Con CrossCode me ha vuelto a pasar. No tenía ni idea de la existencia del título de Radical Fish Games hasta que llegó a nuestra redacción, y lo cogí para analizar un poco por inercia -y porque llevaba ya una temporada sin escribir, y ya iba siendo hora-. Tampoco tenía ninguna idea preconcebida sobre el juego, por lo que iba de vacío y sin expectativas de ningún tipo.

Hace casi dos años, nuestro compañero Rubén Rionegro tuvo la amabilidad de dejarnos sus impresiones iniciales sobre lo que la primera hora de juego de CrossCode ofrece en su versión para PC, cuando el juego apenas acababa de verse publicado en Steam. Sus impresiones en aquel momento dejaban entrever que el juego, cuanto menos, apuntaba maneras. En esta ocasión, la versión a analizar será la de Nintendo Switch, que se pone a la venta hoy mismo de la mano de Deck 13 e incluso se puede reservar en formato físico en varias versiones a través de su web oficial.

Tras haberle dedicado unas cuantas horas -siendo sincero, menos de las que me gustaría, porque el juego tiene contenido para aburrir-, no puedo sino suscribir palabra por palabra aquel artículo. Me ha sorprendido que, para ser el primer juego «gordo» de este pequeño estudio, el resultado final es tremendamente positivo.

Pero vayamos al meollo de la cuestión. CrossCode nos presenta un Action RPG de estética 2D muy en la línea de los grandes clásicos de la generación de los 16 bits, en el que tomaremos el control de Lea, una avatar inmerso en una aventura que tiene lugar dentro de un MMO llamado como no podía ser de otro modo, CrossCode. Todo ello plagado de las señas de identidad de este género. Hay bastante crítica hacia el género empacada con su buen sentido del humor. Este MMO lleva el concepto que todos conocemos a otro nivel, el de la vida real, en un planteamiento similar al de Matrix pero sin robots farmeando humanos. Nuestro avatar tiene la particularidad de que ha perdido el habla en el juego, y su alter ego humano sus recuerdos.

La falta de habla de Lea que comentaba anteriormente se torna un elemento central de la trama y dará lugar a algunas situaciones bastante variopintas. Aunque a medida que vayamos avanzando veremos incorporadas ciertas palabras para ayudar en la comunicación con los otros jugadores. Como es norma en un RPG, durante la aventura se irán uniendo a nuestro equipo otros avatares para ayudarnos a avanzar en la historia de CrossCode.

Lo primero que llama la atención nada más ponerse a los mandos es la exquisita factura de su apartado técnico. A pesar de estar ante un juego totalmente bidimensional, el mundo que se nos presenta rebosa colorido y detalles. Se nota vivo, entre otras cosas porque no pararemos de ver montones de avatares en cualquier escenario, simulando a otros jugadores de CrossCode.

Se hace bastante evidente de donde vienen las influencias que el equipo de Radical Fish Games ha tenido a la hora de desarrollar CrossCode. Grandes clásicos entre los que podemos quedarnos con Terranigma o Chrono Trigger.

Esta influencia llega también al apartado sonoro. La banda sonora recoge toda la tradición de los 16 bits, de la mano de Deniz Akbulut, quien ha parido unas melodías tremendamente pegadizas. De esas de las que se te quedan en tu cabeza y no puedes sacarte de encima. Cada melodía se adapta como un guante a la zona a la que pertenece.

Como buen Action RPG que se precie, tendremos como no podría ser de otro modo un sistema de habilidades, para la ocasión centrado en diferentes elementos como el hielo o el fuego. La progresión me ha parecido bastante satisfactoria, y continuamente desbloquearemos nuevas habilidades y mejoras que nos serán tremendamente útiles en nuestra aventura.


En cuanto al sistema de combate, Lea dispone tanto de ataques cuerpo a cuerpo como a distancia mediante un disparo. Por como está planteado, ir a lo loco repartiendo golpes es totalmente contraproducente, y nos costará unas cuantas muertes. En su lugar hay que pensar bien como atacar, medir los tiempos, y cubrirse cuando sea necesario. Incluso también aquí hay parrys, cuya ejecución no es tarea sencilla ya que los combates son bastante frenéticos.

El disparo de Lea nos ayudará a resolver muchísimos de los puzles que nos aguardan en CrossCode, cuya dificultad y complejidad irá en aumento y requerirá utilizar los nuevos elementos que vayamos desbloqueando. Se agradece que el planteamiento y resolución de estos puzles sea muy variado, al estar ante una aventura que ronda las 40-50 horas de duración.

Como contrapunto negativo, lo que más lastra a esta versión de CrossCode es sin duda la inestabilidad del framerate. En escenarios pequeños no hay ninguna pega y todo funciona perfectamente fluido. Pero en exteriores y zonas amplias, renquea bastante. Cierto es que el juego ha sido diseñado bajo HTML5 e Impact.js -de  hecho, indagando sobre sus desarrolladores descubrí sorprendido que hay una demo para navegador que funciona muy bien-, pero no creo que sea motivo suficiente como para justificar que el framerate se quede tan corto en ciertas ocasiones.

Otro de los lastres que encontraremos en CrossCode es la barrera del idioma. El juego no cuenta con una traducción al castellano, por lo que al tratarse de un RPG, la cantidad de textos no es que sea precisamente moco de pavo. Una lástima, porque  se hace fundamental comprender la historia y saber qué debemos hacer -y de paso, enterarnos de los chistes y coñas que iremos encontrando- para poder disfrutar por completo del juego.

El control, a pesar de ser bastante simple, me ha resultado un tanto impreciso a la hora de apuntar el disparo. Hay situaciones en las que, para resolver un puzle, deberemos apuntar en una dirección determinada, y acertar me costaba más de lo habitual.

Finalmente debo decir que CrossCode me ha gustado, mucho. En líneas generales, el juego raya a gran altura en sus diferentes apartados. De no ser por los problemas de framerate y algún escollo en la precisión del control, estaríamos ante un juego que estaría en mi lista de favoritos de la generación. A pesar de ello, si el idioma no os supone un impedimento, es una experiencia tremendamente recomedable y que os ofrecerá bastantes horas de diversión.

 


Este análisis ha sido realizado mediante una copia cedida por PR Hound