La Primera Guerra Mundial o Gran Guerra es un conflicto bélico de gran importancia en la historia moderna que curiosamente no ha visto reflejada su trascendencia en tantos videojuegos como si lo ha hecho la Segunda Guerra Mundial que ha tenido decenas de títulos basados en este conflicto internacional. Algunos títulos como Battlefield 1, Valiant Hearts, o Verdún han querido retratar la Gran Guerra, cada uno a su manera, pero si en nuestra opinión un título nos ha hecho sentir el horror real de este conflicto de principios del siglo XX este ha sido CONSCRIPT, un título desarrollado por Catchweight Studio, o lo que es lo mismo, por Jordan Mochi, un joven desarrollador que durante seis años y en solitario ha sabido plasmar la brutalidad y el horror de este conflicto.

CONSCRIPT es un survival horror que bebe directamente de los primeros Resident Evil, aunque toda la acción transcurre en 2D con una vista aérea inclinada. Y lo más curioso es que en el primer título de Jordan Mochi no nos vamos a encontrar zombis, ni monstruos, o enemigos inmortales e implacables que nos persigan, no, en CONSCRIPT nos vamos a enfrentar a la realidad de uno de los conflictos más crueles y grotescos que se recuerdan, a la guerra de trincheras, su inhumanidad y su brutalidad sin parangón. Los soldados enemigos, en este caso el Ejército Imperial Alemán del Káiser Guillermo II, serán nuestro principal enemigo pero no el único, porque tendremos que enfrentarnos y sobreponernos a plagas de ratas, enfermedades, trampas, bombardeos de artillería e incluso balas perdidas que nos impacten por pura mala suerte.

Para darle fuerza a esta historia se ha elegido un evento histórico real dentro del conflicto, la batalla de Verdún de 1916 en el noreste de Francia, la más larga y cruenta de toda la Primera Guerra Mundial, donde podremos encontrar algunos lugares reales como las fortificaciones de Fort Souville, Fort Saint Michel o Fort Vaux que tendremos que recorrer para conseguir nuestro objetivo. Nos meteremos en la piel de un joven soldado francés destinado en el frente de Verdún junto a nuestro hermano Pierre, aunque al comienzo de la aventura Pierre estará en una de las fortificaciones y nosotros en otra. Después de un ataque fallido a las lineas enemigas y de que encontremos a Pierre herido, seremos nosotros los atacados y dados por muerto y aquí es donde comienza nuestra doble misión, encontrar a Pierre y también pedir ayuda.

Moverse por las trincheras y fortificaciones del frente no será nada sencillo, todo lo contrario, nos espera un mapeado laberíntico, con ciertas opciones de abrir algunos atajos, aunque ni siquiera esto será siempre sencillo. Encontraremos muchas zonas cerradas con llave, candados con combinaciones, caminos cortados por escombros para los que necesitaremos el uso de artillería, cajas o vagonetas que empujar, y sobre todo muchos enemigos que no dudarán en acabar con nosotros en cuanto nos avisten. Y aún así nos esperan muchos más peligros que nos mantendrán en tensión durante toda la aventura teniendo en cuenta lo escasos que son los ítems de salud y la munición. El agobio es constante aunque por suerte para los jugadores menos duchos en la materia, se han incluido distintos modos de dificultad, que si bien te facilitan no morir, no evitan que te lleves los sustos y el agobio que te esperan.

Lo primero a lo que debemos enfrentarnos es a comprender nuestra misión, porque aunque el juego esta dividido en varios niveles, los objetivos de cada uno de ellos no están definidos, así que tendremos que avanzar sin saber muy bien hacía donde resolviendo todos los puzles que podamos -y hay algunos bastante rebuscados- mientras nos enfrentamos a soldados enemigos, evitamos las zonas de gas y las trampas y tenemos cuidado con las ratas, pues por si no fuera poco, cada X tiempo sufriremos oleadas de soldados enemigos, y si acabamos con ellos, tantos cuerpos causarán oleadas de ratas. Afortunadamente encontraremos algunas zonas de descanso donde poder salvar la partida en un diario al más puro estilo máquina de escribir de Resident Evil, podremos usar un baúl para almacenar los ítems -nuestro inventario es muy limitado-, y encontrar a un vendedor que nos cambie ítems por cigarrillos o mejores nuestras armas.

Visualmente CONSCRIPT hace gala de un pixel art muy particular, con una sensación de pixelación muy notoria, y a la vez como sucio y poco definido, pero que en conjunto forma unos escenarios riquísimos en detalles aunque muy similares entre ellos. A nuestro protagonista le sucede lo mismo, nos dará la sensación de estar excesivamente pixelado y desenfocado, pero en movimiento veremos que está muy bien animado y seremos capaces de apreciar sus detalles -excepto su rostro, que parece especialmente pixelado adrede-. Artísticamente el juego es insuperable. En cuanto a la banda sonora lo más llamativo es lo poco que la escucharemos, limitándose a inquietante temas ambientales que cumplen su cometido creando el debido desasosiego, y a los conseguidos efectos de sonido que nos mantendrán en continua tensión.

CONSCRIPT crea una atmósfera única, de horror y de grotesquidad, una mezcla de barro, suciedad, enfermedad y muertos por doquier, montones de cuerpos apilados que solo aumenta el pavor a este conflicto y su guerra de trincheras. Jordan Mochi ha conseguido que sintamos terror sin recurrir a zombis o monstruos, pero también es cierto que debido a esta atmósfera que nos envuelve durante todo el juego, y a lo intrincado de su mapeado, orientarnos por nosotros mismos sea bastante complicado y debamos recurrir en cada momento al mapa, ya que prácticamente todas las zonas tienen el mismo aspecto. Así mismo la IA enemiga es más benevolente de lo que podríamos esperar ya que tarda en detectarnos en ciertas situaciones -sobre todo si ganamos la espalda a un enemigo-, o su reseteo y vuelta a posición inicial si salimos y entramos por una puerta.

A pesar de estas anotaciones que no tienen por que ser un problema para todos los jugadores, CONSCRIPT nos va a ofrecer un survival horror old school pero con ciertas opciones de calidad de vida más actuales -modos de dificultad, opción a autoguardado y guardado dependiente de un ítem-, y sobre todo con una aproximación al horror de la Primera Guerra Mundial como no habíamos visto en mucho tiempo. Si os gusta el género y os gustan los primeros Resident Evil con CONSCRIPT no vais a fallar, aunque advertimos, no será un viaje fácil a través de las miserias de la Gran Guerra.