Shadow Warrior está de vuelta, los chicos de Flying Wild Hog junto a su editora Devolver Digital. Vuelven a sorprendernos con una buena historia con Lo Wang al frente volviendo a salvar el mundo. Pero esta vez la jugabilidad ha cambiado respecto a su segunda entrega, ya que esta vez ha sido eliminado su modo cooperativo y su sistema de loot estilo Borderlands, el cual nos permitía conseguir distintos tipos de armas. Lo cierto es que con Shadow Warrior 3 han vuelto a sus orígenes, ofreciendo un título con una campaña singleplayer con toques de Doom y es que el título tendrá hasta las Glory Kills aunque tendrán una funcionalidad diferente.

Otra vez, volveremos a tomar el papel de Lo Wang. En el pasado, la cagó y por accidente liberó a un gran dragón, el cual, genera yokais que invadieron la tierra. La historia juega más que nunca con el humor, ofreciéndonos escenas de lo más descarcajantes. El juego ocurre tras los hechos de Shadow Warrior 2, por lo que si has aguantado las anteriores entregas, verás ciertas referencias en este. Pero si eres un jugador totalmente nuevo, igualmente podrás disfrutar su historia ya que se siente fresca y rica en humor. Si algo saben hacer los chicos de Flying Wild Hog es hacer que saques más de una risa con sus títulos. 

Entrando en sus detalles jugables, lo cierto es que comenzaremos seleccionando una dificultad, Shadow Warrior 3 nos permitirá seleccionar entre fácil, intermedio y difícil. Si eres un jugador promedio y no has jugado muchos FPS, encarecidamente te recomiendo el modo intermedio, en cambio, si eres un veterano, dale de lleno al difícil. La dificultad está bien medida y este último modo resulta imposible en ocasiones.

Desde el principio nos presentan 3 tipos de orbes de energía en el combate, al ser un fps estilo Doom, la vida irá representada con orbes rojos, la munición con azules y los remates con amarillos. Y sí, como he mencionado antes este juego también tiene Glory kills como en Doom, pero éstas tienen un contador. Eliminando enemigos a arma, obtendremos salud mientras que si vamos a melee con nuestra katana -cola de dragón-, conseguiremos munición, además también podremos obtener puntos de remate. Aquí la mecánica es diferente que en el juego de Bethesda. La barra se podrá llenar hasta con 3 puntos de remate, los enemigos débiles como los shogai que nos presentan al principio, nos permitirán tomar algo de salud y nos darán una inmunidad unos segundos pero enemigos más fuertes, nos permitirán extraer una parte de su cuerpo de yokai y permitirnos usarla en su contra, y es que estos enemigos nos permitirán usar distintos tipos de armas demoledoras de forma puntual. 

Aplicando mejoras a Lo Wang.

A diferencia de Shadow Warrior 2 y su pasmosa cantidad de armas, esta vez nuestro arsenal contará únicamente de la katana y 6 armas de fuego. Lo cierto es que el título ha sido creado para que disfrutemos de su explosivo combate y sus escenarios por lo que a la vez que usamos nuestras armas podremos saltar, ir por las paredes, usar un gancho para volar de una parte a otra del escenario o activar las distintas trampas de estos. Además, en ellos podremos encontrar distintos tipos de barriles explosivos los cuales nos hacen que sea más fácil lidiar con los enemigos. Se nota que han querido que el título sea extremadamente lineal y se centre en el combate en los escenarios. Y es que, no dispone de caminos ocultos ni segundas opciones, el título no intenta hacerte buscar ni un coleccionable. En cambio, al completar ciertas áreas, nos permitirá obtener dos tipos de orbes de mejora, los cuales nos permitirán mejorar a Lo Wang y su equipamiento. Los orbes morados, nos permitirán subir nuestro personaje, lo cual es útil pero tampoco nos abre un gran abanico de opciones, pudiendo elegir entre mejoras de estallido de Chi, salud, recursos o explosivos. La mejora de recursos de nivel 1, por ejemplo, nos permitirán generar mayor cantidad de munición. Mientras que los puntos de mejora blancos nos permitirán subir nuestras armas, por ejemplo en el caso de la katana, su mejora de nivel uno nos permite realizar ataques pesados.

Un poquito de acción en un area.

A decir verdad, uno de los inconvenientes de esta aventura es su duración y es que, si no recordamos mal, completar las anteriores entregas de Shadow Warrior nos llevaba alrededor de 30 horas, mientras que en esta ocasión, el título podrá ser completado en unas escasas 8 horas. Esto, junto a su elevado precio de 44.99 €, hacen que sea uno de los puntos donde más flaquea está aventura.

Por último decir que el título cuenta con compatibilidad total con mando, aunque nosotros hemos optado por teclado y ratón, resulta más que jugable con un buen controlador. 

En cuanto al apartado visual, que decir, vuelven las fuertes ambientaciones orientales, pasamos de estar en escenarios entre míticos templos nipones a estar montando a lomos de nuestro enemigo el gran dragón. La variedad de escenarios es uno de los mayores atractivos de este título, dándonos 9 capítulos con diferentes escenarios en cada uno de ellos.

En cuanto a la banda sonora, está formada por 7 pistas de música, las cuales logran transportarnos a esos momentos de frenesí con un toque oriental en cada una de estas melodías. No llegan a ser tan destacables como en entregas anteriores pero dejan que disfrutar de su jugabilidad, sea nuestra única preocupación. En cuanto al doblaje, decir que las nuevas voces para nuestros protagonistas van como anillo al dedo, el título ha sido doblado al inglés y se encuentra subtitulado en 11 idiomas entre los que se encuentra el castellano.

Remate a Shogai.

En definitiva, Shadow Warrior 3 es una montaña rusa, sus escenarios y su gameplay lleno de adrenalina, junto a su divertida historia hacen que el viaje sea muy disfrutable, pero su vuelta a sus inicios, escasa duración y su elevado coste puede echar para atrás a los jugadores. Por lo que es un título muy recomendable e imprescindible si eres fan de la saga.  

 


Este análisis ha sido realizado en PC mediante una copia cedida por Cosmocover