Parece mentira que tras tantos años desde su nacimiento y otros tantos de ausencia, la saga DOOM vuelva a estar de moda. La franquicia de Id Software está viviendo una segunda juventud no solo gracias a los lanzamientos del «reboot» en 2016 y su secuela DOOM Eternal lanzada este mismo año -y analizada por un servidor en nuestro portal-, sino también por las diferentes reediciones que han tenido los juegos clásicos en las plataformas actuales. Ahora le toca el turno a DOOM 64, un juego que siempre ha sido exclusivo de la 64 bits de Nintendo hasta hoy, que finalmente ha podido dar el salto a las consolas de nueva generación y PC.
Todos conocemos ya la saga DOOM, precursora de los first person shooters tal y como los conocemos hoy día y uno de los juegos más influyentes de la historia. Tras las dos primeras entregas de DOOM en 1993 y 1994 respectivamente, para ver la tercera entrega tuvimos que esperar hasta el 2004, donde se dio el inevitable salto a las tres dimensiones y apostaba por un concepto que se alejaba totalmente de las propuestas originales para ofrecer un estilo de juego más pausado y narrativo.
Entre medias hacía aparición DOOM 64, una entrega exclusiva de Nintendo 64 desarrollada por Midway Games -con la colaboración de John Romero y John Carmack– que consiguió engañar a todo el mundo en el buen sentido, pues mientras la gente esperaba una versión adaptada de DOOM 1 y 2 con el nombre cambiado como solía ser habitual en los lanzamientos de dicha consola, lo que realmente ofrecía DOOM 64 era una entrega completamente nueva que no tenía nada que ver con los anteriores juegos. Se trataba de una continuación de DOOM 2 que añadía nuevos niveles, objetos y enemigos nunca vistos hasta la fecha, lo que hizo que mucha gente empezase a considerar este juego como «el verdadero DOOM 3».
Y era una secuela pura y dura incluso en su argumento, pues volvíamos a retomar el control del mítico Doomguy tras el final de DOOM 2, donde nuestro guerrero regresa a La tierra tras exterminar a los demonios en el propio infierno y cerrar el portal que daba a nuestro mundo. Pronto los satélites de la UAC descubren que una poderosa entidad, Mother demon, ha sobrevivido y ha vuelto a resucitar a todos los demonios aniquilados, por lo que vuelven a necesitar los servicios de su mejor soldado para acabar con ella y devolver el universo a la normalidad de una vez por todas.
Como buena entrega de DOOM que es, vamos a encontrar aquí todos los elementos que la hacen reconocible: escenarios laberínticos cargados de secretos, una jugabilidad endiablada y ante todo, mucha violencia. En ese aspecto lo cierto es que no va a decepcionar a los fans de las entregas clásicas, pues se van a encontrar con un juego que va a cumplir todas sus fantasías de volver a ver un juego similar a los originales, especialmente a aquellos a los que las últimas entregas no le han terminado de convencer o piensan que ya no es lo mismo.
¿Pero qué añade esta nueva remasterización de DOOM 64 respecto al original? lo primero y más evidente, el aumento de resolución y framerate, alcanzado los 4K y los 60 frames por segundo con total facilidad. Se ha retocado también la iluminación, mostrando un aumento de brillo en comparación con la anterior versión, al igual que un aumento de la resolución de las texturas. Contamos por fin con idioma español en los textos y otros tantos más, pero sin duda el mayor atractivo de todos es la inclusión de 8 nuevos niveles inéditos hasta la fecha, llegando así hasta un total de 40. Hay que reconocer que Nightdive Studios -la desarrolladora responsable de esta remasterización- se ha puesto las pilas y ha hecho un buen trabajo.
Respecto a lo jugable, se podría decir que DOOM 64 ha envejecido bastante bien, con un manejo del personaje y de las armas bastante decente que sigue manteniendo el tipo a día de hoy, en ningún momento da sensación de control arcaico o duro debido al paso de los años. Esto es así tanto en la versión de PC como en la de consolas, donde el manejo con mando es igual de efectivo y brutal. Gran parte de esta comodidad con el pad se debe a que, como shooter de hace más de 20 años, vamos a apuntar únicamente mediante un eje horizontal, esto quiere decir que no podremos mirar hacia arriba o abajo sino únicamente hacia izquierda y derecha -y por supuesto movernos hacia delante o hacia atrás-. A pesar de esto, el juego no conlleva problemas en este aspecto más allá de que queramos mirar algo que está en una zona superior y no podamos, pero así es como fue diseñado el juego en su momento y así se ha respetado.
El combate es puro DOOM, jugabilidad frenética en la que montones de enemigos nos vendrán por todos lados y quedarnos quietos un solo segundo puede suponer la muerte. Es cierto que ya desde el primer nivel nos proporcionan la motosierra, una de las armas más poderosas del juego que puede hacer que los primeros compases se hagan demasiado fáciles, pero realmente ofrece una falsa sensación de seguridad para que nos confiemos, pues cuanto más avancemos iremos viendo que esta arma no es un «seguro de vida» y más pronto que tarde descartaremos su uso en favor de las armas de fuego. Si morimos nos toca comenzar todo el nivel desde el principio perdiendo armas y equipamiento, por lo que es bastante fácil caer en la tentación de abusar del guardado/cargado rápido que nos va a salvar de muchos apuros, pero si decidimos «jugar limpio» el juego se convierte en un auténtico reto.
En cuanto al apartado visual, como dije antes el juego alcanza una resolución de 4K y 60 fps, lo que dota al juego de aún más dinamismo y le libra de esa sensación de pesadez y de estar desfasado en el tiempo. Es cierto que con las texturas se podría haber hecho un mejor trabajo, quizás incluir un pack de texturas HD, pero tal como están da el apaño y siguen luciendo bien a día de hoy, dando un sabor añejo. En cuanto al sonido, lamentablemente en esta entrega no contamos con ningún tipo de composición musical como sí ocurría con la primera y segunda entrega, aunque sí contaremos con todo el banco de sonidos habitual de la saga, y además con el añadido de tener los textos en español. En ese sentido, poco más se puede pedir.
En definitiva, DOOM 64 nos trae de regreso uno de los juegos más demandados por la comunidad y además con un lavado de cara muy bueno que hará las delicias de todos los fans. Quizás la mayor pega es que su público objetivo sea quienes ya jugaron al original en su momento o los que vivieron el lanzamiento de las primeras entregas, ya curtidos en este tipo de juegos y en lo retro, pero si algún jugador más joven se atreve a darle una oportunidad, que sepa que va a encontrar aquí un juegazo que sigue dando la talla incluso hoy día.
Este análisis ha sido realizado mediante una copia cedida por Ziran
