Análisis

El 15 de diciembre de 2019, Metro Exodus llegó por primera vez a nuestras pantallas de la mano del equipo de desarrollo de 4A Games y las distribuidoras Deep Silver y Koch Media. Ahora, con motivo del lanzamiento de las consolas de nueva generación –Playstation 5 y Xbox Series- han lanzado una nueva versión de este popular juego postapocalíptico que llega a nuestras pantallas con una resolución en 40K a 60 FPS y Ray Tracing

Aparte de esto, Metro Exodus Complete Edition es el mismo juego que ya viera la luz el pasado 2019 pero al que se le han incluido un par de expansiones –The Two Colonels y Sam’s Story– para atraer al jugador que ya lo jugó en su día. Cabe recordar que hace apenas unos meses tuvimos la ocasión de analizar la versión de este título que llegó a Pc y cuyo análisis podéis encontrar aquí.

Para los que aún no habéis disfrutado del último título de esta gran saga basada en las novelas de Dmitry Glukhovsky, en Metro Exodus nos volvemos a meter en la piel de Artyom, un habitante de Moscú que hasta el momento había estado viviendo junto a los supervivientes de la guerra en los túneles del metro –y en zonas cubiertas-, ya que la vida en la superficie es inviable debido a la contaminación que irradia el ambiente.

En esta entrega, Artyom, su familia y el resto de Spartans viajan en el tren Aurora por toda Rusia en busca de un nuevo hogar –todo esto consecuencia de una señal de radio capturada por nuestro protagonista-. A partir de aquí comienza nuestra aventura donde deberemos ser precavidos al movernos por zonas hostiles, teniendo muy presente como hay que gestionar los diversos recursos de los que disponemos – filtros de aire, botiquines, munición, etc…-.

El juego se desarrolla en un mundo abierto por lo que podemos desviarnos cuando nos plazca de la misión principal para buscar suministros, explorar terrenos desconocidos o completar alguna misión secundaria que nos haya asignado cualquier compañero del tren.

Si en algún momento nos perdemos, bastará con consultar la brújula y el mapa que tenemos a nuestra disposición para volver a ponernos en marcha. Artyom también cuenta con un contador Geiger que lleva equipado en la muñeca y que sirve para ver el nivel de radiación de la zona donde nos encontramos –si el nivel de contaminación es elevado, el personaje empezará a emitir sonidos de fatiga indicándonos que debemos ponernos la máscara NBQ-.

Además, accediendo a la mochila tendremos la posibilidad de mejorar y fabricar diferentes suministros básicos que nos pueden ser de gran ayuda en nuestra misión. Por otra parte, en diferentes zonas nos encontraremos con bancos de trabajo que nos servirán para limpiar y mejorar nuestro armamento, así como crear una mejor protección para nuestro personaje.

La jugabilidad es en primera persona, por lo que lo único que veremos del personaje serán sus manos y lo que tenga equipado en ellas. Otro aspecto importante de este apartado es el sigilo ya que nos tocará adentrarnos en zonas repletas de enemigos y es mejor pasar desapercibido e ir eliminando con nuestro cuchillo o incapacitando a nuestros adversarios de uno en uno que entrar en una batalla campal contra todos donde podemos acabar mal –sobre todo porque la munición es bastante limitada y es probable que nos quedemos sin balas antes de acabar con todos-.

Una vez explicado todo lo relacionado con el juego base, es hora de adentrarse en el apartado técnico que es donde encontramos las novedades. En primer lugar hay que hablar de la genialidad del mando DualSense de Playstation 5 donde la vibración y la funcionalidad de los gatillos crean una sensación única al empuñar el arma. Nos hemos encontrado con el arma encasquillada y el gatillo de disparo –R2- no ha completado el recorrido completo, dándonos esa sensación de bloqueo del arma.

Por otra parte, hemos tenido la posibilidad de probar el juego con los auriculares Pulse 3D que lanzó Sony junto a su nueva consola y el sonido que emite es muy envolvente de tal manera que podemos ser capaces de localizar la fuente de un sonido gracias al sonido tridimensional que Playstation 5 ofrece. La sensación de inmersión es de aplaudir, ya que en todo momento parece que nos encontramos metidos de lleno en el juego y evadiéndonos de la realidad que nos rodea.

Otro punto importante que hay que destacar de esta nueva versión es el tiempo de carga de pantalla. En ésta nos encontramos con una mejora destacable en los tiempos de carga con respecto al título original donde la duración de la carga era bastante amplia llegando a ser pesada la espera, todo ello gracias al SSD implementado en la consola.

En cuanto al apartado gráfico, hay que reseñar que la tasa de frames pasa de 30 a 60 por segundo mejorando visiblemente la experiencia de juego, ya que funciona con mayor fluidez. Aparte de esto, hay que destacar que Metro Exodus es de los primeros títulos en incluir ray tracing y DLSS.

Llegados a este punto, toca hacerse la pregunta: ¿Merece la pena jugar a este título de nuevo? Si no habéis tenido ocasión de probar este juego en el pasado y os gustan los shooter en primera persona, la respuesta es un Sí rotundo. Y es que estamos ante la versión más completa y mejorada del juego y es una ocasión ideal para probarlo.

Si por el contrario ya habéis disfrutado de esta aventura en la anterior generación, ya es decisión de cada jugador valorar si merece o no la pena dar otra vuelta a este título. Si os gustó la saga Metro, os recomiendo que le deis una segunda vuelta a la última entrega porque no os va a defraudar.