Un juego cooperativo donde prima la belleza es perfecto para la Navidad., o al menos eso pienso. Sin embargo, el primer contacto con PHOGS! no fue del todo bueno. A pesar de que el título se oferta como participante en el «Remote Play Together», fue imposible hacerlo funcionar. Los mandos no querían funcionar, hasta que nos pasamos a la alternativa, la aplicación Parsec, y por fin empezó la cosa a funcionar. Aunque es un fallo menor, sigue siendo algo que tiene que resolverse, puesto que el punto fuerte de este título está en su cooperatividad.
PHOGS! es un juego familiar, centrado en la exploración, la aventura, y las cosas bonitas, por lo que si en esta época del año buscáis un reto, PHOGS! no os lo va a dar. En el título manejamos una extraña criatura mitad perro mitad… perro. Como lo oís, dos cabezas de perro en el mismo cuerpo, que tendrán que colaborar para poder avanzar. Nótese que yo he jugado al título con un amigo, y cada uno de nosotros manejaba una cabeza. Manejando ambas cabezas el mismo jugador no es tan divertido, y no lo recomendaría jugar de esa forma. Es un juego pensado puramente para el cooperativo y con el multijugador en mente.
Lo primero que hay que indicar es lo divertido que puede ser el juego, simplemente manejar a la criatura, y las físicas de la misma, hacen que todo jugador pase un buen rato trasteando y probando cosas y acciones. En ese aspecto, puede recordar a juegos como Gang Beasts o Human Fall Flat, donde lo principal, lo que más recordaremos al final de una sesión de juego, será lo gracioso y blandengue que es el perrete protagonista. Además, la jugabilidad confía en que los jugadores no se pongan de acuerdo de hacia dónde avanzar, y eso creará divertidas situaciones a lo largo del juego.
Porque el resto de PHOGS! tampoco es que sea muy digno de ser recordado. El único otro aspecto que de verdad destaca es su apartado gráfico. Aunque también recuerda a los juegos anteriormente mencionados, su imaginería hace que sea un verdadero placer viajar por los mundos que nos iremos encontrando. Todo es muy cuco y bonito, y eso es algo a tener en cuenta. No hay título mejor para relajarse tras un día duro de trabajo.
Pero la jugabilidad quizás no de la talla, o al menos mucha gente podría considerar eso. El título ofrece puzles, desde luego, pero la mayoría son muy simples, y no requerirán que nos paremos a pensar más de un corto periodo de tiempo. La verdad que, aunque sean fáciles, el título ofrece muchísima variedad de puzles y situaciones, lo que hace que nunca se haga aburrido. Como ya he dicho, las físicas del título, cosas como que nuestro perro se alargue bastante o que salgamos disparados, hacen que esa diversión se multiplique. Si el juego tuviese puzles más complicados o situaciones más elaboradas, seguramente se perdería el interés inicial que tenían los desarrolladores.
Los mundos son variados y agradables, todo en tono de humor. Uno de los mundos está basado en la siesta. Creo que puedo decir en nombre de todos los jugadores que es un buen mundo que visitar. Otro de los mundos es una playa y también veremos un mundo basado en la comida. Cada uno de los mundos tiene su tonadilla musical de lo más animada, que hará las delicias de los jugadores.
Los mundos tienen elementos que debemos coleccionar para desbloquear nuevos escenarios; así avanzaremos por PHOGS!; pero también tienen una función secundaria. Una vez nos hemos hecho con varios coleccionables, podremos usarlos para comprar divertidos gorros para nuestros perretes. No son caros, son bonitos y fomentan la jugabilidad, así que ni un pero en esta sección. Los mundos también tienen ciertos secretos que deberemos encontrar si queremos profundizar más y nos gusta el juego. No se trata de un juego corto, pero estas cosas son fundamentales si queremos sacarle todo el jugo al título.
El juego está orientado a un tipo de jugador y de situación. No es un juego serio, no es algo que vayáis a recordar como el mejor juego de vuestras vidas. Pero si que os hará pasar un buen rato con un amigo, con un hijo o con un padre. Uno de esos juegos que son necesarios en 2020, un año terrible para prácticamente todo el mundo. Y como este es mi último análisis de este año, Feliz Navidad y Año Nuevo para todos. Y ya os digo, empezar el año 2021 con PHOGS! os sacará más de una sonrisa.
Este análisis se ha realizado con una copia cedida por Coatsink