De la mano de Inverge Studios nos llega Effie, una aventura de las de antes. Y es triste tener que usar el término «las de antes», pero es así, si me pongo a rememorar este tipo de juegos que siguen la estela de los Rayman 3D, o de los Maximo de Capcom, pocas opciones se me vienen a la cabeza, y si ya pienso en que alguna de esas pocas opciones, sea un juego de gran presupuesto, me quedo en blanco. En cada generación sucede que hay géneros que tienen su momento dulce, y otros que alcanzan sus horas bajas. En la generación del sandbox y los juegos con multijugador online competitivo, estas aventuras de exploración, recolección, combate, plataformas, y sencillos puzles que vieron su despegue en las 32 y 64 bits, y su auge en las 128 bits, viven ahora en el ostracismo.
Pero el estudio valenciano Inverge Studios, gracias al apoyo del programa PlayStation Talents, ha querido recuperar lo mejor de aquel género, y doy fe de que en cierto modo lo ha conseguido, al menos a la hora de transmitir sensaciones casi olvidadas. Pero veamos primero que nos ofrece Effie, su estructura como cuento, y su argumento, simple pero suficiente para un tipo de juego que tiene en la jugabilidad y diversión sus grandes valedores.
Effie nos presenta una historia simple, muy ligera y sin sorpresas, un pequeño acompañante en lugar del plato fuerte, este género no necesita más. Comenzaremos viendo a una niña llamada Effie con su abuelo sentado frente a la chimenea, y como este le contará un cuento a su nieta. La historia de Galand, su historia. Galand era un chico joven, bendecido con el don de la fuerza, era realmente fuerte, pero también un holgazán. Una noche una anciana acude a él para pedirle ayuda con su carro, y la simple idea de moverse e ir a ayudar hace que Garland rehúse a ello. Entonces la anciana se revela como Melira, una malvada hechicera que maldice a Garland con una vejez anticipada.
Garland arrepentido y aterrorizado por su nueva apariencia, decide ir a ver a los ancianos protectores a su templo, que funcionará como una especie de tutorial para el jugador, y que nos servirá para conseguir nuestra misión principal, acabar con Melira y purificar sus gemas del mal, y la herramienta para conseguirlo, el escudo RuneStone. Desde ese momento el viejo Garland que esta contando el cuento a su nieta Effie pasa a ser el narrador de la aventura, y el nuevo viejo Garland será el personaje que manejaremos en lo que queda de templo de los ancianos protectores, y desde ese momento, en llanos rojos de Oblena, donde encontraremos tres ciudades, más el templo final de Melira, pero también pequeñas zonas con desafíos adicionales.
Así que nos encontraremos con un juego de plataformas 3D, con elementos de exploración, combate y sencillos acertijos. En la parte de las plataformas, contaremos con un doble salto y la opción de engancharnos a bordes y salientes, no es muy exigente, pero habrán zonas que requerirán una buena coordinación si no queremos repetir la zona. La exploración esta perfectamente integrada en los escenarios, ya sea para encontrar cofres con vida, runas, o reliquias coleccionables que nos presentan el lore de Oblena. Con las runas repartidas y escondidas en los escenarios, iremos subiendo de nivel y haciendo crecer nuestra barra de vida y resistencia. El combate es bastante sencillo y para nada profundo. Cuando tengamos el escudo, tendremos el ataque normal, y el ataque fuerte, más una especie de escudo que nos protege por un tiempo. Conforme avancemos, iremos consiguiendo más habilidades con el escudo. Y la parte de los puzles, queda relegada a sencillos acertijos para abrir ciertas zonas o encontrar una salida, en especial con interruptores.
Entre los distintos niveles del juego, 5 en total, tendremos un gran mapeado que actúa de hub central. Este mapeado, a pesar de que pueda parecer una transición, también contiene sus propios retos, disponibles en determinadas áreas, que nos llevarán desde competir en una carrera sobre nuestro escudo, o resolver ciertos puzles para acceder a una reliquia. Estas llanuras rojas, nombre bastante descriptivo, también contienen runas, cofres y enemigos, por lo que merecerá la pena echarle un vistazo en lugar de ir directamente de ciudad en ciudad. Y una gran adición, en este escenario nos podremos desplazar a toda velocidad, deslizandonos con el escudo, algo bastante divertido.
El apartado visual de Effie es solido, colorido, apoyándose en los contrastes de color, lleno de detalles, y bastante simpático. Todo el juego tiene un estilo desenfadado, que junto a un apartado técnico aceptable, solventa esta área con sólo un par de peros, los excesivos tiempos de carga y la cámara, que a pesar de comportarse la mayoría del tiempo, en alguna ocasión se empeña en que demos saltos de fe. En el apartado sonoro nos llevaremos una grata sorpresa al escuchar melodías de gran nivel y bella composición, bastante amenas. Los efectos FX estan bien, cumplen su función, y el doblaje tiene bastante calidad.
Si hay algo que no entiendo muy bien de Effie es la vejez del protagonista, pues más allá de la apariencia estética y que sirva de coartada al argumento, Garland esta hecho un chaval que parte y reparte como cualquier joven héroe que hayamos visto en otro videojuego. Da la sensación de que habían otros planes más ambiciosos que al final no se han ejecutado. Por otra parte el combate es bastante sencillo y sin profundidad, y a pesar de las habilidades que vayamos consiguiendo, se mantiene la simplicidad. No es algo necesariamente malo, pero sin reto, el combate se convierte en una mecánica inocua que ni suma ni resta, simplemente acompaña como mero trámite en cada zona. Eso si, los encuentros con Melira ya son otra historia, y mucho más interesantes.
De duración, tendremos aproximadamente unas 4 horas, 5 horas si queremos conseguir todas las reliquias y coleccionables, y hasta el platino. No es una mala duración, aunque se siente escasa, quizá una ciudad más, hubiera compactado más el título, pero presumimos que los medios han sido bastante escasos y se ha llegado hasta donde se ha podido. A pesar de todo, Effie viene a situarse en un género con poca competencia y mucho potencial, sobre todo por aquellos jugadores que echamos de menos los juegos así. Y como además, Effie hace bastantes cosas bien, es fácil recomendarlo, sobre todo si buscamos un juego divertido y poco más.
Este análisis ha sido realizado mediante una copia cedida por Inverge Studios