Romancing SaGa -Minstrel Song- Remastered International nos devuelve un clásico que ya había sido cuidadosamente modernizado en 2022, ofreciendo ahora una experiencia totalmente accesible para jugadores europeos gracias a su localización completa y a la posibilidad de disfrutarlo en edición física. El juego tiene raíces muy profundas, siendo originalmente la cuarta entrega de la franquicia, lanzada para Super Famicom en 1992, y posteriormente adaptada a PlayStation 2 como remake con gráficos en 3D y animaciones renovadas. La remasterización de 2022 actualizó esta versión, mejorando la interfaz, agregando opciones de calidad de vida y optimizando la experiencia sin perder la esencia original. La edición International toma esa base y trabaja sobre ella para que pueda ser disfrutada por un público más amplio gracias a la traducción de sus textos a múltiples idiomas.

La historia se desarrolla en el continente de Mardias, un mundo marcado por la influencia de los Fatestones, piedras mágicas que contienen el poder de los dioses. Tras un conflicto milenario entre deidades, las fuerzas oscuras resurgen y los Fatestones vuelven a dispersarse, amenazando la estabilidad de los reinos. Cada protagonista -de los ocho disponibles- tiene su propia trama, motivaciones y manera de interactuar con el mundo, lo que significa que la historia cambia de manera significativa según nuestras elecciones. Los eventos que experimentamos, las alianzas que formamos y los enemigos a los que nos enfrentamos dependen directamente de estas decisiones, generando múltiples caminos y finales posibles. La sensación de libertad es total y posiblemente abrumadora, podemos explorar a nuestro ritmo, elegir qué misiones secundarias completar y decidir a qué personajes reclutar, sabiendo que cada decisión influirá en cómo se desarrollan los acontecimientos.

La jugabilidad mantiene los sistemas complejos y profundos que caracterizan al título. Los combates por turnos dependen de la estrategia, la combinación de técnicas y el manejo de los recursos de cada personaje, más allá del simple hecho de subir de nivel. El sistema de Glimmer permite que los personajes ejecuten técnicas especiales bajo ciertas condiciones, mientras que el sistema de Combo permite encadenar habilidades para maximizar daño o efectos especiales. Elegir qué armas usar y en qué modo es fundamental, cada una tiene diferentes comportamientos según si optamos por ataque, defensa o modos versátiles, y esto altera las técnicas que podemos ejecutar y cómo se desarrollan los combates. Los protagonistas tienen rutas de desarrollo abiertas, con habilidades, clases y técnicas que se desbloquean dependiendo de cómo los usemos y de las decisiones que tomemos en la aventura. Con tal nivel de personalización y estrategia, se recompensa la experimentación y la planificación, aunque algunos elementos como la aleatoriedad en subidas de estadísticas o la posibilidad de perder personajes pueden añadir un reto adicional no tan deseado.

La exploración es otro de los puntos fuertes del juego. El mundo está lleno de misiones secundarias, eventos y jefes opcionales que enriquecen bastante la experiencia y recompensan la exploración. Podemos realizar misiones de historia, completar desafíos para mejorar nuestro rango de evento y descubrir secretos escondidos que afectan a la progresión de los personajes y al desarrollo del mundo. La curva de aprendizaje es exigente, especialmente al principio, y requiere paciencia para comprender los sistemas y optimizar el rendimiento en combate, pero la progresión se siente genuinamente gratificante. La remasterización de 2022 ya había incluido mejoras que hacen esta experiencia más accesible como minimapas, modo de velocidad para agilizar combates y exploración, y un New Game+ que permite conservar progreso y explorar nuevas rutas con facilidad, y todas estas mejoras como es lógico están disponibles en esta edición.

El apartado técnico y audiovisual se mantiene fiel al espíritu de la remasterización anterior. Los gráficos en alta definición y las animaciones de combate modernizadas permiten que el mundo y los personajes luzcan más vivos y detallados que en la versión de PlayStation 2, aunque conservando el estilo artístico característico que le da personalidad propia -aunque el gusto pueda ser subjetivo-, incluso si algunas cinemáticas y ciertos assets presentan ciertas limitaciones visuales. La banda sonora sigue siendo uno de los puntos más destacados, con melodías que acompañan cada escenario y momento épico, reforzando la sensación de aventura. Las voces están disponibles en inglés y japonés, y ayudan a la inmersión en nuestra aventura.

Lo que distingue a esta versión de la remasterización de 2022 son dos elementos muy concretos. Por un lado, la localización completa a varios idiomas europeos: español, francés, alemán e italiano. Esto permite disfrutar de la historia y los diálogos de manera mucho más natural y cercana, eliminando barreras de idioma y pudiendo llegar a un público más amplio -el nivel de inglés requerido por el juego podía ser exigente a veces-. Por otro lado, la edición física disponible en PlayStation 5, PlayStation 4 y Nintendo Switch, incluyendo opciones estándar, deluxe y de coleccionista, complacerán a los coleccionistas y a los amantes del formato físico, que podrán hacerse con otro título de la franquicia en físico después de Romancing SaGa 2: Revenge of the Seven, el remake de la quinta entrega.

Es importante recalcar que, aparte de la localización y la edición física, no hay cambios en jugabilidad, misiones o balance respecto a la remasterización de 2022. La complejidad estratégica, la libertad narrativa y los sistemas de combate permanecen intactos, por lo que si ya poseemos o hemos jugado al anterior juego, no vamos a encontrar nada nuevo. Los jefes, los eventos y las rutas de cada protagonista son los mismos, con la única y gran ventaja de que ahora se pueden comprender mejor gracias a la traducción. Quizá se ha perdido la oportunidad de añadir nuevo contenido, o de haber calibrado mejor ciertos parámetros, pero la verdad es que todas las novedades de accesibilidad ya se añadieron en la remasterización de de 2022, y esta versión Internacional se siente más como una versión con un retoque para su mejor distribución.

En conclusión, Romancing SaGa -Minstrel Song- Remastered International es la manera perfecta de revivir uno de los JRPG más singulares de una franquicia tan particular como es SaGa, en especial para nosotros ahora que incluye textos en español. Para quienes ya jugaron la remasterización de 2022, ofrece la oportunidad de disfrutar de una localización completa y de una edición física atractiva, y para los nuevos jugadores, es una de las puertas de entrada ideales -junto al remake de Romancing SaGa 2– a una franquicia tan especial como compleja. Por lo demás mantiene todos los aciertos y todas las asperezas de la versión anterior, pero ahora con una mejor distribución para nosotros.