En pleno 2020 el sabor añejo se resiste a morir, buena prueba de ello son los estudios independientes que siguen apostando por el estilo retro. Artem Vodoriz y su estudio Gingertips nos propone FoxTail, una aventura gráfica point-and-click con el estilo artístico idéntico a las aventuras SCUMM de LucasArts como Day of the Tentacle o Monkey Island.

Al grano. FoxTail trata sobre Leah, una zorrita que vuelve a visitar a su abuela, tras muchos años, en una casita al lado de un bosque. Por desgracia, lo que iba a ser una agradable velada tomando el té al lado de la chimenea acaba convirtiéndose en una aventura para nuestra protagonista que deberá embarcarse en un viaje para salvar a su abuela sumida en una grave enfermedad. Hemos podido probar los tres primeros capítulos, que son los que hay actualmente disponibles, y está pensado que el juego completo esté formado por ocho capítulos. Todavía queda trabajo.

Lo que hemos podido probar es muy entretenido: los escenarios con el característico pixel art de las aventuras gráficas de principios de los años 90 son muy bonitos y coloridos, la interfaz es sencilla e intuitiva y es configurable para mostrar u ocultar las pistas u objetos resaltados en los escenarios. El primer capítulo se centra mucho en encontrar y usar objetos por los escenarios o combinarlos aunque también encontramos un puzle bastante sencillo de completar. El segundo capítulo es similar al primero aunque hace algo más de énfasis en los puzles que se resuelven buscando pistas visuales como leer libros o ver elementos del escenario. El tercer capítulo, es donde realmente se pone interesante: este capítulo está muy enfocado en los rompecabezas. De hecho, la piedra angular de dicho capítulo es resolver un puzle -el cual por cierto varía en cada partida- aunque no por ello se abandonan los objetos y sus usos por el escenario. Simplemente toda interacción de objetos en dicho capítulo está dedicada a desbloquear pistas del puzle para completarlo.

Como en toda aventura gráfica hay diálogos aunque sin actores de doblaje, otra característica de los clásicos de los 90. Si bien el juego no cuenta todavía con traducción al castellano, el inglés no se hace cuesta arriba y es bastante sencillo de entender. La música es bastante alegre y colorida, ambienta muy bien los escenarios. Como extra, la música es un punto muy importante del tercer capítulo, no diré más.

Los diseños de los personajes son bastante majos como por ejemplo a este tarsio de aquí.

En resumen, FoxTail es una aventura gráfica con sabor añejo bastante sencilla y entretenida. A pesar de no haber fecha definitiva para la versión final -actualmente está en acceso anticipado- estos tres primeros capítulos que hemos probando son un excelente tentempié para los siguientes. Queremos jugar más.

 


Este artículo ha sido realizado mediante una copia cedida por GTP Media