Probando - MotoGP 23

Año nuevo, entrega nueva de MotoGP. Milestone está terminando de pulir la que será la nueva experiencia en simuladores de la categoría reina del motociclismo. A las plantillas actualizadas habrá que sumar alguna novedad jugosa en la que profundizaremos más adelante.

Como es natural, estando aún a un par de meses vista de que el producto final esté disponible, hemos podido probar una versión preliminar del juego a la que aún quedan algunos flecos por pulir. Sin embargo, no hemos podido encontrar bugs muy notorios que nos hagan pensar que MotoGP 23 no está prácticamente listo para salir a la calle. Y es que con la base que ya tienen de juegos anteriores y el motor, es lógico que no tengan muchos problemas en ese aspecto. Tal vez en el momento en el que den el salto a un motor nuevo pensado al 100% para la actual generación de videoconsolas, podamos encontrarnos con un periodo de transición más acusado para el que necesiten algo más de tiempo o un par de entregas para terminar de pulirlo, pero ahora mismo le tienen la medida tomada.

Los requisitos son bastante comedidos, habiendo podido incluso probarlo y comprobando un funcionamiento perfecto en una SteamDeck, sin problemas de framerate durante la carrera, ni salidas al “escritorio” ni problemas reseñables aún jugando directamente desde SteamOS. Y es que MotoGP 23 presenta unos requisitos técnicos muy comedidos, lo cual muestra su alma intergeneracional, y tan solo pedirá 8Gb de RAM y una GTX 1050 o RX 580 de 4Gb como requisitos recomendados. Aún así MotoGp 23 luce bien con el nivel de detalle al máximo y se mueve todo lo suave que podemos necesitar para un juego como este, donde la precisión es crucial para poder no ya ganar carreras, sino acabarla de una pieza. En consolas probablemente su rendimiento será excepcional como en entregas anteriores.

Y es que MotoGP 23 tiene, definitivamente, alma de simulador. Y aunque haya multitud de ayudas, cada vez más, para poder hacer asequible el juego a los novatos en el género y que pierdan el miedo a acercarse a él, al final por muchas ayudas que tengamos, podremos acabar en el suelo si no tenemos cierta pericia.

Es cierto, no obstante, que hay que reconocer que es el MotoGP más asequible para los nuevos en el simulador, permitiendo configurar una experiencia que, si bien sigue muy alejada de un juego arcade, sí que será amable en el acercamiento, así que parece que, para aquellos que siempre hayan tenido curiosidad pero no se atrevan, estamos ante una oportunidad inmejorable para atrevernos a afrontarlo sin miedos. Y por si las ayudas añadidas os parecieran pocas, tendremos la opción de los tutoriales y del MotoGP Academy, que ayudará a los novatos a aprender las bases para ser competitivos y también a los veteranos a perfeccionar su técnica para lugar por los campeonatos.

En la versión beta a la que hemos tenido acceso faltaban modos de juegos y solo se podían seleccionar los modos Nuevo Gran Premio, que nos permitirá disputar un gran premio, como su propio nombre indica, de forma completa, y que está prácticamente acabado a falta de algunos pequeños ajustes según transmite la desarrolladora, y el modo Contrarreloj, que está en un estado similar en cuanto a su finalización.

Aún así, no supondrá ninguna sorpresa poder comprobar que en la versión definitiva podremos acceder a todos los circuitos, equipos y pilotos de Moto3, Moto2 y MotoGP así como MotoE, además acostumbrado nivel de personalización. También, a falta de poder probarlo finalmente, podemos esperar una gran profundidad en el que será su modo principal, el modo en el que crearemos nuestro propio piloto y dirigiremos su carrera desde los comienzos, integrándonos en un equipo y ascendiendo en todos los sentidos. MotoGP 23 promete añadir una capa mayor de profundidad con una suerte de red social virtual en la que podremos relacionarnos con nuestros compañeros y competidores, y cuyo devenir afectará a su actitud en la pista ante nosotros.

Una de las novedades más anunciadas para la entrega de este año por parte de Milestone es el de la climatología dinámica. Hasta ahora podíamos correr en circuitos en seco o en mojado, pero ahora las condiciones pueden cambiar en cualquier momento declarándose un Flag-to-Flag en la carrera, es decir, que tendremos la oportunidad de entrar en el pit lane y cambiar de configuración de neumáticos o, directamente, de motocicleta, tal como ocurre en las carreras reales, dándole a MotoGP 23 un toque más realista en cuanto a lo que una competición real puede ofrecer.

Por supuesto, MotoGP 23 poseerá la opción de sumergirnos en modos online con la novedad de, por vez primera, poder jugar con contendientes de cualquier plataforma, siempre que sean consolas de Sony o Microsoft, de forma cruzada. A ello tenemos que añadir las partidas rápidas basadas en el ranking. Aunque, si lo que nos gusta es batirnos en duelo con gente en persona, tendremos a disposición un divertido modo a pantalla partida, aunque tan solo para dos jugadores simultáneos y solo en las plataformas de sobremesa.

Jugablemente, más allá de la variedad que ofrece la climatología, no varía apenas con respecto a entregas anteriores, de forma que aquellos que ya estén familiarizados con la saga le tomarán la medida inmediatamente y podrán dedicarse a disfrutar desde el minuto uno. El tema sonoro, y como viene siendo habitual, presenta fidelidad y un buen doblaje al castellano.