas tiene representación en la híbrida de Nintendo. Aglutinando los tres juegos de la saga desarrollados hasta la fecha, nos encontramos con ports directos de las versiones originales aparecidas en su momento en PC a través de Steam.
A poco que os interesen los juegos de terror, muy seguramente estaréis familiarizados con la obra de Frictional Games. No en vano, todos los juegos que este estudio sueco ha desarrollado se encuadran en este mismo género. Hablamos de juegos tan conocidos como Soma o la saga Penumbra.
Los andares la saga que nos ocupa comenzaron hace ya una década con la primera entrega, The Dark Descent. A pesar de tratarse de un juego de relativo bajo presupuesto y como una repercusión inicial moderada, fue ganando popularidad mediante el boca a boca y los gameplays en Youtube, hasta alcanzar el estatus de obra de culto que a día de hoy tiene.
Lo que hizo despuntar en su momento al juego era su enfoque: desde una perspectiva en primera persona, debemos estar en continua huida y sin medios para defendernos de los enemigos. Además, el juego también incluía la resolución de puzles para poder ir avanzando. Muy pocos partían de esta premisa por aquel entonces. Si a esto le agregamos una atmósfera muy oscura, tenemos el denominador común que comparten las tres entregas con estos elementos.
En la primera entrega, The Dark Descent, viviremos la historia de Daniel, quien ha perdido completamente la memoria y se despierta de repente en el castillo de Brennenburgo con el único recuerdo de su nombre. Como buen castillo que se precie, y más en la época en la que el juego está ambientado, la luz brilla por su ausencia. La mayor parte del juego nos la pasaremos avanzando por pasillos oscuros en los que no se ve un carajo.
Y para rizar algo más el rizo, esta oscuridad nos hará perder la cordura gradualmente. En este sentido, nuestro nivel de cordura hará las veces de vida, aunque no tengamos en pantalla un marcador como tal. En su lugar, nuestra visión se volverá cada vez más borrosa y deforme, dificultando nuestro avance.
No será esta la única manera de que nuestra cordura se vea reducida. Cruzarse con los enemigos y mirarlos directamente tendrá el mismo efecto sobre ella. Afortunadamente podremos recuperarla si nos acercamos a la luz o si conseguimos resolver un puzle mientras avanzamos. Contamos también con una lámpara de aceite para iluminar nuestro camino, aunque en realidad sea un arma de doble filo. Su luz atraerá a los enemigos, por lo que deberemos utilizarla con cuidado. Además, el aceite no es infinito y las recargas no es que sean precisamente abundantes, por lo que deberemos utilizarla con cabeza.
A nivel técnico, queda patente que nos encontramos con un juego que tiene ya diez años a sus espaldas y no cuenta con ninguna mejora visual. Si bien los efectos de iluminación quedan bastante resultones, los modelados, las texturas y en general el apartado visual se nota obsoleto.
El segundo de los juegos, Justine, que podría considerarse en realidad un spin-off del primer juego y que en su momento lo ofrecieron como DLC gratuito a los poseedores de The Dark Descent. Se encuentra muchísimo más centrado en los puzles que el primero, y tiene una duración considerablemente menor. Aquí sus desarrolladores optaron por incluir la muerte permanente para compensar la esta menor duración y darle algo más de dificultad.
Visualmente hay cierta mejora respecto a la entrega principal, aunque le sucede como a ella y se nota el paso de los años.
En último lugar tenemos A Machine for Pigs. Esta segunda entrega no fue desarrollada por Frictional Games sino por The Chinese Room, cambio que se hace bastante patente a lo largo del juego. En esta entrega los desarrolladores quisieron romper en cierto modo con algunos aspectos que podían resultar tediosos, como el tener que estar constantemente buscando aceite y rellenando el farol. Además, ahora la vida se recupera gradualmente. Hay quien pensará que estos cambios fueron a mejor. En mi opinión, hacían que el juego fuese mucho más agobiante y te sumergieses mejor en la atmósfera que intentaban transmitir.
Por contra, la historia se me hizo más interesante y está mejor contada, aunque la duración del juego sea mucho menor que la del primero. El avance es casi un pasillo y los puzles son bastante más asequibles que en la primera iteración de la saga.
En esta entrega final se nota la mejoría respecto a The Dark Descent en el apartado gráfico -no en vano, fue originalmente publicado cinco años después de esta entrega inicial-, aunque me he encontrado con algunos problemas de rendimiento en ciertas áreas que se me hacen inaceptables para un juego de 2013 que ni siquiera en su momento era puntero a nivel gráfico. Tampoco me han gustado los enormes tiempos de carga cuando queremos continuar partida cuando abrimos el juego de cero.
En las tres entregas me he topado con varios glitches y problemas gráficos, acentuados sobre todo en A Machine for Pigs. Se me ha hecho también extraño que juegos que tampoco piden un hardware puntero y que ya cuentan con bastantes años a sus espaldas no hayan recibido una conversión en Nintendo Switch que corra a mayor tasa de frames. En la versión aparecida en PS4 hace ya cuatro años llegaron a 60 fps; en Switch nos quedamos en 30, aunque afortunadamente relativamente estables. Por el contrario, y como los originales, las tres entregas llegan también en perfecto castellano. Con la enorme cantidad de texto que tendremos que leer, es un detalle que se agradece.
A modo de conclusión, esta colección que tenemos en Amnesia Collection es un buen añadido al catálogo de Nintendo Switch, en un género con tan pocos exponentes en la híbrida de Nintendo. Destacando por encima de todos The Dark Descent, las adaptaciones son bastante fieles a sus versiones originales. A pesar de los problemas técnicos y de no ser las mejores conversiones posibles -sobre todo en cuanto a fluidez se refiere-, este compendio de las tres entregas de la saga son juegos de terror bastante competentes. Sólo por poder probar el primero ya merece la pena.
Este análisis ha sido realizado mediante una copia cedida por Evolve PR