La mitología y el folclore japonés siempre han sido un recurso a los que muchos estudios de videojuegos han sabido sacar muy buen partido. La riqueza cultural del país del sol naciente siempre ha permitido crear videojuegos basados en estos elementos que ya nos resultan familiares, y que se usan en muchas producciones tanto niponas como occidentales. En 33bits hemos tratado recientemente títulos como Trek to Yomi, Pocky & Rocky Reshrined, GetsuFumaDen: Undying Moon, Yomawari: Lost in the Dark o PROJECT ZERO: Mask of the Lunar Eclipse, juegos muy diferentes entre sí pero todos ellos nacidos con una fuerte inspiración en la compleja mitología japonesa. ONI: Camino a ser el Oni más poderoso nace también de estos cuentos y leyendas, aunque dándole una interesante vuelta de tuerca.

Uno de los cuentos tradicionales más famosos en el folclore japonés es la historia de Momotaro, el niño que nació de un melocotón gigante. Una pareja de ancianos sin hijos fueron bendecidos al encontrar un melocotón gigante del que nació Momotaro. Cuando Momotaro creció se convirtió en un gran héroe y una de sus hazañas fue recuperar un tesoro de la isla de Onigashima -la isla de los Onis o demonios- donde con la ayuda de un mono, un perro y un faisán consiguió acabar con todos los Onis y conseguir el tesoro. Partiendo de este cuento, KENEI DESIGN ha decidido darle la vuelta a la historia representando a Momotaro como el malvado enemigo a batir y a los Onis como sus «inocentes» víctimas.

Comenzaremos la aventura como Kuuta, un valiente Oni que viaja desde la isla de Onigashima a la isla de Kisejima con el claro objetivo de entrenar y hacerse el Oni más fuerte. La isla de Kisejima es un campo de entrenamiento para Onis donde si se superan una serie de pruebas, se puede conseguir el poder necesario para enfrentarse a Momotaro y acabar con la persecución a los Oni. Kuuta puede moverse por la isla libremente, aunque varias barreras mágicas van acotando la zona de juego y requerirá que comencemos a superar pruebas para que esta zona se expanda y podamos llegar más lejos. Estas pruebas serán de combate -con algunas variaciones como proteger a un aliado- y las iremos enfrentando una a una -aunque se pueden repetir-.

Ya que las pruebas están tan enfocadas en el combate, Kuuta tendrá a su disposición una porra con la que realizar un ataque básico o un ataque cargado circular. También podremos activar golpes especiales devastadores cuando estemos listos para ello. Pero atacar a los enemigos no será suficiente, ya que estos al ser Onis solo podrán ser destruidos si acabamos con su alma también. Por consiguiente tendremos que golpear a los enemigos hasta que aparezcan sus almas, y antes de que estas vuelvan a sus cuerpos, acabar con ellas una a una o en un espectacular combo en cadena donde literalmente nos lanzaremos contra las almas enemigas acabando con todas ellas en apenas unos instantes.

Pero el combate aún ofrece otra mecánica jugable, el uso del fantasma Kazemaru, un amigo de Kuuta que podremos controlar con el stick derecho si antes pulsamos el botón R. Kazemaru puede atacar efectivamente a los Onis enemigos y extraerles el alma sin mucho esfuerzo para que Kuuta solo tenga que dar cuenta de ellas, y tendrá al alcance otras habilidades de soporte para Kuuta conforme avance la aventura. El manejo dual puede parecer confuso al principio pero con un poco de práctica conseguiremos resultados muy interesantes, sobre todo en pruebas donde se concentren gran cantidad de enemigos, ya que Kazemaru puede extraer las almas enemigas a más velocidad que Kuuta -que lo hace a garrotazos-, y este puede enfocarse en acabar con las almas enemigas mediante un combo.

Cuando no estemos con las pruebas podremos explorar Kisejima y recolectar setas -la moneda del juego-, ver las diferentes notas dejadas por otros Onis,  e interactuar con Kanna. Kanna es una chica humana que no sabe como ha llegado a la isla y con la que en cierto modo Kuuta simpatizará, creándose entre ellos una bonita relación de amistad y un vínculo que no nos dejará indiferentes. Otra de las tareas a realizar es capturar almas perdidas para mejorar nuestra cantidad de corazones -un mínimo de corazones será requisito de alguna de las pruebas-, que realizaremos junto a Kazemaru y que nos llevará a localizar esas almas perdidas, capturarlas, y llevarlas hasta la estatua de guardado, con una alta posibilidad de que un gran Oni nos persiga y no podamos más que huir para salvar la vida.

Audiovisualmente ONI: Camino a ser el Oni más poderoso es tan peculiar como su propuesta. Artísticamente es hermoso y sus diseños son simpáticos y agradables, aunque a la vez guardan cierto toque clásico heredado del folclore japonés -el diseño de algunos Onis o el de Kanna por ejemplo-. Si hablamos de rendimiento, encontraremos un juego bastante estable aunque la versión de Nintendo Switch sufre de algunas caídas de frames en los momentos de mayor exigencia, nada grave pero digno de mencionar. En cuanto a la banda sonora nos vamos a encontrar una sorpresa inesperada, pues en lugar de utilizar sonidos de cuerda y viento clásicos, tenemos temas electro y baladas cantadas, lo cual es inesperado pero no encaja mal.

ONI: Camino a ser el Oni más poderoso es una aventura diferente y se siente así. Se han tomado decisiones bastante valientes y originales, como la de crear una historia dándole la vuelta a un cuento clásico, la estructura del juego por áreas y pruebas, o la narrativa emocionante de la relación entre Kuuta y Kanna. El combate también es bastante diferente con el uso de Kazemaru que viene a dar la profundidad que complementa el estilo simple de Kuuta. E incluso nos vamos a encontrar una banda sonora totalmente inesperada. Se nota el buen hacer de KENEI DESIGN y la originalidad con la que han dotado a su obra, pero estas decisiones de diseño pueden también jugar en su contra, pues la estructura de misiones -y que alguna tenga requerimientos propios- puede invitar a la repetitividad, y no hay muchos más elementos -salvo la historia de Kuuta y Kanna- que nos pudiera sacar de ella. Aún así ONI: Camino a ser el Oni más poderoso es un juego notable, una bonita historia contada desde otro punto de vista.

 


Este análisis ha sido realizado en Nintendo Switch mediante una copia cedida por Clouded Leopard Entertainment