Estás leyendo esto, y eres alguien con la suficiente edad a tus espaldas para haberte tragado decenas de veces los clásicos del cine juvenil de los 80. Porque Commander ’85, de la raiz polaca del diseñador Marcin Makaj, es una aventura gráfica que apela tanto al pasado como al presente ¿Una IA que aprende progresivamente, con un usuario humano superado frente al teclado? Y apelando no solo a la nostalgia más pura, sino a su revitalización en los tiempos actuales ¡Vamos alla!

¿A qué quieres jugar?

Commander ’85 viene de los polacos The Moonwalls, traído al presente por la también polaca Ultimate Games S.A. Mmmmm, si queremos hablar del pasado y lo actual como se debe, pulsemos la tecla <return> ante un nombre que los veteranos/nostálgicos reconocerán fácilmente. No hay nada de los creadores de Knight Lore ¿Y qué? Licencias, palabras, registros… ¿Realmente es tan importante? Pues sí, en buena medida sí.

Nos lo dice la intro: un suceso atroz situado en nuestra barriada. Personal del gobierno haciendo una investigación seria…algo importante. Pero nuestro punto de partida es de un chaval en Chicago, Illinois, en 1985. Ha habido un crimen cercano, calificado como suicidio. Y lo más relevante del mismo es un potente ordenador personal: el Commander ’85.

Nos ponemos a los mandos del juego, y somos un nerd al que su madre abronca y arenga, clavado en su habitación. Porque su habitación es su fortaleza, aunque sus muros se tambaleen cuando nos echa una sonora bronca nuestra progenitora por estar demasiadas horas pegado al ordenador que nos han regalado por nuestro cumpleaños. Si, un modelo Commander ’85. Ahí sitúo la primera referencia con el irrepetible Commodore 64.

La barra de paciencia de mamá es importante. Intenta ser buen hijo si el salvar el mundo te lo permite.

En la cancha jugable, tenemos un aventura de clickar y avanzar/retroceder. Incluso es compatible con un pad, pero no lo recomiendo, la interacción no está bien adaptada a él. Aunque tampoco es muy complicada con teclado y ratón. Porque en nuestra habitación seleccionamos/interactuamos con diversos factores, como nuestro perrete mascota, nuestro escritorio, librería y hasta poner música licenciada de la radio.

Pues aún hay más comandos y acciones, ya veréis ya

Pero lo importante es interactuar con nuestro Commander ’85, ya que el mismo ordenador personal tiene una interfaz de voz -que no sabemos de donde leches viene, pero no se calla-, que nos va conduciendo por los pasos de esta breve demo. Realmente, la idea es clara y directa: tenemos delante a un trasunto de Joshua, que empieza por pedirnos de viva voz que retoquemos las notas de nuestro instituto. Lo podemos hacer de forma sencilla, usando comandos y una interfez similar al MS-DOS, aunque el sistema tiene mucha miga para manejarlo y profundizar en él.

Esto no va bien…

Es en este acto no demasiado inocente, que nuestro sistema sufre un accidente, en forma de virus que le lleva a una conducta destructiva queriendo activar los arsenales nucleares mundiales. Y ahí es donde empezamos a poner la carne en el asador en esta demo. Pegados a nuestro monitor curvo con interfaz verdosa -aunque no es de fósforo verde, veremos colores en él- tenemos que ahondar y bucear en el problema, usando esos comandos e instrucciones, o utilizando nuestros disquetes también, cargando  y ejecutando software. Pero como es un ordenador, también podemos aprovechar a ponernos algún jueguecillo.

Esto se llama Turtler ¡Que plagio ni que plagio!

La demo no es muy larga, pero se pueden hacer cosas bastante curiosas en la misma. Me tentaba llenar esto de fotos, porque el ‘ochenterismo’ reflejado en nuestra habitación y entorno es enorme. El juego tiene temas originales con el estilo de esta época, incluso una versión de Daisy Bell con toque de sintetizador y tenebrismo, otra de tantas referencias del juego. Mi impresión es que no le he terminado de sacar todo el partido al sistema, que no es necesario ser ingeniero informático senior, y no usa instrucciones extrañas, se puede jugar de forma accesible, pero hay bastantes posibilidades e interacción digital y no sé si la he aprovechado toda adecuadamente.

El manual rápido. Fácil ¿No? Bueno…

Y como colofón, separarnos un ratito de la pantalla y de la insistente voz de nuestra computadora, nos permite explorar un poco nuestra habitación, abriendo y cerrando ventanas, el escritorio y sus cajones, y descubriendo cosas como un walkman, una pizarra para apuntar y hacer dibujos, y hasta un walkie-talkie, que parece será importante en el juego final, comunicándonos con gente al otro lado del aparato. Tenemos también un manual rápido de usuario para manejar el ordenador, pero también, uno bastante más largo con instrucciones más detalladas, a la usanza de los que veíamos en nuestros Spectrums ZX o Amstrad CPC. No lo profundicé mucho, de momento los textos siguen en inglés, y supongo que así se resolvería parte de mi confusión y falta de acierto.

Pues como mi madre me está abroncando para que deje el ordenador y me vaya a dormir, termino estas impresiones de la breve demo, deseando poderosamente poder probar el juego final. Dejo una lista de las referencias licenciadas que ofrece esta demo, a ver si las captáis todas.

 


Este artículo ha sido realizado mediante una copia cedida por Ultimate Games