Este análisis ha sido realizado en PlayStation 5 mediante una copia cedida por PLAION

Como un año más, Milestone nos ofrece el videojuego oficial del campeonato del mundo de MotoGP. Y como es de esperar, la compañía italiana ha trabajado duro para pulir la base de su simulador de motociclismo a la vez que ha añadido ciertos ajustes y novedades para mejorar la experiencia y hacer al juego más completo y realista. El estudio Milestone nos tiene acostumbrados a videojuegos ambientados en el mundo del motor, ya desde que se fundó en 1994 con el nombre de Graffiti y nos trajo el notable Screamer para PC. Tan solo dos años después y ya con su nombre actual, no solo continuó dicha saga, sino que siguió apostando por los juegos de conducción, hasta que acabó volcándose en el mundo del motociclismo en diferentes vertientes como el Motocross, las Superbikes o, como en el caso que nos ocupa, con las entregas anuales de la licencia oficial de MotoGP.

Partiendo de la entrega del año pasado nos encontramos ante un simulador puro, pero no por ello inaccesible pues como cada año Milestone ha hecho un esfuerzo extra para romper esa barrera que aleja a los novatos de la serie o incluso a los amantes del motociclismo que no se atreven con un simulador duro. Con esto en mente, MotoGP 24 nos ofrece cuatro experiencias de juego bien diferenciadas: Simplificada, Intermedia, Avanzada y Profesional. Con estas cuatro experiencias de juego seleccionables podremos adaptar el juego a nuestra pericia para ir progresando y mejorando, pero es importante tener en cuenta que ni siquiera la experiencia Simplificada con la IA rival fácil y las ayudas activadas llega a convertir la experiencia de juego en un arcade, esto es un simulador de los pies a la cabeza.

Con la idea de que la barrera de acceso al título no sea insalvable, una de las novedades más potentes de esta edición es la «dificultad adaptativa», un nuevo sistema de dificultad que adapta la dificultad de nuestros rivales en función de nuestro desempeño y destreza en las carreras. Gracias a una avanzada inteligencia artificial que aprenderá de nuestra habilidad para jugar, la experiencia se irá adaptando a nuestro progreso, y por supuesto, en cualquier momento podremos desactivar esta «dificultad adaptativa» y volver al sistema clásico de dificultad. Por supuesto todas las ayudas y mejoras son personalizables pudiendo desactivarlas paulatinamente conforme vayamos adquiriendo pericia.

Entrando a los modos de juego, la gran estrella es el modo Trayectoria, donde guiaremos a nuestro piloto al triunfo desarrollándolo a lo largo de su carrera desde sus inicios mientras controlamos todos los parámetros del piloto, equipo y moto, y cumplimos los objetivos que se nos van marcando para poder avanzar. El nuevo modo LiveGP es una campaña online para enfrentarse a otros pilotos con periocidad mensual. Por supuesto podremos crear un Gran Premio en cualquiera de los circuitos oficiales de este año -también se incluyen unos pocos circuitos históricos- y un Campeonato donde podremos elegir los circuitos que queremos que formen parte de él. Desde la pestaña de un jugador tenemos acceso rápido al Gran Premio, Campeonato y Contrarreloj, multijugador online -con crossplay- y local, y la opción de entrenamiento con el conocido MotoGP Academy y su sistema de asistencia neuronal.

Como cada año, tendremos circuitos y plantillas actualizadas no solo en la categoría de MotoGP, como indica el título del juego, sino que podremos disfrutar en nuestras carreras de todas las opciones de las categorías menores Moto2 y Moto3,  echando en falta en esta edición la categoría de MotoE -motos eléctricas-. Otra de las grandes novedades de este año es la inclusión del mercado de pilotos, donde los pilotos podrán cambiar de equipo como si de la competición real se tratase. Por supuesto se mantiene una de las grandes novedades de la entrega anterior, la climatología dinámica que hace impredecibles las carreras al poder provocar la necesidad del cambio de moto o reglajes en mitad de una carrera si la climatología cambia de repente.

La última gran novedad de esta entrega son los MotoGP Stewards o lo que es lo mismo, los jueces de pista de las carreras reales. Estos jueces de pista analizarán tanto nuestras acciones como las de la IA, penalizando si procede en caso de que haya alguna acción ilegal, se rebase algún borde de pista o se cause problemas a otros pilotos. Estas penalizaciones pueden ir desde una penalización de algunos segundos hasta la perdida de una vuelta entera, por lo que debemos tomarnos la conducción «cívica» bastante en serio e intentar ajustarnos a las reglas del MotoGP real lo máximo posible.

Visualmente seguimos la estela de la entrega anterior. Motos, climatología, animaciones en carrera y sensación de velocidad son el foco de Milestone y se nota que son sus prioridades, dejando los entornos un poco más en secundario. También se nota que siendo un juego intergeneracional no puede alardear de un apartado técnico demasiado ambicioso o de sacar músculo en los sistemas más potentes. La experiencia, eso sí, es fluida en todo momento, lo cual es crucial en un juego de este tipo. El sonido cumple, perfectamente, como siempre, y el doblaje, en perfecto castellano, también. La música que acompaña los menús realiza su función sin alardes, pero tampoco se echa en falta nada más en este aspecto.

En conclusión, MotoGP 24 ofrece una experiencia parecida a la del año pasado partiendo de base, pero se han hecho grandes añadidos con el mercado de pilotos, la dificultad adaptativa y los MotoGP Stewards, además de todas las correcciones y mejoras de IA que se van añadiendo entrega tras entrega. No hay apenas mejoras en el aspecto audiovisual y se nota que Milestone se encuentra cómoda con el Unreal Engine y las plataformas actuales, así que seguramente habrá que esperar a alguna próxima entrega exclusiva de plataformas de actual generación para ver un salto mayor en dicho aspecto. Como cada año, los amantes del campeonato MotoGP estarán de enhorabuena con el título de Milestone.