Análisis

Los amantes de los roguelike están disfrutando de una época muy fructífera para el género, gracias a títulos como Dead Cells, Hades o el fantabuloso Rogue Legacy 2. El género atraviesa un gran estado de salud y cada día son más los desarrolladores que se atreven con el desafío que es diseñar una experiencia capaz de transmitir las sensaciones que en su día experimentamos. Hoy os hablamos de uno más que ha decidido sumarse a la frondosa lista que encontramos en un género que rara vez sorprende ya. En este caso, hablamos de Neon Blight desarrollado por el único desarrollador Bleeding Tapes que junto su editora Freedom Games, conocida por títulos como el reciente Coromon que pronto llegará a Nintendo Switch. En cambio, Neon Blight por el momento solo llegará a PC -Steam/Epic-.

Esta vez encaramos la historia bajo el papel de Lara, su tío compró una tienda de armas y ella la ha heredado, así que ahora te dedicas a abastecer a los aspirantes a rebeldes en su lucha contra las megacorporaciones que gobiernan el futuro al tiempo que buscamos las armas más valiosas y mortíferas del Edén, el lugar donde nos encontramos.

Lo primero que haré es hablar sobre el género y es que muchas veces no se sabe la diferencia entre un roguelike y un roguelite. Muchas veces lleva a confusión y lo cierto es que es bastante simple. Un roguelike es aquel género en el que el elemento diferenciador principal son sus mapas, los cuales se generan de forma aleatoria, siendo cada recorrido diferente. Este tipo de juegos están pensados como si fueran una carrera de fondo en la que en cada intento llegaremos un poco más lejos. Cada run nos permitirá avanzar un poco más en nuestra aventura. Estos juegos también suelen tener una pequeña justificación para hacernos repetir una y otra vez, consiguiendo poco a poco trozos de la historia del videojuego.

«La inauguración de la gran 33Guns».

Pero lo cierto es que, como todo género, también tiene un subgénero. De forma sencilla diré que un roguelite es aquel tipo de juego donde coge ciertos elementos de los roguelike pero no cumple con todos. En este caso Neon Blight se trata de un roguelite, ya que entre otras cosas el título tiene generación procedural limitada y es que no todas nuestras runs tendrán mapas diferentes, estos solo cambiaran cuando pase 1 día en tiempo de juego, una mecánica un poco desaprovechada, pues el tiempo pasa bastante lento y no hay ninguna forma de acelerar este para que varíe.

El mapa tiene formato de metroidvania, con un sistema de misiones principales y secundarias, pero lo cierto es que no termina de convencer debido a que se encuentra bugueadisimo. Tanto que en ocasiones encontramos teletransportadores, lo cual nos permitiría avanzar rápido por sus pasajes, pero algunos no funcionan. Lo mismo ocurre con su sistema de misiones, las misiones secundarias en múltiples ocasiones no podremos completarlas y no se borrarán de la barra de registro. Las únicas que permiten avanzar y conseguir pequeñas recompensas son las principales.

Como he dicho, es un roguelite y es que otro elemento diferenciador del título es que pasaremos bastante tiempo customizando nuestra tienda, en mi caso llamada «33Guns» y obviamente vendiendo armas, al abrir nuestra tienda tendremos distintos tipos de compradores, unos trataran de sacarnos las entrañas y sacarnos armas gratis, otros solo compran objetos con beneficios pasivos como una granada que permite realizar esquivas con mayor rapidez, en cambio otros clientes solo buscarán armas. Está parte es divertida los primeros 20 minutos, luego aburre debido a la poca interacción que encontramos en el sistema compra/venta. Cuando no estemos gestionando nuestra básica tienda, iremos progresando en la aventura. Cuando pulsamos el tabulador podremos abrir una mochila para ir guardando las distintas armas y objetos que vayamos encontrando. Exploración sin límite, más bien exploración limitada y es que lo único que nos permite explorar, por así decirlo, es la inclusión de un detector de metales con el que podremos ir encontrando sumas de dinero que nos servirá para comprar nuevas armas o mejorar nuestra tienda.

Las armas en cambio se podrán conseguir de tres formas: se pueden conseguir matando enemigos -me resultó curioso que el juego está tan mal, que actualmente solo encontraremos 2 enemigos por zona del mapa, pudiendo haber ocasiones donde únicamente haya un solo enemigo, el otro estará atrapado en alguna zona inaccesible. Zonas muy amplias con poca acción, ¿Hell-Bullet? Creo que ¡NO!- Además, las armas se podrán comprar y en ciertas ocasiones podremos también encontraremos cofres que nos las proporcionarán. La selección de armas es muy limitada, existiendo poca variedad y éstas solo volverán con nosotros si eliminamos uno de los bosses de la historia principal. Por otra parte, ten cuidado con perder vida, no hay forma de recuperarla ni obtener bonus de esta, únicamente muriendo, por lo que cuidado con lo que deseas. Al morir todo se reiniciará y perderemos todas nuestras armas.

En cuanto a su apartado técnico, lo que he comentado arriba solo es la punta del iceberg. El título está plagado de fallos, en mi caso es el título con más bugs que he jugado este año. No han sido pocos los reportes que he realizado a su desarrollador para amenizarlo. Todo en el juego está bugueado, hasta la traducción en español, la cual está introducida pero no fue comprobada y en ocasiones veremos como los cuadros de diálogo se cortan, así como la propia interfaz. Además, la IA de los enemigos tiene un problema bastante serio, estos solo disparará si te ven y siempre atacarán de frente, por lo que debido a la poca cantidad de estos entre fases y su simpleza, morir a causa de estos resulta muy muy complicado.

También me he encontrado que ciertas zonas tienen partes bugueadas, las cuales no permiten progresar por culpa de un muro invisible, haciendo que la única solución para salir sea ALT + F4. Por otra parte, también encontramos que está mal pensado el tutorial, el cual en sí solo nos enseña a coger objetos y como debemos movernos usando WASD en caso de usar teclado y ratón. Muy limitado y con poca información, lo cual hace que continuamente nos golpeemos con un muro invisible de desinformación. En fin, como puedes apreciar el título está muy bugueado, siendo uno de los juegos más bug que he jugado durante este año, al menos por ahora.

En cambio, todo no iba a ser malo, su apartado gráfico pixel-art no es malo, con una colorida paleta ciberpunk llena de neones, Edén se presenta con distintos biomas bien diferenciados, siendo sin duda una característica bastante destacable del título.

En lo sonoro, el juego tiene efectos de audio, los cuales cumplen lo justo, si no fuera porque a veces estos también se buguearan, no siendo los adecuados en ocasiones y quedando momentos bastante desagradables. También, como dije anteriormente, es cierto que el título está subtitulado en 8 idiomas incluyendo el español, pero no han sido comprobados todos, por lo que es posible que haya fallos como los anteriormente mencionados.

En conclusión, su desarrollador hizo todo lo que pudo antes de su lanzamiento, pero Neon Blight ha tenido un lanzamiento muy truncado, sobre todo por su gran número de errores, los cuales, aún no han sido detectados. Van a ser necesarios unos cuantos meses para que su estado mejore, aunque añadiendo diversas mecánicas y actualizando otras, puede quedar un juego decente, pero por ahora es poco recomendable.