Una niña guerrera en un entorno oriental, que quiere conseguir que su familia se sienta orgullosa de ella, tomando el lugar de su hermano desapareciendo y luchando contra el mal. Esta similitud es solo una de las que Ary and the Secret of Seasons ofrece, pero entre unos cuantos ‘se parece a…’, puedo decir por la simple demo que ahora evalúo, que hay un potencial muy bueno, así como un agradecido regreso a cosas que la industria ha relegado en el género de las aventuras y las plataformas.

Lo primero es empezar con la carta de presentación: estamos ante un título que parte de un espíritu independiente, para alcanzar un desarrollo muy comercial y amplio. Es un trabajo conjunto de varios grupos, siendo eXiin y Fishing Cactus los responsables directos con el pico y la pala, y Modus Games quienes publican. Y hasta el apartado musical se impregna de panorama indie, de manos de la Trend Orchesta de Marcus Hedges, un grupo dedicado y conocido por versionar temas de series, películas o juegos. Pues este cóctel indie resulta en un juego ambicioso y con límites mayores de lo que acostumbra este panorama.

La historia nos presenta a Aryelle, una niña que vive en un mundo donde las estaciones se han descontrolado. Primero, se encuentran de forma permanente en cada región, y Ary vive en un invierno perpetuo en la suya. Pero una misteriosa y maléfica mano interviene y trastoca todas las estaciones de todas las regiones, y la de Ary pasa nada menos que a un verano constante. Con su hermano desaparecido tras un combate feroz, y su padre herido y con una gran depresión por su pérdida, Ary da un paso al frente para devolver el equilibrio perdido y derrotar a quien haya detrás de todo esto. Eso sí, ella no ocultará su identidad, como si hacía la muchacha de la fábula china en la que parece haber una inspiración.

Ary and the Secret of Seasons es una aventura amplia de variadas mecánicas que en aspecto, y en dichas mecánicas me retrotrae a los excelentes años y juegos de la mal llamada generación de 128 bits. Aventuras plataformeras en entornos más desarrollados, variados y ricos en detalles, que pueden traernos a la mente los Jack & Daxter de Naughty Dog, aunque a mi me ha venido a la mente el malogrado Haven: Call of the King de Traveller’s Tale. Metemos en la marmita elementos de la saga Zelda, sea en faceta 3D o más clásica, y el conjunto es altamente prometedor.

Porque desde el comienzo, jugando en el pueblo de Ary antes del nuevo cisco medioambiental, tenemos la faceta aventurera de la exploración, hablar con la gente, o completar muy sencillos encargos secundarios. Pero también, verticalidad y saltos, acentuándose todo ya cuando empieza la historia de verdad. Incluso con mecánicas de sigilo, o simplemente, poder agacharnos para acceder a recovecos, y combate usanzo ‘Z-targerting‘. Pero la parte más destacada es el manejo del clima de las estaciones de forma localizada ¿Alguien dijo Oracle of Seasons?

Reitero que el tema de los parecidos me parece bastante bien, sea por recuperar cosas pretéritas que siguen funcionando muy bien, sea porque el conjunto conseguido con todos ellos es bastante sólido en lo que esta demo parece mostrar. Primero empezamos con un orbe invernal que permite crear reducidos espacios con esta estación, enfriando superficies, pudiendo caminar sobre el agua, congelar enemigos o hacer aparecer bloques para acceder a lugares que el buen tiempo no permite alcanzar.

El efecto se potencia si activamos el orbe cerca de piedras especiales de poder, haciendo crecer la zona de influencia y generando puzles, caminos, objetivos…Pero también podemos hacer crecer ese radio de influencia mejorando dichos orbes. Un camino bloqueado por zarzas se ve despejado si usamos el invierno en ellas, pero necesitamos radio para que las abarque todas. Lo bueno es cuando podemos manejar varias estaciones simultáneas creando hasta tres burbujas estacionales a la vez, lo que da bastante juego a la hora afrontar situaciones y hasta combinarlas entre sí.

Y junto a un mundo que parece bastante extenso, tenemos mazmorras para conseguir objetos clave, y otras más grandes y complejas con el objetivo de derrotar a los Golems de las Estaciones y devolver el equilibro a cada una. En ellas, las trampas, búsqueda de caminos, saltos calculados y los puzles y enemigos están a la orden del día. Una combinación muy divertida entre action-RPG y plataformas.

Más aspectos a desgranar de la demo: la necesidad de conseguir dinero explorando, cumpliendo misiones secundarias y encontrando y abriendo cofres. Es curioso, pero romper jarrones y otros objetos, así como derrotar enemigos, no deja ninguna de las preciadas monedas que tanto necesitamos para comprar equipo y mejoras de las cualidades de Ary. Otras, como el aumento de vida, se obtienen rompiendo cristales climatológicos dispersos por el mundo.

El combate integra tanto el poder de las estaciones como un contraataque. Un enemigo con armadura de espinas, la pierde al pasar al invierno, o le puede caer un rayo al usar el otoño. El manejo es tan fluido que no es necesario usar el z-targeting, pero siempre es una ayuda, aunque no sirve para apuntar con las armas a distancia, hay que hacerlo siempre a mano, y no entiendo muy bien esto aunque quizás se resuelva en la versión final.

Teniendo en cuenta lo limitado de los medios, algo que agradezco es que la música sea bastante profesional, el acompañamiento musical vía Thread Orchesta se agradece enormemente. No he topado con partituras memorables, pero las que he oído están bastante bien y se acoplan perfectamente a ese estilo visual de corte más desenfadado, a juego con una historia ligera y divertida. Pocas voces durante el juego, pero cutscenes divertidas que se agradecen sabiendo como funciona la producción de juegos de perfil más bajo.

Y ese es justamente algo que yo agradezco viendo esta demo, que partiendo de componentes indie, esto apunta a un juego sólido comercial AA de las tantas veces añoradas zonas medias, que ahora cuestan tanto de ver. Más en géneros y aventuras de este estilo. La demo me deja dudas sobre el ritmo del juego, las enormes extensiones de mapeado sin mucho que hacer -aunque hay viaje rápido-, o que el combate no me parece especialmente emocionante aún con sus cosas buenas, como ese contraataque y el uso inteligente del clima.

El juego está previsto para septiembre, en PS4, Xbox One, Nintendo Switch y PC. Es un lanzamiento múltiple y ambicioso, no es para menos, lo que yo he encontrado en este adelanto promete bastante. Alguna pequeña duda personal, como acabáis de leer, pero buenas sensaciones que esperemos ver cumplidas en poco más de un mes.

 


Este artículo ha sido realizado mediante una copia cedida por Dead Good Media