Desde hace años, en las consolas PlayStation, la aventura siempre ha tenido un nombre: Nathan Drake. Al más puro estilo Indiana Jones o, en su contrapartida videojueguil, Lara Croft, la serie de juegos Uncharted consiguió enganchar a millones de jugadores en todo el mundo durante sus 4 entregas principales, sumando, por qué no decirlo, también sus spin offs, acabando en su majestuosa cuarta entrega, siendo esta además la más reflexiva de todas. Con una película a punto de estrenarse en los cines, una de las sagas más beneficiosas económicamente para Sony llega a PS5 -y en un futuro a nuestros PCs- con Uncharted: Colección Legado de los Ladrones, una actualización, casi un remaster, de sus dos últimas entregas: Uncharted 4 y Uncharted: El Legado Perdido. Y no han salido nada mal.
Antes que nada, quiero comentar que es una lástima la oportunidad perdida que hemos dejado pasar de estandarizar algo que parecía al principio de la generación que se iba a quedar con nosotros. Hablo de las actualizaciones gratuitas que estábamos empezando a tener de los juegos de la anterior generación a las nuevas consolas, o incluso en juegos cross-gen. Sony lo ha hecho con algunos juegos, siendo el próximo Horizon: Forbidden West, polémica mediante, el último que se actualizará gratuitamente. A partir del anuncio de este update, hemos tenido actualizaciones de pago como la Director’s Cut de Ghost of Tsushima o la homónima de Death Stranding. Este Uncharted: Colección Legado de los Ladrones actúa de la misma forma, teniendo que pagar un precio -no muy caro, eso sí- por la actualización si tenemos Uncharted 4. Llevándonos, eso sí, si no lo tenemos, El Legado Perdido.
Una vez aclaradas las malas noticias, vamos con lo bueno, que es casi todo lo demás.
Dos grandes juegos…
El primero de los dos juegos que nos vienen en esta colección es la cuarta parte de Uncharted, y última aventura de Nathan Drake. Esta aparecía para PS4 en 2016 y no creo que haga falta que os hable demasiado de un juego ya de sobra conocido. Quizás la aventura más pausada de Nathan Drake, añadiendo elementos como algún área que se podría considerar semi-open world , o la cuerda con el gancho.
No descubro nada cuando digo que, si jugamos ya al juego original en nuestra PS5 podría pasar perfectamente por uno de los juegos cross-gen que tan de moda están últimamente. Con unos gráficos espectaculares, marca Naughty Dog, nos mostraba al Nathan más reflexivo en contraste con lo alocado de sus aventuras anteriores, rozando a veces casi la autoparodia en la tercera entrega.
El segundo juego que tenemos en esta colección es Uncharted: El Legado Perdido. Chloe Frazer será esta vez la protagonista, junto a la mercenaria Nadine Ross, de una entrega que iba a ser en un principio una expansión para Uncharted 4 pero que sin embargo, debido a la extensión que alcanzó, acabó teniendo alma y estatus de juego completo.
Si bien aquí pasamos a tener un reparto femenino, Uncharted: El Legado Perdido no es menos Uncharted que los demás. Chloe tendrá todas las habilidades que ya tenía Nathan y algunas más -el forzado de cerraduras, por ejemplo-. Como siempre, nos encontraremos exploración, puzles y tiroteos y, como no, una factura técnica espectacular. Quizás peque de corto respecto a la cuarta entrega de la serie, teniendo una duración más parecida al primer Uncharted, pero eso no convierte en menor una entrega que, ahora sí, se metía de lleno en el mundo abierto en según que tramo.
…remasterizados para PS5
¿Pero qué aporta esta Colección Legado de los Ladrones a los juegos ya existentes? Como hemos dicho, los dos títulos ya casi se sienten como juegos cross-gen, pero si encima le añades una resolución 4K, podrían pasar por juegos de la primera hornada de PS5. Para ser exactos, podemos movernos entre tres modos gráficos, el modo fidelidad, a 4K nativos manteniendo los 30 fps, el modo rendimiento, en el que veremos el juego a 4K reescalado pero a 60 fps, y, novedad, un segundo modo rendimiento en el que tendremos el juego a resolución 1080 pero, y esto es lo interesante, lo moveremos a 120 FPS.
El juego realmente agradece los 60 frames por segundo y este que os escribe reza todos los días porque se estandaricen esta generación. Uncharted 4 a 60 FPS gana muchísima fluidez, y muestra las capacidades de las consolas de nueva generación.
Pero no solo de gráficos hablamos, ya que una de las particularidades de la nueva consola de Sony es su SSD, y, de nuevo, Uncharted: Colección Legado de los Ladrones lo aprovecha estupendamente, haciendo desaparecer prácticamente los tiempos de carga. Cargas que ya en PS5 con la retrocompatibilidad podían tardar 30 o 40 segundos, aquí se convierten en cargas de unos pírricos 2 o 3 segundos. No más pantallas negras con el «Cargando» al lado, y, de nuevo, es otro añadido que se agradece.
El tercer añadido importante podemos decir que es al Audio 3D. Sin llegar al nivel de Returnal -posiblemente el juego de PS5 que mejor uso hace de las características de la consola-, tenemos un audio totalmente adecuado a un entorno tridimensional, pudiendo saber perfectamente desde donde nos llegan los disparos que estamos escuchando. Estar en medio de un tiroteo, con disparos desde todos los lados, con los Pulse 3D en las orejas, es una gozada, la verdad.
Quizás donde quedamos un poco más decepcionados es con el Dual Sense. La utilización de los gatillos hápticos es bastante residual, y la vibración, sabiendo lo que puede hacer el pad de PS5 con ella -esas gotas de lluvia en Astroboy- está totalmente desaprovechada. Y es una lástima, porque es lo que hace que este remaster no sea perfecto. Una lástima además al ver que no solo los first de Sony como Astroboy o Returnal hacen uso del Dual Sense, sino que juegos con menor presupuesto, como el recientemente lanzado Sifu, sabe utilizar también la vibración o el altavoz del pad como añadidos a la jugabilidad y al entorno.
Por último, recordar que podemos pasar sin problema alguno nuestra partida y nuestros trofeos de la versión PS4 de estos Uncharted a esta. No hay excusa para, si tenemos una partida empezada, continuarla en esta edición si disponemos de PS5.
Conclusión
En fin, que estamos ante las versiones definitivas de Uncharted 4 y Uncharted: El legado perdido. Si no nos importa pagar el peaje correspondiente, tenemos unas versiones que aprovechan casi la totalidad del hardware de PlayStation 5 y que en la mayoría de tramos pueden pasar perfectamente por juegos de nueva generación. Imperdibles.
Este análisis ha sido realizado en PlayStation 5 mediante una copia cedida por Precision Spain
