Se echaban de menos las típicas aventuras gráficas en primera persona, pues se trata de un género que está un poco en desuso y no hay mucho donde elegir. Por suerte siempre hay alguien que decide revivir el género y eso es lo que ha pasado con Without Escape, un juego que fue lanzado en 2018 para PC, pero ahora nos llega su versión de consolas para Nintendo Switch, Xbox One, Playstation 4 y Vita.

La historia en torno al desarrollo de este juego es muy curiosa, pues ha sido creado por una sola persona: un joven español llamado Miguel Antonio Rivera -alias «PacoChan»- y además se trata de un proyecto que ha ido evolucionando a lo largo de los años. Comenzó como juego homebrew solo disponible en consolas Nintendo DS modificadas y las primeras versiones eran bastante mejorables gráficamente, posteriormente se atrevió a aprender diseño 3D y con el paso de los años ha ido mejorando los escenarios renderizados en las distintas ediciones que ha lanzado, primero en Xbox 360 y ahora en las consolas actuales con una versión «enhanced» que mejora mucho el aspecto visual. Toda esta historia se puede ver además en algunos de los extras que se desbloquean al finalizar el juego.

Esta aventura de terror nos sitúa en una casa cualquiera de una ciudad cualquiera, nos ponemos en la piel de un adolescente que se queda solo en casa cuando sus padres salen de viaje. Estando a solas en su habitación, durante la noche empieza a escuchar unos ruidos extraños que parecen provenir de algún lugar de la casa y decide salir a investigar. A partir de ese momento, nada volverá a ser lo mismo.

Hablando de la trama, quizás no sea uno de sus puntos fuertes a pesar de ser el motor principal del juego. No hay una progresión en la historia, no van apareciendo nuevos misterios ni resolviéndose a medida que vamos jugando, en su lugar te lo sueltan todo de golpe y porrazo en la cinemática final, hasta entonces vamos a estar desde el inicio hasta el final sin saber que está ocurriendo. Como contramedida, tendremos múltiples finales -alguno de ellos implicando realizar un speedrun- que nos ofrecen distintos puntos de vista.

Como comentaba antes, Without Escape es un homenaje a esas aventuras gráficas de puzles al estilo de la saga Myst. Jugaremos con una vista en primera persona, en ningún momento veremos a nuestro protagonista ni conoceremos su aspecto físico, lo único que haremos será recorrer la casa y los distintos escenarios representados en forma de fondos prerrenderizados. Esto implica que no tendremos control directo sobre el personaje, sino que moveremos un cursor e iremos haciendo click en los objetos con los que podamos interactuar. Lo malo de este cursor es que lo moveremos únicamente con el joystick, no se entiende como no se ha habilitado el control táctil para las versiones de Switch y Vita, siendo un género de juego que se presta totalmente a ello.

La jugabilidad no tiene demasiada complicación: iremos visitando toda la casa, recogiendo objetos y usándolos en los lugares en los que corresponda. No tendremos ni que usarlos, ellos mismos serán utilizados automáticamente en el momento que sea necesario. Los puzles son otros de los elementos que merecen la pena, pues estos están bien planteados y nos van a tener un buen rato dándole vueltas a la cabeza para resolverlos, aunque por desgracia no son muy abundantes y los echaremos de menos a la larga, la verdad es que dejan con ganas de más.

Respecto al apartado visual, lo ya comentado, escenarios prerrenderizados que han ido evolucionando con el paso de los años y depurándose en las diferentes ediciones que han ido saliendo, lo que dota al juego de un realismo que no ofrecen los gráficos en tiempo real. Es en el sonido donde quizás encontremos uno de sus mayores puntos flojos: las melodías son buenas y consiguen transmitir la sensación de soledad y agobio, pero en ocasiones resultan demasiado machaconas y pesadas, especialmente en los momentos en los que llevamos 20 minutos atascados en un puzle revisando cada rincón minuciosamente y no para de sonar una melodía acelerada para meternos el cuerpo en tensión para un supuesto peligro que nunca llega. Los efectos de sonido, por el contrario, son muy escasos y limitados a cuando lo requiere el juego, como un teléfono sonando o golpes en las puertas.

En conclusión, hay que reconocer que Without Escape no es un mal juego y consigue su objetivo, algo muy meritorio teniendo en cuenta que casi todo el trabajo recae sobre una sola persona, pero aun así no está exento de errores y problemas de diseño. A pesar de todo, consigue dejar con muy buenas sensaciones a quien lo juega y con ganas de continuar avanzando. Por mi parte, espero ver más juegos de Miguel «PacoChan», debe ser increíble lo que puede conseguir con todo un gran equipo detrás teniendo en cuenta lo que ha creado él solo.

 


Este análisis ha sido realizado mediante una copia cedida por EastAsiaSoft