¿Quién no recuerda a Crash Bandicoot? Una de las mascotas más icónicas de los años 90 junto a Mario y Sonic, ondeando con orgullo la bandera de Sony en aquel buque insignia que fue PlayStation, la primera consola de la multinacional nipona. Tras una trilogía de plataformas y un enorme juego de carreras, el personaje fue cayendo poco a poco en el olvido con entregas cuya calidad iban cuesta abajo y sin frenos hasta alcanzar un punto cuya redención parecía imposible… hasta hace poco.
Hace dos años Sony anunció una colaboración con Activision para traer la trilogía original del marsupial anaranjado a PlayStation 4. Dicha trilogía rehecha, desarrollada por Vicarious Visions, se materializó al final exactamente un año atrás. El éxito fue descomunal: la crítica fue muy positiva, las reservas se desbordaban, se batieron récords de ventas y se sobrepasaron todas las expectativas del estudio californiano que decidió dar luz verde al proyecto junto con Sony. Crash parecía haber vuelto por todo lo alto, N. Sane Trilogy era —y es— el pequeño destello de luz que todavía alberga la esperanza de volver a ver al personaje a la altura de sus mejores tiempos. Pero la cosa no acabó ahí.
Desde que N. Sane Trilogy se anunció nunca se evaporó el escepticismo sobre si esta trilogía era exclusiva para PlayStation 4: Activision y Sony no aclaraban nada, básicamente hablaban sin decir demasiado. Los fans daban vueltas (y pugnaban en los foros) defendiendo que la multiplataformidad de nuestro peludo amigo naranja era inevitable mientras otros fans creían a pies juntillas que Crash había vuelto a PlayStation 4 para jamás volver a dejar la casa que Universal en su época le obligó abandonar. Finalmente, en marzo de este año, Activision rompe su silencio y nos da la sorpresa que era un secreto a voces: Crash Bandicoot N. Sane Trilogy saldría en el resto de plataformas actuales: Xbox One, Nintendo Switch y, por primera vez en la historia de la franquicia, PC.
A fecha de hoy, Crash Bandicoot ya es disfrutable en todas las plataformas actuales con mejoras con respecto a la versión de PlayStation 4 (que también las recibe vía parche) y un nuevo nivel creado desde cero por Vicarious Visions llamado «Future Tense». ¿Qué tal le habrá sentado el año de espera con respecto a PlayStation 4 a nuestro buen bichejo australiano? Cogeos un zumo de frutas Wumpa porque en esta review comentaré en detalle el juego y las versiones de PC y Nintendo Switch. WOAH!
Crash Bandicoot: Más justo con el jugador sin sacrificar dificultad
El juego de la trilogía que más se beneficia de las mejoras de esta remasterización es sin duda el primer Crash Bandicoot. La versión original de PlayStation era un juego muy difícil e injusto con el jugador: solo podías guardar la partida si conseguías la gema de un nivel o completabas con éxito las fases Bonus, en las cuales por cierto tenías solo una oportunidad, si fallabas te tocaba reiniciar el nivel entero; y además tenías que conseguir las gemas de los niveles rompiendo las cajas sin morir más de una vez. En la remasterización se han añadido todas las mejoras que se introdujeron a partir de Crash Bandicoot 2: sistema de guardado manual en el mapa sin requerimiento alguno, poder repetir las fases Bonus si fallabas y eliminar el límite de muertes para obtener las gemas básicas de los niveles. Para las gemas de colores se sigue manteniendo el requisito de completar el nivel sin morir, un auténtico desafío para el que se atreva. Vicarious Visions ha hecho un gran trabajo eliminando las taras más injustas para el jugador sin necesidad de reducir la dificultad del juego, el cual creedme, sigue siendo tan difícil como cuando salió 22 años atrás.
Una hermana, reliquias y zapatillas
Por primera vez en la saga, además de jugar con Crash, también podremos hacerlo como su hermana Coco en las tres entregas. Si bien no hay diferencias jugables entre ambos personajes, es un detalle simpático que se agradece para que los jugadores elijamos al personaje que más nos guste. En las dos primeras entregas, para desbloquear la posibilidad es necesario derrotar al primer jefe de cada juego.
Aparte de las mejoras indicadas arriba, contamos como novedad en la primera y segunda entrega la posibilidad de obtener las tan codiciadas reliquias del tiempo que debutaron en Crash Bandicoot Warped. Las reliquias del tiempo son básicamente un modo contrarreloj introducido en el juego que nos recompensa con unos tesoros que en Crash Bandicoot Warped eran esenciales para obtener todas las gemas y así alcanzar el final verdadero del juego. Aunque tanto en Crash Bandicoot 1 como en Crash Bandicoot 2 no son necesarias, los completistas seguro que no podrán resistirse a, al menos, conseguir las reliquias de oro. Ya aviso que es todo un reto pues el primer Crash no cuenta con ninguna clase de ventaja o habilidad que facilite la tarea, y algunos tiempos objetivo están bastante ajustados. En Crash Bandicoot 2, en cambio, contaremos con la habilidad de las zapatillas de Crash Bandicoot Warped para correr más rápido una vez completemos el juego la primera vez.
Apartado técnico
Nítido, colorido y espectacular: así resumiría la recreación visual del título original de Naughty Dog a los estándares técnicos actuales. Vicarious Visions ha llevado con un enorme respeto la obra original, y uno se da cuenta rápidamente de ello cuando observa el juego por primera vez: los decorados, los elementos de la interfaz, los diseños de los enemigos… Si hay que poner alguna pega sería en lo referente a ciertos niveles donde la iluminación parece algo artificial o la elección de paletas de colores que personalmente no he visto del todo acertadas, en niveles como The Lost City y Sunset Vista, los cuales en la remasterización se ven algo más iluminados que aquel tono rojizo y rosado que teñía el atardecer en el juego original. Mención muy especial a la calidad de las animaciones de Crash y Coco, los personajes principales: están llenas de detalles sutiles como las físicas de sus orejas cuando realizan acciones o incluso están quietos.
La banda sonora es tan fiel a la trilogía original como cabría esperar. Si bien hay melodías que me gustan más que las originales, hay algunas que creo que no dan la talla y suenan mejor en sus versiones clásicas. El trabajo de doblaje al castellano me resulta más que correcto. Para la voz del Doctor Cortex en España han vuelto a contar con Carlos del Pino (Ned Flanders, Tyrion Lannister), quien ya puso voz al científico malvado en Crash Twinsanity y Crash Tag Team Racing. Lo mismo para Salvador Serrano que ya hizo de Aku Aku también en Twinsanity y a Marta Sainz repitiendo como Coco tras interpretar al mismo personaje en Crash of the Titans y Crash Mind Over Mutant. Si bien algunas frases creo que no están a la altura del juego original (lo sé, los Crash originales nunca han abundado en diálogos), cumplen con nota. Al menos en esta versión no tenemos a Dingodile con acento mejicano forzado (nunca entendí el motivo).
Stormy Ascent: La prueba de fuego para todo fan de la trilogía
Si habéis jugado al primer Crash Bandicoot, quizás recordéis Slippery Climb, uno de los niveles más irritantes de los fans de la saga: plataformas deslizantes, plataformas flotantes con patrones difíciles de seguir, pájaros flotando y pinchos por doquier.
Pues eso es nada en comparación con el nivel que Vicarious Visions ha rescatado del código original del juego: Stormy Ascent. Un nivel que la mismísima Naughty Dog descartó porque, en palabras de ellos, «era demasiado difícil». Palabras mayores teniendo en cuenta que el primer título de la trilogía ya de por sí es el más difícil de todos. Y no les falta razón. Todo lo que vimos en Slippery Climb se manifiesta elevado a la máxima potencia en este escenario hasta ahora inédito. Las plataformas requieren todavía mayor control del ritmo, calcular (o intentarlo) los patrones de las plataformas giratorias y la altura de los pájaros sobre los que saltar para caer con buen pie… o simplemente una combinación de ambos. En resumen: este nivel parece la manifestación de un jugador frustrado con el género de plataformas. Más de un mando o televisor saldrá volando por las ventanas de nuestras casas ante tamaña frustración de nivel.
Future Tense: Explotando al máximo el diseño de niveles
Si Stormy Ascent es un nivel inédito rescatado, el próximo que voy a comentar es una demostración de buenas intenciones de Vicarious Visions. El estudio nos presenta su primer nivel original de la trilogía, desarrollado íntegramente por el estudio neoyorquino: Future Tense. Este trigésimo primer nivel de Crash Bandicoot Warped explota al máximo las capacidades plataformeras del marsupial, haciendo un uso inteligente de las plataformas como puzles. Buena muestra de ello es en la fase Bonus por ejemplo. Lograr las 145 cajas no resultará moco de pavo y se requerirá de todas las habilidades obtenidas en el juego. En mi opinión, este nivel es muy original, difícil y excelentemente bien diseñado, que demuestra que el futuro de la franquicia, más que tenso, está en buenas manos con Vicarious Visions.
Versión Nintendo Switch
La versión de Switch, a cargo de Toys for Bob (estudio actualmente desarrollando Spyro Reignited Trilogy) es una de las mejores adaptaciones a la híbrida de Nintendo. Técnicamente logra mantener el tipo, a pesar de los obvios recortes que ha habido que practicar para que la consola no se desmorone intentando hacerlo funcionar: se han eliminado algunos efectos como los reflejos, el pelaje de Crash, se ha reducido la calidad de las texturas, funciona a una resolución de 720p en modo sobremesa y no baja de 480p en modo portátil. Todo ello a 30 fotogramas por segundo, los cuales pueden tener algún bajón puntual en el modo sobremesa en niveles como Hog Wild o en niveles con grandes cantidades de cajas TNT explotando. En modo portátil no se ha apreciado ni una sola bajada de rendimiento, siendo sólido como una roca en todo momento.
A pesar de todo esto que comento puedo decir con total seguridad a los poseedores de una Switch que pueden comprarlo sin miedo, pues pese a todo lo comentado más arriba el juego luce acorde a lo esperado, sin envidiar al resto de versiones, las cuales son técnicamente superiores, por supuesto. El juego, pasa de ocupar 30 GB en el resto de versiones a menos de 6 GB en Switch. No cuenta con ningún parche de lanzamiento ni requiere ninguna descarga complementaria o instalación previa: es meter la tarjeta y jugar. En modo portátil, aunque 480p pueda sonar a una resolución extremadamente baja, la borrosidad que se aprecia en la pantalla de 6,2 pulgadas es bastante baja, al menos por parte de un servidor. En resumen, gráficamente N. Sane Trilogy supone una versión muy digna en Nintendo Switch.
Como pega me gustaría comentar que el control con el stick del joy-con izquierdo es bastante incómodo e impreciso para mi gusto, aunque esto es más bien culpa del periférico y de mis manos grandes. Conecté por gusto un mando de Gamecube que tenía por ahí guardado y la experiencia fue mucho más gratificante, simplemente un detalle que quería comentar para los que puedan tener manos grandes y jueguen con los Joy-cons. Como último detalle, los marcadores del modo Contrarreloj están ausentes en esta versión, por lo que no podréis comparar tiempos con vuestros amigos por internet. Un pequeño revés, pero nada importante si no sois de picaros con vuestros amigos por quién hace The High Road en menos tiempo.
Versión PlayStation 4: un año después
A pesar de haber salido hace un año, la versión PlayStation 4 tampoco se ha quedado sola en el lanzamiento multiplataforma de N. Sane Trilogy. Aprovechando el lanzamiento en nuevas plataformas, Vicarious Visions ha aprovechado para mejorar y corregir algunos elementos que se encontraron en la plataforma de Sony. El resultado deja al título a la altura del resto de plataformas: tiempos de carga mucho más cortos, poder saltar la larga introducción, mejoras en las físicas y sistema de detección de impactos, los niveles Stormy Ascent y Future Tense gratuitos, y otras sutiles mejoras más.
Versión PC: 60 FPS, un juego distinto.
Y no exagero. Crash debuta en ordenadores por primera vez en 22 años con una más que excelente conversión realizada por Iron Galaxy Studios (Killer Instinct Temporada 3). La versión para la plataforma de Valve es, fácilmente, la mejor versión de todas. Para empezar como novedad importante el título por primera vez es jugable a 60 fotogramas por segundo (e incluso más si tenéis monitores de más de 60 Hz), un cambio más que importante en la jugabilidad porque nos permite mayor control y precisión en las plataformas al tener un mayor tiempo de respuesta en nuestros controles que si lo jugáramos a 30 FPS. No miento, jugué tanto las versiones de consola como la de PC y no hay color: el control en PC es mucho más cómodo y satisfactorio gracias a su mayor fluidez.
A parte de la tasa de imágenes, contamos con mejor calidad de texturas, sombras, soporte 4K, cómodos controles con teclado y ratón y una excelente optimización que permite que hasta el equipo más modesto pueda mover el juego a 30 FPS en Full HD.
¿Qué versión compro?
Es difícil decirlo. Todas las versiones destacan en algo pero haría la elección basándome en los siguientes criterios. Si valoráis la calidad visual y nitidez PS4 o Xbox son las elecciones acertadas, y si tenéis las versiones potentes de dichas consolas Xbox One X es la versión a elegir por su resolución 4K. Si queréis mayor fluidez (y al mismo tiempo mejores gráficos), la versión PC es vuestra elección siempre y cuando vuestro equipo lo permita. Si lo que queréis es jugarlo donde queráis la versión Switch es la única donde no os defraudará en ese aspecto debido a su característica de ser una consola portátil. Elijáis la versión que elijáis, habréis hecho la elección adecuada pues todas las versiones son excelentes.
En definitiva
Crash Bandicoot N. Sane Trilogy es una de las mejores remasterizaciones hechas hasta la fecha. Tres juegos mejorados jugable y técnicamente que siguen siendo tan divertidos como antaño. Precio reducido y disponible en cualquier plataforma (aunque haya tocado esperar un año). Tanto a los veteranos que conocen al marsupial como a los que lo descubren por primera vez les recomiendo por completo esta trilogía, porque no defraudará a nadie.