Nos encantan los juegos con aspecto retro pero con mecánicas actualizadas y hoy nos toca analizar un nuevo título que se postula como una propuesta bastante interesante. Scrap Riders es obra del estudio valenciano Games for Tutti bajo la distribución de Microids y nos plantea una mezcla de géneros que aparentemente tienen poco que ver entre sí pero que acaba funcionando bien.

Scrap Riders nos sitúa en un futuro postapocalíptico al más puro estilo Mad Max, Rast es un contrabandista perteneciente a una banda que se dedica a hacer chanchullos por el mundo para poder mantenerse. A causa del robo de una importante entrega que debía hacer, la banda se embarca en la misión de recuperar dicha pieza y de paso combatir al resto de bandas para garantizar su propia supervivencia.

A pesar de lo que pueda parecer en un principio, estamos ante un juego que principalmente es una aventura gráfica en su jugabilidad. Controlando directamente a Rast con el joystick o la cruceta, tendremos que movernos por el mundo del juego cumpliendo los distintos objetivos que nos piden. En este sentido no se sale de los cánones del género, contamos con una jugabilidad tradicional basada en recoger objetos, combinarlos entre sí para resolver puzles, hablar con los NPCs para obtener información… bastante conservador en ese sentido.

Otra de las mecánicas disponibles aquí es la de los hackeos, Rast es un manitas informático -bueno, se defiende- y en ocasiones tendremos que tirar de terminal para poder abrir puertas cerradas y burlar sistemas de seguridad. Para ello habrá que cumplir un sencillo minijuego consistente en llevar un cuadrado hasta un punto concreto a través de un panel deslizante. Esto es algo que le aporta algo de variedad al juego, aunque siempre se repiten los mismos diseños de paneles y al final nos los sabremos de memoria, siendo al final un puro trámite.

Hemos dicho que Scrap Riders es una mezcla de géneros y aquí es cuando se vuelve interesante. En los momentos en los que toca encararse con miembros de las bandas rivales, el juego pasa de ser una aventura gráfica a un beat ‘em up tradicional en el que liarse a tortas. Rast tendrá un variado repertorio de ataques entre los que se encuentran el ataque débil, el ataque fuerte o el golpe especial, el cual solo se podrá utilizar rellenando el medidor realizando golpes y recibiendo daño.

Hay que decir que estos tramos de beat ‘em up no están tan pulidos como me hubiese gustado, la variedad de enemigos es escasa y el sistema de combate no es tan efectivo, pues en muchas ocasiones el personaje no queda bien alineado con el enemigo y fallaremos bastantes golpes a pesar de que claramente le estemos dando. A esto se le suma una elevada dificultad especialmente contra los jefes finales y por contar con una única barra de vida que tras perderla nos obligará a empezar desde el principio del nivel.

Como ya hemos dicho, aunque la combinación de aventuras gráficas y beat ‘em up funcione bastante bien, esta última no deja de ser un mero añadido para aportarle algo de variedad y diferenciarlos del resto de juegos del sector. Si lo ponemos en una balanza, encontraremos que la parte de aventura gráfica representa aproximadamente un 70% del juego y la parte de acción un 30%, aunque las partes de combate están bien planteadas, pues en ocasiones nos ofrecerán secciones en las que tendremos que explorar un lugar concreto e ir limpiando estancias -minimapa en mano- en un formato que recuerda mucho al de River City Girls,por poner un ejemplo.

Pero sin ninguna duda otro de los grandes puntos fuertes de Scrap Riders es su carisma arrollador y su personalidad propia. Es muy fácil cogerle cariño a los personajes y en poco tiempo estaremos inmersos en la acción y en la sociedad que plantea el juego. Además de eso, el título cuenta con altas dosis de humor negro que nos acabarán sacando más de una risa, sumado también a las distintas referencias a otros juegos y películas famosas.

Pasando ya al apartado gráfico, cuenta con un pixel art muy bueno cargado de detalles y animaciones suaves que le sienta como un guante, contando con cinemáticas semiestáticas bien trabajadas y funcionando perfectamente a 60fps como era de esperar. Respecto al sonido, contamos con melodías de corte chiptune bastante animadas y efectos de sonido contundentes, aunque tampoco podemos decir que sean nada del otro mundo, siendo quizás uno de los apartados donde más flojea. En cuanto al idioma, evidentemente encontraremos textos en castellano dado su origen y además con una localización muy buena, con expresiones locales que la verdad es que sorprenden.

En definitiva, Scrap Riders nos propone un juego bastante interesante y cuidado que hará las delicias de los fans tanto de aventuras gráficas como de los «yo contra el barrio». Estamos ante la prueba de que en nuestro país se siguen haciendo cosas de alta calidad que poco tiene que envidiar a las obras extranjeras que nos llegan. Si os gusta el humor ácido y además estamos acostumbrados a estos géneros, es un título que debemos apoyar.

 


Este análisis ha sido realizado en PC mediante una copia cedida por Games for Tutti