Fatbot Games es una pequeña compañía independiente con sede en Bratislava, Eslovaquia, fundada por dos veteranos de la industria, Tibor Repta y Matej Zajacik, y compuesta por tan solo seis integrantes. A pesar de su corta plantilla, en 2017 nos trajeron su primer juego, Vaporum, para Pc, y posteriormente tuvo su versión, en 2019, para la consola de Nintendo, que cosechó unas críticas notables -77 de media en Metacritic en su versión de Nintendo Switch-. Hoy, cuatro años después, podemos disfrutar de su precuela: Vaporum: Lockdown.

Vaporum: Lockdown es, como el anterior título, un CRPG de estilo y jugabilidad clásicas del subgénero dungeon crawler o, dicho de otro modo, para los que no estén acostumbrados a dichos términos, un juego de rol basado en la exploración de mazmorras como base del desarrollo jugable. Sigue así la estela de juegos como Legend of Grimrock y secuela que han hecho las delicias de los aficionados a ese, casi extinto durante un tiempo en su vertiente occidental, estilo de juego, y que durante estos últimos años ha retornado con fuerza a la primera fila con algunos títulos de calidad lo suficientemente respetable como para que merezca la pena invertir el tiempo en ellos.

La ambientación, a diferencia de lo reflejado en los juegos anteriormente mencionados o la mayoría de los clásicos del género, posee una ambientación steampunk en lugar de la clásica de fantasía medieval. De igual forma, en Vaporum: Lockdown, controlaremos a un único personaje en lugar de un grupo completo como podría ser habitual en los juegos de los años 80 y 90 de este tipo.

Nada más aparecer el menú nos daremos cuenta de algo, y es que el tamaño de fuente, para el modo portátil se nos antoja demasiado pequeño. Para más inri, navegando en las opciones, encontraremos la de hacer el tamaño de fuente más pequeño aún. Está claro que está totalmente pensado para jugar en un monitor en PC o bien en una tele en el caso de las versiones consoleras, pero han dejado un poco de lado algún modo de mayor tamaño para jugar en modo portátil.

En Vaporum: Lockdown podremos además ajustar diversas opciones para adaptar el tipo de jugabilidad a nuestros gustos, más al estilo clásico o con ciertas mejoras. Así, por tanto, podremos jugar con un movimiento cuadrícula a cuadrícula con transiciones, como algunos de los dungeon crawlers clásicos -no los primeros, que no tenían dicha transición y directamente la pantalla pasaba a mostrar la nueva zona- o directamente con movimiento continuo. Podremos también ayudarnos del movimiento de cabeza libre para poder observar la zona, o efectos como la vibración de la pantalla en ciertos momentos del juego.

Podremos utilizar opciones como la de autoequipar para simplificar la elección de qué equipo utilizar en cada momento e incluso que se nos sugiera con una comparativa entre piezas similares para tomar nosotros la decisión de cual utilizar en cada momento. Podremos, de hecho, activar un modo vieja escuela que nos configurará el juego con la máxima fidelidad a los clásicos del género, eliminando ayudas y poniéndonos las cosas un poco más difíciles, como, a fin de cuentas, las teníamos hace años. En todo caso, en nuestras manos estará seleccionar el tipo de experiencia que queremos afrontar, también con la selección de uno entre tres modos de dificultad.

Vaporum: Lockdown es, desde el punto de vista argumental, precuela del primer Vaporum lanzado en 2017, cuya historia gira también en torno a la misteriosa torre Arx Vaporum. Al comienzo del juego unas sencillas ilustraciones con texto narrado nos ponen en antecedentes, pero sin contarnos, realmente, nada sobre la historia que vamos a vivir. Se nos sitúa en unos ejercicios rutinarios cuando, oh sorpresa, un imprevisto hace que tengamos que variar nuestro plan de llevar a cabo dichos ejercicios y volver pronto a casa a descansar.

El resto de la historia deberemos ir descubriéndolo durante el desarrollo mediante las comunicaciones recibidas y audios diseminados por los escenarios, así como textos que podremos ir leyendo para empaparnos en más profundidad del argumento e historia que nos rodea.

En realidad, tampoco vamos a sorprendernos mucho, y Vamporum: Lockdown no pretende hacerlo de hecho. Tendremos que enfrentarnos a las mismas máquinas que se supone que debían servir a la humanidad en el Arx Vaporum así como a enemigos orgánicos que pululan por la torre. Cada nivel tiene un puzle final que nos hará desbloquear la entrada al siguiente, y para poder conseguirlo, a parte de salir con vida de los enfrentamientos que vengan a nuestro encuentro, deberemos ir explorando toda la estancia y resolviendo los sucesivos puzles que nos impidan seguir avanzando. Palancas, resortes que requieren el uso de pesos o ser activados en una secuencia concreta o a los que no se puede acceder si no es a través de un rodeo que requiere, a su vez, de solventar otro pequeño puzle, mucha vuelta a zonas anteriores tras activar o mover algo en una zona distinta… los sistemas clásicos de los puzles y mecanismos del mazmorreo que todo jugador conoce están aquí presentes, comenzando por las formas más simples y complicándose a medida que avanzamos por la torre.

Y si los jugadores avezados del género no se van a llevar ninguna sorpresa, más allá de una ambientación no tan trillada en los exponentes clásicos del género, los que hayan jugado a la anterior entrega directamente lo sentirán como una entrega muy continuista que apenas presenta novedades. Nueva historia, algún objeto nuevo, algunos niveles con más diferenciación al contrario que el anterior juego que era más monótono en ese aspecto.

El control, teniendo en cuenta que el juego base es la versión de PC y está pensado para ser jugado con teclado y ratón, está bien adaptado, y aquellos que hayan jugado al anterior Vaporum ya tendrán ganada esa familiaridad con los mismos. Aunque al principio puede abrumar, los primeros compases harán las veces de tutorial y su sencillez hará que nos podamos enfocar en aprender e ir automatizándolos. Echamos, eso sí, en falta, un atajo rápido para salvar y cargar partida rápida sin tener que acudir al menú.

Desde el punto de vista técnico, Vaporum: Lockdown se ve y se siente similar a la anterior entrega, con una adaptación a Switch que cumple perfectamente. En un juego de este estilo, aunque el framerate pierda estabilidad en ciertos momentos, no llegan a impedir disfrutar plenamente del juego por la naturaleza del mismo. En la pantalla de Switch, además, luce muy bien y se le notan menos las costuras y sencillez de ciertos modelados. En el dock, sin embargo, se hace más evidente la bajada de resolución que se lleva a cabo de forma habitual para intentar mantener el tipo en la consola. Cuando la cámara está totalmente parada suele verse bien, pero a poco que el personaje mueva un poco la vista automáticamente, cosa que hace a menudo cuando estamos parados, notamos el emborronamiento, así como cuando nos estamos moviendo.

Desde el punto de vista sonoro, los efectos cumplen perfectamente y el doblaje, en perfecto inglés, aunque con subtítulos en castellano, está bien llevado a cabo. La banda sonora de fondo, sin ser nada del otro mundo, acompaña bien la ambientación en que nos encontramos, contribuyendo a la sensación de tensión y opresión.

En resumen, Vaporum: Lockdown sigue la estela de la anterior entrega. Clava los controles y el aspecto técnico, audiovisualmente varía poco, aunque añade algo de variedad. En definitiva, es más de lo mismo. Pero si nos gustó la primera entrega, y teniendo en cuenta que tampoco estamos ante un género muy prolífico actualmente, puede ser una buena opción para disfrutar unas horas.

 


Este análisis ha sido realizado en Nintendo Switch mediante una copia cedida por Evolve PR