«Un pacto hecho, un pacto roto, una confrontación ahora inevitable. Aprovecha los recuerdos de sangre de antaño, no sea que aquellos que pretenden sufrir los ejerzan “sangre por sangre. Lo que se toma será devuelto”.

Guardián de este refugio olvidado, el peligro está aquí. Una deuda de sangre contraída hace mucho tiempo debe ser cobrada para lograr el fin. Convocado desde los últimos suspiros de desesperación de la humanidad, eres todo lo que se interpone entre Cadmeia y su aniquilación. Encuentra y aprovecha los recuerdos de sangre de antaño, no sea que aquellos que tienen la intención de sufrir y dañar interminablemente los empuñen. Prepárate.»

 

En unos pocos días se va a cumplir un año desde que tuvimos la posibilidad de analizar ANIMUS: Harbinger, título de la desarrolladora Troooze, INC que ya había publicado previamente para dispositivos móviles.

Ahora hemos tenido la posibilidad de analizar una nueva entrega de este título que llega bajo el nombre de ANIMUS: Revenant y del que os vamos a destacar lo más reseñable del mismo, para que sopeséis si merece o no la pena adquirir este juego que se lanzó el pasado 10 de junio únicamente en formato digital.

Para empezar, comentar que este nuevo proyecto del estudio coreano vuelve a tener una clara influencia de From Software y su gran franquicia Souls, siguiendo la estela de su primer trabajo. En ANIMUS: Revenant volvemos a meternos en la piel de un caballero guardián que debe ir eliminando la maldad que se apodera de la humanidad. Equipado con espada y escudo o hacha de dos manos –esto nada más empezar el juego, ya que luego podremos ir cambiando el arma por otras que iremos consiguiendo a medida que avance la historia-.

El primer obstáculo que hemos encontrado en este juego es el idioma. La anterior entrega llegó con traducción en varios idiomas, entre ellos el castellano, cosa que no ocurre con éste que está disponible en inglés, lo que dificulta, en gran medida, la experiencia del juego. Y es que si no tenemos un conocimiento medio del idioma, nos va a resulta bastante difícil disfrutar del juego si no comprendemos qué es lo que tenemos que hacer en cada momento.

En cuanto a las mecánicas utilizadas en este juego, hay que decir que utiliza un estilo tipo souls donde nuestro protagonista deberá acabar con todos los enemigos que se interpongan en su camino y de los cuales irá recogiendo memory –que utilizará para mejorar sus estadísticas y equipo- y otros materiales útiles en nuestra campaña.

Si caemos en combate, perderemos todo el memory que hayamos ido cogiendo y quedará la esencia en el lugar donde han acabado con nosotros, de modo que debemos intentar recuperarlo antes de que nos vuelvan a eliminar porque si no lo perderemos de manera definitiva.

Nuestro personaje contará dos barras: la de salud que se rellenará gracias a diferentes elementos de sanación que nos podrá rellenar la barra poco a poco o por completo; y una barra de resistencia que se irá vaciando a medida que vayamos atacando y únicamente se rellenará cuando nuestro personaje descanse –si nos encontramos protegiéndonos de un ataque la barra se mantendrá inmóvil-.

En cada zona nos iremos topando con el típico jefe de zona que nos costará matar de primeras; aquí lo más fácil es aprender las mecánicas y movimientos que utiliza cada enemigo para vencerle de manera cómoda. Normalmente, cuando a estos enemigos se les quita una cantidad de vida determinada empiezan a cambiar sus tácticas de ataque y tienden a ser más agresivos por lo que debemos tener cuidado con ellos.

Una vez eliminado, por regla general, encontraremos una estatua que nos permitirá cambiar lo que tengamos equipado por otros objetos que hayamos conseguido. Además de esto, podremos viajar a otros lugares que hayamos desbloqueado anteriormente y donde se encuentre otra estatua de estas características -podríamos decir que es como las hogueras de Dark Souls-.

Hay que contar con el tipo de arma que vayamos a utilizar, porque si es un arma pesada, los movimientos serán toscos, por lo que a nuestro personaje le costará recuperar la posición inicial y puede ser en ese momento cuando el enemigo aproveche para atacarnos y perdamos parte de la vida.

Otro punto que debemos explicar es el apartado técnico. Gráficamente el juego cuenta con escenarios bastante simples y con poco detalle -los paisajes se ven poco definidos en muchas zonas- y hay que decir que los colores usados para los textos no son los más adecuados –poner el texto de color amarillo en zonas de nieve no permite visualizarlo correctamente-.

No se aprecia bien el texto.

A nivel sonoro, tenemos efectos de movimiento bien definidos –incluyendo los combates- que se contrastan bastante bien con el movimiento del personaje y con el apartado gráfico del juego.

ANIMUS: Revenant es un juego que supone un desafío para todo aquel que le gusten los retos y sea fan de los juego tipo souls. Por desgracia, que el juego venga en ingles teniendo más juegos de este estilo en nuestro idioma, no incita al jugador a adquirir el producto ya que su anterior entrega sí se pudo disfrutar en castellano.

 


Este análisis ha sido realizado en Nintendo Switch mediante una copia cedida por Troooze, Inc.