Por todos es más que conocida la saga de Doom, un clásico shooter frenético donde lo primero es disparar y después pensar. Y abro este análisis mencionando este juego porque el título que nos ocupa me ha hecho rememorar esa mítica saga tan querida por muchos. De este modo, ha llegado el momento de armarnos hasta los dientes y eliminar a todo enemigo con Necromunda: Hired Gun, un título indie que llega de la mano del desarrollador Streum On Studio y con Focus Home Interactive como editor del mismo.
Necromunda: Hired Gun es un shooter en primera persona ambientado en el universo de Warhammer 40.000, donde nos meteremos de lleno en la piel de un mercenario que, por un módico precio, es capaz de meterse en los confines del mundo y eliminar a cualquier ser viviente que le pidan. Nada más empezar el juego, tendremos la opción de elegir de entre varios cuál será la imagen que llevará nuestro personaje.
Nuestra aventura comenzará en Martyr’s End, un asentamiento dentro de la subcolmena de Necromunda donde se encuentran comerciantes, colonos y cazarrecompensas de diferentes lugares. En esta zona es donde podremos elegir que contratos y misiones queremos hacer, además de ir mejorando las habilidades cibernéticas de nuestro cazarrecompensas y su mascota, el equipo y arsenal para abarcar la siguiente misión.
Además de la campaña principal, este juego consta de diversas misiones secundarias que podremos seleccionar a través de un terminal que se encuentra en el centro del asentamiento. Con ellas podremos conseguir experiencia además de dinero para seguir mejorando a nuestro personaje.
En la ciudad también dispondremos de Gladiatorum, un lugar ideal para entrenar y probar las habilidades recién adquiridas antes de embarcarte en un nuevo contrato.
Al ser un personaje biónico, con las mejoras podremos hacer dobles saltos, utilizar un gancho acoplado en la mano para llegar a zonas inaccesibles, así como correr durante un tiempo determinado a través de las paredes, entre otras muchas mejoras que iremos adquiriendo a medida que completemos contratos.
Durante nuestro periplo no iremos solos ya que contaremos con la inestimable ayuda de un compañero ciber-mastín que nos acompañará en nuestra aventura y al que podremos llamar para que se haga cargo de alguno de los enemigos que nos acechan e intentan acabar con nosotros. Además, según le llamemos, nos señalará a todos los enemigos cercanos con un aura roja alrededor del mismo, siendo una ventaja notable para poder acabar con ellos. Al igual que ocurre con nuestro personaje, esta mascota dispondrá de su propio árbol de mejoras para hacerlo un arma imparable contra cualquier enemigo.
En cada misión, nos encontraremos con una especie de ordenador en puntos concretos del escenario. Con ellos podremos reiniciar la misión, abandonarla y volver a Martyr’s End o adquirir Stimm, una especie de reanimador que hará que volvamos a la vida si nuestra barra de salud llega a cero. Pero, ¿Qué pasa si nos matan y no tenemos ninguna jeringuilla de Stimm? Pues que nos tocará volver a empezar desde el último punto de guardado de la misión -que no desde el principio de la misma-.
Como todo buen mercenario que se precie, es muy importante tener unas armas buenas para poder completar los contratos y ganar dinero. Por ello, la cantidad de armas disponibles es bastante grande y variada, mejorando la calidad del juego ya que tenemos la posibilidad de ir con un fusil de asalto, una escopeta o un rifle de francotirador, entre otras, la elección de estas dependerá de la destreza del jugador con cada una de ellas.
También dispondremos de una serie de botiquines y granadas que nos ayudarán a avanzar durante la misión y conseguir completarla satisfactoriamente. Otro accesorio con el que contamos es el cuchillo, con el que podremos eliminar al enemigo más fácilmente cuando estamos cerca de él.
Durante la campaña iremos encontrando munición a raudales por lo que es muy difícil quedarnos sin munición. Además de esto, en algunas zonas escondidas encontraremos botines con armamento y equipo para mejorar a nuestro combatiente.
En cuanto a la jugabilidad, este indie ha sabido beber de los grandes del género, haciendo que el manejo del personaje sea sutil y preciso sin movimientos bruscos. Durante la primera misión del juego, nos irán apareciendo una serie de consejos en la pantalla a modo de tutorial, de modo que podremos ir haciéndonos con el manejo del personaje de manera rápida y sin ningún tipo de problema. Además, el juego tiene modo autoguardado, cuando lleguemos a una zona concreta de la misión, nos aparecerá en la parte superior derecha un cartel rojo que nos indicará que la partida se ha guardado, por lo que si queremos descansar del juego en ese momento, sabemos que podremos continuar desde ese punto sin ningún tipo de problema.
Visualmente, Necromunda: Hired Gun es un juego impresionante. La cantidad de detalles que podemos encontrar en los escenarios y lo bien elaborados que están los diferentes personajes, tanto aliados como enemigos, así como las armas, mejoran exponencialmente la experiencia de juego. Además, la intensidad de la paleta de colores usada para recrear el juego lo hacen más llamativo para el jugador.
Por otra parte, el juego cuenta con un apartado de sonido también digno de mencionar. Una trepidante banda sonora nos acompañará durante cada misión, siendo ésta más intensa en el momento en el que se encuentren enemigos cerca de nuestro protagonista, de modo que nos alertará de los peligros que nos acechan. Esta música volverá a la normalidad en el momento en el que acabemos con todos ellos o, si no queremos entretenernos en matar a todos, cuando lleguemos a una zona donde nuestro personaje se encuentre relativamente a salvo. El juego además viene subtitulado en varios idiomas -entre ellos en castellano- y cuenta con voces en inglés, alemán y francés.
Necromunda: Hired Gun dispone de varios niveles de dificultad y este análisis lo hemos realizado en dificultad normal -la que trae por defecto el título-. Como el título dispone de tres ranuras de guardado, podremos empezar la partida en otro modo para ver cual supone una mejor experiencia del juego.
En definitiva, Necromunda: Hired Gun es un frenético FPS donde podremos disfrutar de intensos combates contra hordas de enemigos siempre a cambio de un botín, como todo buen cazarrecompensas que se precie. Si os gustan los juegos con mucha acción donde derrochar adrenalina a raudales, os recomiendo que probéis este título que llega en formato digital el 1 de junio a PC –a través de Steam y Epic Games Store-, Xbox One / Series X y Playstation 4 / Playstation 5.
Si queréis adquirirlo de forma física, habrá que esperar hasta el 30 del mismo mes para haceros con él. En este último formato el juego incluirá un pack de recompensas de cazador -incluyendo cosméticos para el cuchillo, el equipo y el juguete con el que llamamos a nuestra mascota asesina-.
Este análisis ha sido realizado en PC mediante una copia cedida por Koch Media