Hoy probamos uno de esos juegos que tienen pinta de ser bastante interesantes en su planteamiento. Ya vimos un primer trailer en el Gamefest 2021 -el evento que vendría a sustituir al E3 durante la época de pandemia- y ahora hemos podido probar una pequeña beta del mismo. Hablamos de DOLMEN, un action RPG de ciencia ficción que bebe mucho de la saga Souls, desarrollado por Massive Work Studio y que saldrá en 2022 para PlayStation 5, Xbox Series y PC.
En DOLMEN nos trasladaremos hasta el futuro, hasta una colonia espacial minera donde se han encontrado unas extrañas piedras con diferentes propiedades, pero que a su vez han provocado la apertura de portales que han hecho que diferentes monstruos extraterrestres invadan todo y acaben con casi toda la población. Nosotros encarnamos a uno de los mineros que tras despertar de su estado de criogenia -un clásico-, se traslada hasta el planeta minero para descubrir que ha ocurrido y solucionar el problema.
Como ya hemos comentado, su principal inspiración es la saga Souls tan de moda últimamente, pues la jugabilidad es muy parecida. Tras crearnos a nuestro personaje eligiendo sexo y colores de la armadura, aparecemos en un rincón del planeta en el que durante los primeros compases nos enseñarán a jugar con prácticamente los mismos controles que la franquicia de From Software: Golpe débil, golpe fuerte, escudo, rodar, etc…
Quizás la mayor novedad de este soulslike respecto a los demás es el uso de las armas de fuego. Ya sabemos que en Bloodborne también las había, pero se utilizaba más como medida disuasoria que como un arma principal. En DOLMEN se convertirá en una de las armas principales, pulsando el gatillo superior apuntaremos con ella como si se tratase de third person shooter y con el otro dispararemos la munición. Esto no es garantía de nada ni nos va a servir para pasarnos el juego con seguridad y distancia, pues la munición es muy limitada -ahora explicaremos como funciona- y los ataques cuerpo a cuerpo son más efectivos y más fuertes.
Contaremos con tres barras de estado: la de salud, la de aguante y la de «magia» por así decirlo. Los ataques cuerpo a cuerpo consumirán la barra de guante que se irá recargando poco a poco, pero los disparos de las armas de fuego gastarán magia y también se acabará recargando con el tiempo, pero hasta cierto punto, pues todo depende de hasta donde de llena la tengamos -si la tenemos llena hasta la mitad, solo podremos realizar dos o tres disparos continuados como mucho-. Esto se debe a la forma de curarnos, pues para restablecer nuestra salud tendremos que consumir la barra de magia, la cual también podremos rellenar usando viales -o lo que vendrían a ser los estus-, pero son muy limitados.
Otra de las características principales de DOLMEN es el uso de los minerales que dan pie a la trama, los cuales nos podremos equipar para obtener diferentes efectos sobre nuestro personaje. En esta beta podemos encontrar tres de ellas: de hielo, de fuego y de ácido. Tras equiparnos la que queramos -podemos cambiarlas en cualquier momento de la partida- y pulsar el botón correspondiente, nuestro personaje utilizará temporalmente el poder del mineral y podremos realizar ataques basados en dichos elementos. Aquí entra en juego el sistema de debilidades tan habitual en estos juegos, lo que nos beneficiará o perjudicará en base al tipo de elemento de cada enemigo.
Para mejorar a nuestro personaje tendremos las habituales «hogueras», que en este caso son una especie de ordenadores cuánticos que servirán para trasladarnos a nuestra nave -y regenerar a todos los enemigos eliminados, obviamente-. Dentro de nuestra nave es donde encontraremos todas las opciones de mejora tales como subir de nivel a nuestro personaje -utilizando las almas de nuestros enemigos-, creación de armas y armaduras mediante los objetos que vayamos consiguiendo o volver a cambiar nuestro aspecto. Aquí podremos encontrar también a los diferentes supervivientes del planeta, los cuales nos obsequiarán con regalos y planos de creación como agradecimiento.
Tras acabar con el jefe final de la zona, el juego nos traslada hasta una segunda zona que en el juego final estaría mucho más avanzada, con nuestro personaje a un nivel superior y nuevas armas tales como una espada-motosierra, garras o un rifle de energía. Esta nueva zona nos muestra un lugar mucho más abierto y con montones de recovecos a explorar, lo que indica que DOLMEN no se limitará a ser un juego pasillero con un único camino e incentivará la exploración.
A estas alturas decido finalizar la beta, ya nos hemos hecho una idea de como será el juego final y no necesito ver más para convencerme. Personalmente DOLMEN me ha gustado mucho, tiene una jugabilidad muy fluida y ofrece un soplo de aire fresco en un género tan manido como es el de los soulslike, así que esperaré con muchas ganas la versión final del mismo, que como ya hemos comentado, nos llegará en algún momento de 2022.
Este artículo ha sido realizado en PC mediante una copia cedida por Koch Media
