Si hay un nombre en el mundo del cine que evoca aventuras llenas de peligros, templos ocultos y reliquias legendarias, ese es sin duda Indiana Jones. Desde su debut cinematográfico en 1981 con En busca del arca perdida, el arqueólogo más famoso del cine se ha convertido en un icono cultural. A lo largo de cuatro décadas, hemos seguido a Indy en sus aventuras por todo el mundo, enfrentándose a nazis, sectas secretas y hasta a extraterrestres. Sus historias combinan la acción trepidante con un carisma único que el actor Harrison Ford siempre le ha imprimido al personaje, y han dado lugar a cinco películas de las cuales las tres primeras crearon escuela.

El impacto de Indiana Jones no se limita a la gran pantalla. En el mundo de los videojuegos que es el que nos interesa, hemos tenido varios juegos basados en la franquicia -no tantos como se podría esperar-, desde adaptaciones directas de las películas, hasta títulos originales como Indiana Jones and the Fate of Atlantis por nombrar a uno de los más importantes. Ahora, con Indiana Jones y el Gran Círculo, el estudio sueco MachineGames, que ha trabajado codo con codo con Lucasfilm para este título, nos invita a vivir una nueva aventura que promete ser el tributo definitivo al personaje, además de presentarnos una emocionante historia completamente canónica respecto a las películas.

Indiana Jones y el Gran Círculo arranca en 1937, poco después de los hechos de En busca del arca perdida, con algunas referencias a la infructuosa relación de nuestro héroe con Marion, la coprotagonista femenina de dicha película y que dará empaque al universo del personaje. Indy sufre un misterioso robo en la propia universidad donde trabaja y esto le lleva a iniciar una nueva aventura que sin entrar en spoilers, nos llevará a explorar lugares icónicos como el Vaticano, los templos de Gizeh y las ruinas de Sukhothai en Tailandia, cada uno de ellos lleno de secretos y referencias históricas.

Hay que destacar lo bien construida que está la personalidad de nuestro protagonista. MachineGames nos ofrece al Indy más auténtico a través de una narrativa salpicada de humor sarcástico, momentos de vulnerabilidad y valentía temeraria. Incluso los miedos clásicos de Indiana, como su fobia a las serpientes, están presentes en la aventura y nos generarán tensión y risas a partes iguales. Realmente sentiremos que estamos ante el mismo personaje de las películas, y mucha culpa de ello la tiene también el tratamiento cinematográfico de primera que se le ha dado al juego y los guiños constantes a las películas, desde el icónico sombrero y el látigo hasta un buen puñado de easter eggs. Pero también es accesible y disfrutable para quienes se acerquen a Indiana Jones por primera vez, ya que no requiere un conocimiento previo para disfrutar de la historia.

Entrando de lleno en el plano jugable, El Gran Círculo es un juego de aventuras en primera persona que combina mecánicas de acción, sigilo, exploración y resolución de puzles, logrando un equilibrio bastante interesante y que funciona en parte gracias un gran diseño de niveles con una amplitud y diversidad de situaciones que propician el correcto uso y desarrollo de todas las mecánicas propuestas. Los puzles, en particular, son uno de los puntos fuertes conforme avancemos en la aventura. Muchos de ellos están inspirados en acertijos históricos y requieren observar el entorno, interpretar pistas variadas o utilizar determinados objetos como la cámara de fotos. Algunos puzles pueden ser un poco complicados, pero el juego ofrece varios niveles de dificultad para hacerlos más accesibles y opciones de asistencia que no rompen la inmersión.

Otro punto bastante destacable y quizá el conjunto de mecánicas más importantes del juego es el sigilo y la infiltración. Hay que destacar que los escenarios, por norma general, estarán llenos de NPCs, la mayoría enemigos, y aunque Indy puede defenderse si la situación se complica, muchas veces lo deseable será pasar desapercibido, ya sea moviéndose agachado entre las sombras, usando coberturas, atacando por sorpresa y en silencio a los enemigos y escondiendo sus cuerpos, creando distracciones, o incluso disfrazándonos de distintos personajes para poder movernos con un poco más de soltura por los entornos -aún así algunos enemigos podrán reconocernos-.

Si nos falla el sigilo o preferimos enfrentar las situaciones a la tremenda, tendremos un combate enfocado en la variedad. Las peleas cuerpo a cuerpo serán en base a puñetazos con los dos puños y tendremos la opción de cubrirnos. También podremos usar objetos contundentes como palos, porras o botellas que acabarán antes con los enemigos pero que se romperán después de algunos golpes, y también podremos usar armas de fuego, que son bastante efectivas, pero cuya munición no abunda. Y, por supuesto, el látigo no solo es una herramienta útil para balancearse o resolver puzles, sino también un arma que permite desarmar enemigos o desestabilizarlos durante el combate.

Como ya hemos avanzado antes hay que destacar el maravilloso diseño de niveles, con mapeados de un tamaño muy generoso lleno de detalles, secretos, y variopintas situaciones que no nos dejará ni un segundo sin nada que hacer. Un detalle que nos sorprende es la libertad para explorar y como un escenario en apariencia limitado de repente se abre a decenas de posibilidades. Aunque la historia principal es lineal, hay áreas abiertas llenas de secretos y misiones secundarias que realmente nos invitan a resolver y que no se sienten relleno sino parte orgánica de la experiencia. Esto no solo expande la duración del juego, sino que mejora la experiencia al recompensarnos por tomarnos el tiempo de investigar cada rincón.

Audiovisualmente Indiana Jones y el Gran Círculo brilla con luz propia. Es evidente que MachineGames se desenvuelve muy bien con el motor ID Tech y han creado unos entornos que lucen impresionantes. El nivel de detalle en los escenarios es asombroso, con texturas de alta calidad y efectos de iluminación muy convincentes. Las animaciones también están a la altura. Cuando Indy realiza ciertas acciones la cámara pasa de primera a tercera persona para darle al momento más espectacularidad. La captura de movimiento y las expresiones faciales son excelentes, haciendo que los momentos de diálogo y las escenas de acción sean más cinematográficas. El apartado sonoro merece una mención especial. La banda sonora, con composiciones originales que evocan a John Williams, acompaña perfectamente cada momento, y la actuación de voz, liderada por Troy Baker como Indiana Jones, es sobresaliente, al igual que la de Carlos Segundo, encargado de poner la voz en español y que ya dobló a Harrison Ford en Indiana Jones y el dial del destino.

Indiana Jones y el Gran Círculo no solo es un gran juego por méritos propios, sino también un homenaje a una de las franquicias más queridas de los 80. MachineGames ha conseguido capturar la esencia de Indiana Jones y adaptarla al medio interactivo de una manera que se siente genuina y parte integra de la franquicia con un sentido de continuidad sorprendente. Por supuesto el título tiene ciertos elementos mejorables, comenzando por sus altísimos requerimientos técnicos para la versión de PC -requiere de forma obligatoria una tarjeta gráfica con tecnología RTX-, y siguiendo con la IA enemiga que ,salvo en el nivel alto de dificultad, le será difícil detectarnos cuando usemos el sigilo, aunque estemos en el campo visual enemigo. Para los fans de siempre, El Gran Círculo es un sueño hecho realidad que se coloca junto a Fate of Atlantis en un pedestal. Para los nuevos jugadores, es una puerta de entrada a una franquicia trepidante. En cualquier caso, esta es una aventura que merece ser vivida.