Si hace bien poco me acompañasteis con un juego de corte serio ambientado en el oeste de la mano de THQ Nordic, hoy seguimos con la editora, pero vamos a un terreno más animado. Solo el título ya nos llena de gozo: SpongeBob SquarePants: Battle for Bikini Bottom – Rehydrated. Si el título original era largo, este remake lo hace aún más potente. Este título es una de las apuestas del editor para el verano, pero, ¿merece la pena? Esto es Fondo de Bikini, y os voy a contar una bonita historia.
SpongeBob SquarePants: Battle for Bikini Bottom – Rehydrated –repetiré el título, porque no hay espacio para tanta palabra- es un «collectathon». Para los que no lo sepan, se trata de un plataformas donde la recolección de objetos es el elementos principal del título, por encima de cualquier otra cosa. El juego no es nuevo, se trata de un remake en toda regla de un título de PlayStation 2.
Antes de comenzar quería dejar claro toda la parte intrínseca remake, para poder hablar del juego propiamente dicho. Rehydrated es un sobrenombre perfecto para este juego, porque lo ha dejado casi perfecto. Visualmente está completamente renovado, y se agradece mucho. También han recuperado contenido perdido -en forma de jefes nuevos- e incluso añadido un modo completamente nuevo. Sin duda esta es la forma óptima de jugarlo, y el juego original ha quedado relegado a segundo plano. No hay ninguna razón para jugar al original en lugar de a esta edición.
La historia, como imaginaréis, es una excusa para el título. Plancton tiene un novedoso plan para robar la receta que tanto ansía, y por supuesto, el tiro le sale por la culata. El resultado son cientos de robots asesinos sueltos por todo Fondo de Bikini, a los que tendremos que detener mientras hacemos otras tareas menos efectistas pero igual de vitales. No hay mucho más que esto, pero tampoco hace falta.
Los objetivos del juego son claros la mayoría de las veces: recolectar objetos. El principal es la espátula de oro de Bob Esponja, que es el motor que mueve al juego. Cada zona tiene un número limitado de las mismas, y aunque no es obligatorio encontrarla todas, desde luego que es divertido y todo un reto. A veces, para conseguir cierta espátula en particular, deberemos recoger otro coleccionable propio del nivel donde nos encontremos. Esto se repetirá varias veces durante el juego, por algo se llama «collectathon». También hay otros coleccionables secundarios, como los calcetines -usados- de Patricio. Estos dos son los objetivos principales del juego, y hay un número finito de los mismos -cien de los primeros y cincuenta de los segundos-.
El siguiente coleccionable, y el más normal en cualquiera de las zonas, es la que a su vez es la moneda básica del título. Este recurso, llamado objeto brillante, es infinito, y cada vez que reiniciemos una zona volverá a aparecer por todos lados. También lo obtenemos matando enemigos, y será un recurso del que jamás habrá escasez. Sirve como moneda de cambio en el juego, porque habrá ciertas zonas o lugares que solo se abrirán si pagamos una cifra exacta de este objeto. Es divertido conseguirlo, y hace que la exploración siempre tenga algo que ofrecer. Es perfecto en el momento que revisitemos escenarios, que estarían muy vacíos sin este recurso.
La mayoría de espátulas las conseguiremos saltando de un lugar a otro. Las plataformas son básicas y es lo que haremos la mayor parte del juego. Aquí entran los tres personajes distintos. Aunque los tres tienen salto doble, cada uno tiene sus propios poderes, además de algunos que iremos desbloqueando. Por ejemplo, Arenita puede saltar de una plataforma a otra enganchandose, o puede planear con su cuerda; o Patricio puede lanzar objetos que son demasiado pesados para los demás. Los controles de cada personaje son parecidos, y me hubiera gustado un poco más de distinción para diferenciarlos más allá de sus poderes.
SpongeBob SquarePants: Battle for Bikini Bottom – Rehydrated no solo tiene estas mecánicas, también está lleno de minijuegos donde los personajes se lanzan por toboganes la mar de divertidos o hacen puenting para conseguir los preciados tesoros del lugar. Hay un buen número de minijuegos que aportan variedad y calidad al título.
Los niveles son variados, divertidos, y lo que es muy importante, muy fieles a la serie original. En cuanto a diseño, suelen estar repartidos en varias zonas conectadas por una zona de carga, algo que denota que viene de la época de PlayStation 2. Se que sería mucho pedir, pero si hubiesen interconectado los niveles de alguna forma, el resultado final sería aún más espectacular. Sin embargo, tengo claro que eso cambiaría el juego tal y como lo conocemos, así que dejaría de ser un remake fiel. De todas formas, los diseños de los niveles tienen suficiente complicación y recovecos para ser interesantes de explorar, algo fundamental en un plataformas. Algunos de los niveles tendremos que recorrerlos con los tres personajes para llegar a explorarlos del todo.
Aunque ya lo he dicho, creo que merece hacer aún más hincapié en lo fiel que es este juego a la serie en la que se basa. Los personajes, las situaciones, el guión y todo lo demás recuerda a una serie de rocambolescos capítulos. Ayuda bastante que absolutamente todos los personajes tengan los doblajes originales, y que estos sean de la calidad que son. Yo nunca he sido muy fanático de Bob Esponja, pero he de decir que el juego me ha dado ganas de ver capítulos de la serie. Así de fiel es.
El modo multijugador, que a su vez es un modo horda, resultará divertido para partidas cortas, donde tendremos que eliminar oleadas de enemigos robóticos. Se nota que es un modo complementario al básico y que no da para mucho, pero es un añadido interesante. Además, han añadido nuevos personajes para controlar, y es algo curioso verlos en funcionamiento. Algo que no me ha gustado es que es obligatorio jugarlo por lo menos dos personas, y creo que alguien solo podría disfrutarlo también.
En resumen, SpongeBob SquarePants: Battle for Bikini Bottom – Rehydrated es un plataformas a tener en cuenta, sobre todo si os gusta coleccionar cosas. En ciertos temas de diseño jugable puede llegar a estar obsoleto, pero eso no quita que sea realmente disfrutable. El remake, con todos los añadidos y lo resultón que ha quedado visualmente, supera las expectativas. Se trata de un juego familiar que yo creo que puede ser disfrutado por todo el mundo.
Este análisis ha sido realizado mediante una copia cedida por Dead Good Media