Baldur’s Gate 3 ha marcado un antes y un después en el mundo de los RPGs. No solo por ser la esperada tercera entrega de una saga legendaria, sino porque, en 2023, se alzó como el GOTY -juego del año- en los Game Awards, entre otros galardones. Tras años de espera y con una recepción unánime tanto por parte de la crítica como de los jugadores, es imposible no hablar de este título sin reconocer su impacto tanto en la industria como en los fans del género. Con más de 10 millones de copias vendidas hasta mayo de 2025, el juego ha logrado capturar la esencia de los RPGs occidentales de antaño, adaptándola con maestría a los tiempos actuales.
Desarrollado por Larian Studios, la misma compañía detrás de la exitosa saga Divinity: Original Sin, Baldur’s Gate 3 no solo honra la herencia de la franquicia clásica Baldur’s Gate, sino que lleva el concepto de Dungeons & Dragons a un nuevo nivel, con una jugabilidad bastante profunda, una narrativa muy rica y muchas posibilidades para el jugador. En esta reseña, quizá un poco tardía, veremos cómo se ha mantenido el juego tras su lanzamiento y cómo ha evolucionado desde su debut en 2023 en PC, PlayStation 5 y posteriormente en Xbox Series X|S.
Larian Studios tomó el relevo de Baldur’s Gate, una franquicia que originalmente vio la luz en 1998, con Baldur’s Gate y su secuela, Baldur’s Gate 2. Durante los años que siguieron, muchos esperamos el regreso de la saga, pero el anuncio de Baldur’s Gate 3 fue casi inesperado, sobre todo al saber que sería Larian Studios quien lo desarrollaría. El cambio de enfoque fue evidente, alejándose del estilo clásico de entregas anteriores y tomando una dirección más moderna, sin perder de vista las raíces de la serie y, por supuesto, el sistema de reglas de Dungeons & Dragons.
Desde el principio, Baldur’s Gate 3 ha sido un viaje lleno de sorpresas, en el que nos vemos inmersos en un mundo de fantasía épica plagado de dilemas morales, intrigas, combates tácticos y una narrativa que puede cambiar radicalmente dependiendo de las decisiones que tomemos. En el juego, comenzamos como un personaje atrapado en una especie de nave voladora, víctima de un parásito implantado por unos misteriosos invasores. La historia arranca con una fuga, pero a medida que avanzamos, descubrimos que el parásito puede transformarnos en monstruos, lo que nos empuja a encontrar una cura. A partir de aquí se desarrollará una extensa y compleja historia que tampoco vamos a desvelar por razones obvias.
La historia de Baldur’s Gate 3 está cuidadosamente tejida, no solo en términos de su trama principal, sino también en los numerosos caminos alternativos que surgen a medida que tomamos decisiones clave. A diferencia de otros juegos, aquí no hay un único camino correcto. Desde el momento en que creamos nuestro personaje, las decisiones que tomamos, tanto en los diálogos como en las acciones, tienen repercusiones directas en el mundo que nos rodea. La trama se enriquece por completo con esta libertad de elección, algo que, a día de hoy, sigue siendo uno de los puntos más fuertes del juego.
El editor de personajes de Baldur’s Gate 3 es, sin lugar a dudas, uno de los más completos que hemos visto en un RPG occidental. Desde el inicio, tenemos la opción de crear nuestro protagonista de forma detallada, eligiendo entre varias razas y clases. El juego ofrece una personalización muy profunda y la creación de personajes es fiel a las reglas de Dungeons & Dragons, permitiendo que cada decisión en el diseño de nuestro protagonista tenga un impacto real en la jugabilidad y las interacciones dentro del mundo. Este nivel de detalle va más allá del físico, ya que podemos elegir las habilidades, el trasfondo y hasta algunas características especiales que influirán en la forma en que nos relacionamos con el entorno.
Los eventos del juego se sienten bastante orgánicos y, como en una partida de Dungeons & Dragons, la incertidumbre y la imprevisibilidad son parte fundamental de la experiencia. Cada acción, cada palabra, puede modificar el destino de los personajes que nos acompañan y del propio mundo. Al explorar, nos encontraremos con facciones en guerra, decisiones morales complicadas, y eventos inesperados que pueden cambiar el curso de nuestra aventura. Esta fluidez narrativa es algo que no solo nos cautiva, sino que, por su complejidad, logra mantenernos enganchados durante horas.
El sistema de combate de Baldur’s Gate 3 es uno de los aspectos que más ha evolucionado desde su primer lanzamiento. Basado en las reglas de Dungeons & Dragons, el combate es por turnos, con un ritmo pausado pero extremadamente táctico. Cada enfrentamiento es una prueba de estrategia, donde las decisiones sobre el uso de hechizos, el posicionamiento y la gestión de los recursos de los personajes pueden marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Uno de los elementos que hace que el combate sea tan único es la influencia del entorno. Los escenarios de combate están llenos de elementos interactivos, como barriles de fuego, charcos de agua que pueden congelarse o alturas que nos otorgan ventaja. Esto permite que, en lugar de un simple intercambio de golpes, podamos pensar en múltiples formas de afrontar cada situación, desde tácticas de emboscada hasta el uso de magia de forma creativa.
El multijugador de Baldur’s Gate 3 es otro de los grandes alicientes del juego. El juego permite el multijugador online, donde hasta cuatro jugadores pueden unirse para explorar el mundo, completar misiones y enfrentarse a los desafíos juntos.
A nivel visual, Baldur’s Gate 3 es simplemente impresionante. Los entornos son vastos y detallados, capturando a la perfección la esencia de los Reinos Olvidados. El mundo está lleno de vida, y las ciudades, bosques y mazmorras están diseñadas con una atención al detalle increíble. La cámara ofrece flexibilidad, permitiendo al jugador elegir entre una vista aérea táctica para los combates o una visión más cercana en tercera persona para explorar el mundo. Además, el juego aprovecha al máximo las capacidades gráficas actuales, especialmente en la versión para PC, ofreciendo una experiencia visual de muy alta calidad. En cuanto al rendimiento, Larian Studios ha logrado que Baldur’s Gate 3 funcione de manera fluida tanto en PC como en consolas de nueva generación. La versión de Xbox, que se lanzó más tarde debido a los retos técnicos asociados al hardware del modelo Series S, que tuvo que prescindir del modo de multijugador cooperativo a pantalla partida hasta el parche 8 que lo ha añadido finalmente.
Además, el compromiso de Larian Studios con el juego sigue siendo ejemplar. Con el parche 8, lanzado en abril de 2025, se introdujeron algunas de las mejoras más esperadas por la comunidad. Una de las adiciones más destacadas fue el juego cruzado entre plataformas, lo que ha permitido a los jugadores de PC, Xbox Series X|S, PlayStation 5 y Mac disfrutar del multijugador sin importar su sistema. Esto, junto con la compatibilidad con mods, le da una nueva dimensión y rejugabilidad al título. Además, el parche trajo 12 nuevas subclases, lo que aumenta las ya de por si dilatadas opciones de juego. También se añadió un modo fotográfico detallado, permitiendonos capturar momentos épicos de nuestra aventura. Todo esto, junto con otras mejoras de diverso índole, resolución de bugs y particularmente para la versión de Xbox Series S, el soporte para multijugador cooperativo que en un inicio había supuesto un desafío para Larian Studios.
Baldur’s Gate 3 es, sin duda, una de los mejores títulos del género de los RPGs occidentales y una de las obras más importantes de los últimos años, aunque no esta carente de algunos fallos menores de diseño y de rendimiento, además de algunos pequeños bugs. Su éxito comercial y crítico es un reflejo de su calidad, y el galardón de GOTY en los Game Awards de 2023 es solo una pequeña muestra de lo que ha logrado hasta ahora. Si eres fan de los RPGs occidentales, de Dungeons & Dragons, o simplemente buscas una experiencia inmersiva y profunda, Baldur’s Gate 3 es un título imprescindible, aunque hay que tener en cuenta que puede no ser un título para todos los públicos. Ya sea en PC/Mac, PlayStation 5 o Xbox Series X|S, no importa la plataforma en la que juegues; el juego ofrece una experiencia única que puede mantenerte ocupado durante cientos de horas. Y, lo más importante, sigue siendo una obra maestra del diseño de videojuegos, algo que muy pocos títulos logran alcanzar.