¿Qué es un sokoban? Sokoban fue un juego de puzles lanzado en Japón allá por principios de los años 80 donde nuestro cometido era mover unas cajas por un escenario siguiendo unos movimientos concretos para conseguir dejar dichas cajas en la posición requerida por el nivel. Al igual que otros juegos como Rogue, o recientemente Demon’s Souls, popularizó un género que pronto utilizaría como propio el mismo nombre del juego. ¿Qué pasa si lo mezclamos con las reglas y las fichas de ajedrez? Eso debió de pensar Martin Firbacher, o uno de los dos componentes de Daisy Games. ¿El resultado? SokoChess.
En SokoChess las protagonistas serán las piezas de ajedrez encima de un tablero. Y sí, jugaremos con los movimientos de dichas piezas. Pero no, nuestro objetivo no será ganar a un hipotético adversario: nuestro objetivo -como jugador de piezas blancas- será mover las piezas negras a los lugares marcados por el nivel.
Para ello, deberemos empujarlas con nuestras piezas, de forma que las tengamos que mover con un patrón determinado que tendremos que encontrar si queremos superar el nivel. Empezaremos moviendo torres, que se mueven en línea recta ya sea horizontalmente o verticalmente, de forma que tendremos que empujar las piezas contrarias de esa forma. Pero poco a poco se irán añadiendo otros tipos de pieza a nuestro repertorio: peones, alfiles, caballos… cada uno de ellos tendrá sus propios movimientos definidos, y tendremos que tenerlos en cuenta si queremos empujar correctamente las piezas que querremos mover.
Pero hay que tener cuidado, y es que las piezas contrarias también se pueden «comer» a nuestras piezas. Pon a tu torre en diagonal respecto a un peón negro, y mira como el peón se la carga dejándonos con una pieza menos. Aunque a veces esto nos servirá de recurso para mover una pieza contraria, la mayoría de las veces esta acción será causada por un error por nuestra parte. Por suerte, el juego permite deshacer todos los movimientos efectuados en el nivel, uno a uno, de forma que podremos deshacer nuestro fallo sin problema alguno.
SokoChess tiene una buena progresión de niveles, con una dificultad creciente de forma continua pero que a la vez se toma su tiempo en enseñarnos las mecánicas que va introduciendo, como nuevas piezas o nuevos elementos en el propio escenario. En general, se puede decir que la dificultad está bien medida y, aunque el juego es difícil, no se torna frustrante. Y eso es algo que se agradece.
SokoChess es un juego menor, pero sin duda gustará a los que gusten de puzles de movimiento. Y si ya sois fans del ajedrez, es un dos por uno. Además, tiene un precio reducido -4 euros al momento de escribir este artículo-, así que, si os llama la atención la idea, no lo dudéis y compradlo. Os divertiréis mientras os calentáis la cabeza.
Este análisis ha sido realizado en PC mediante una copia cedida por Daisy Games
