Muchos no conoceréis a David Münnich ni a su pequeño universo, y es que Supraland Six Inches Under no es su primer título bajo su empresa Supragames. Su idea comenzó con el experimental y desenfadado Supraball, título que empezó a desarrollarse en 2012 y acabó en 2019, poco después, pasando un poco desapercibido, surgió Supraland y su pequeño DLC: Crash. La idea era simple, combinar la grandeza de tres grandes sagas como Metroid, Portal y The Legend of Zelda y lo cierto es que Supraland luce como un genial juego de exploración cargado de puzzles con unos cuantos puzzles.
Pero basta de hablar de su universo y vamos al título que nos concierne. Lo cierto es que esta vez hablaremos sobre Supraland Six Inches Under, un juego que partió de la premisa de ser un DLC y fue cada vez más y más grande, llegandose a considerar Supraland 1.5. Este fue creado como motivo experimental para enseñar las herramientas a los nuevos miembros del equipo e implementar nuevas mecánicas, no se trata de una aventura novedosa pero si te gustó la primera entrega, estás tardando en adquirirla.
Mucho reino para poco espacio
El universo de Supraland siempre ha estado dividido por dos grandes bandos, los muñecos de arcilla rojos y los muñecos azules, en esta ocasión tomaremos el control de plomero, un intrépido azulón que deberá salir de exploración seis pulgadas por debajo del reino de Supraland, y es que la historia comienza en la caja de arena de un niño y los escenarios, son los mundos que éste crea. Bajo tierra, Plomero encontrará una nueva civilización que buscará su ayuda, convirtiéndose en su salvador. La historia no es una de las partes más destacables de la aventura pero tiene suficiente miga como para sorprender en más de una ocasión, ya sea con su sentido del humor o algún que otro momento tronchante.
Mecánicamente, estamos ante un metroidvania en 1ª persona con toques de fps y muchos puzles. El juego cuenta con el típico sistema de backtracking típico de los juegos del género y es que sin determinados elementos no podremos progresar por ciertos lugares. En esta ocasión contaremos con 7 habilidades y herramientas principales. Esta vez nuestra principal arma será el pico, este nos sirve tanto para destruir enemigos como materiales. Además encontraremos un rayo de fuerza, que nos servirá para conectar materiales y un translocador que nos permitirá teletransportarnos gracias a su tecnología. También encontraremos un cubo de fuerza, muy similar a los que utilizaremos en Qube y un cañón que dispara fuego. Todos estos power-ups incrementarán la facilidad con la que poder completar los cientos de rompecabezas del juego.
Exploración, Puzles y Combate
El juego, por otra parte, tiene 3 apartados muy notables, dicho por sus propios desarrolladores. Lo cierto es que la mayor parte del tiempo estamos ante un juego de exploración, indagar sobre cada rincón nos otorgará bonificaciones como +5% de daño crítico o incremento de salud. Lo cierto es que gran parte de las mejoras se repiten con respecto al primer título pero también encontramos alguna más novedosa. En el endgame es de apreciar el trabajo que se realiza, del cual no puedo spoilear mucho más, pero gracias a ello encontrar los 140 tesoros, 25 mejoras y 79 secretos resulta más fácil de adquirir.
Por otra parte, el mayor pilar del juego reside en sus puzles, en la historia principal su dificultad se ve reducida, aunque con alguno, tendremos que pensar algo más. En cambio, donde realmente encontramos dificultad es en sus rompecabezas secundarios. Estos no serán muy difíciles de encontrar, desde el propio menú de pausa, nos dan un breve consejo para encontrar estos, y es que en ocasiones solo tendremos que hablar con algún que otro npc, este a cambio nos dará una mejora o una nueva habilidad. Algo similar ocurrirá con las misiones de la historia, aunque siempre tendremos la misión actual mostrada en la parte superior derecha de la pantalla en un bocadillo amarillo. En fin, todos los puzles tienen múltiples soluciones por lo que sí te ves inspirado resolviendo alguno, es porque ha sido pensado así. Por lo general las soluciones son sencillas, por lo que no pienses mucho que te acabas atascando.
La última parte y la más floja del producto es su sistema de combate, lo bueno es que se ha reducido únicamente al 5% del juego y los enemigos no reaparecen. Cosa que tocaba bastante las narices en su entrega anterior, también se han diseñado nuevos tipos de enemigos, en total unos 6 tipos de enemigos con mecánicas diferentes para que no se haga muy tedioso este apartado, aún asi sigue siendo el apartado más flojo de la aventura.
Hablando del apartado visual, el título no se notan mejoras notables con el anterior título. En esta ocasión encontramos zonas formadas por colores muy vivos y otras más oscuras, pues piensa que estas 6 pulgadas se encuentran por debajo del reino de Supraland. La paleta luce de fábula y es una delicia avanzar por su diminuto mundo. Cada miembro del equipo creó 2 zonas del videojuego, por lo que hay cosas realmente locas.
En el apartado sonoro decir que el título cuenta con una pequeña canción dedicada a los créditos y una melodía y sonidos ambientales que nos acompañarán durante toda la aventura, no es su parte más notable pero es de admirar que también fuera compuesta por David Münnich. Pero, si hablamos de algo que no acaba de funcionar es su traducción, en este caso un poco pobre pero 100% entendible, lo cierto es que el título está traducido en 15 idiomas incluyendo el español de hispanoamérica.
En conclusión, Supraland es un título muy bueno, sus puzles están al nivel de los mejores juegos del género como The Talos Principle y The Witness. Por lo general, solo puedo recomendarlo, el titulo cuenta con una duración excelente, como máximo se te puede ir a 20 horas y posee 53 logros para los más completistas, aunque antes que aventurarse en Supraland: Six Inches Under, mejor juega su primer título para entender mejor éste.
Este análisis ha sido realizado en PC mediante una copia cedida por Supragames