The Waylanders se presenta como una nueva propuesta al género de rol occidental, y en este caso lo hace con inspiración patria, pues gran parte de la plantilla de sus creadores, Gato Studio, provienen de tierras gallegas. No contentos con eso, cuentan en sus filas con otros grandes del videojuego internacional, entre ellos guionistas de Bioware y Telltale, lo que parece indicar cierta calidad en cuanto al argumento. The Waylanders se encuentra disponible en PC en un estado de acceso anticipado bastante temprano, pero hemos querido darles un primer vistazo a las primeras horas para ver lo que nos ofrece en primera instancia.
Lo primero que nos llama la atención al iniciar partida es precisamente el idioma, pues el juego se encuentra en completo inglés y nada más, lo cual me parece cuanto menos extraño. ¿Un juego español que no cuenta con idioma castellano entre sus filas? como mínimo resulta chocante aunque entendemos que se pueda deber a decisiones comerciales y a su temprano estado, priorizando el idioma internacional sobre el nacional para aumentar el número de ventas. De todas maneras no es algo que nos tenga que preocupar porque esto no es una decisión fija, ya que en su versión final el juego estará en completo castellano -desconocemos si voces o solo texto- e incluso al gallego.
Y la historia del juego, a grandes rasgos, nos habla del encuentro entre los seres que habitan la tierra y los Tuatha, que se podrían considerar como los dioses de la mitología celta. En su primer encuentro con uno de estos dioses, nuestro/a protagonista acaba cayendo en combate y descubre que su propia existencia ha quedado fuera de la línea temporal habitual, lo que le permite viajar a través del tiempo entre diferentes periodos. Nuestra tarea será volver a la línea temporal y descubrir lo que ha provocado el cataclismo del pueblo celta en el que nos hemos criado.
A nivel gráfico lo cierto es que nos encontramos con un juego bastante simpático y colorido para lo que viene siendo habitual en el género, con un marcado estilo cartoon que recuerda más a juegos como The settlers que a otros como Dragon Age, en el cual se inspira fuertemente. Me ha sorprendido -no para bien- que el rendimiento no vaya todo lo fluido que debería y la dificultad para alcanzar los 60 fps, pues no presenciaremos en pantalla tanta carga gráfica como para los requisitos que se piden. Es cierto que veremos efectos gráficos bastante curiosos y un sistema de shaders e iluminación muy buenos en algunos momentos, pero es necesario una buena puesta a punto en cuanto a optimización en ese aspecto.
El punto más fuerte de The Waylanders y en el que se están centrando la mayoría de actualizaciones es en el combate, en el cual se va a basar la gran parte de nuestro viaje. El combate resulta interesante porque tendremos dos maneras de afrontar los enfrentamientos: el combate directo y la pausa táctica. En cuanto al primero, encontraremos el habitual sistema de clickar con el ratón encima del enemigo seleccionado y nuestro personaje comenzará a atacar automáticamente con su arma equipada como cualquier otro Wrpg. También podremos utilizar habilidades asignadas al teclado numérico, las cuales necesitarán un tiempo de enfriamiento hasta que podamos volver a utilizarlas.
La otra vertiente del juego es la pausa táctica, pudiendo detener la acción de la batalla en cualquier momento con tan solo pulsar la barra espaciadora. Con la pausa táctica, podremos darles órdenes a nuestros compañeros y planear una buena estrategia sin necesidad de estar pendientes de las acciones del enemigo, los cuales evidentemente no se moverán hasta que salgamos de dicho modo. A pesar de ser una propuesta interesante, esta pausa táctica no funciona todo lo bien que debería -o al menos así lo he percibido yo-, pues una vez derrotados los enemigos asignados a cada uno, nuestros compañeros vuelven a hacer lo que les da la gana ignorando nuestras órdenes anteriores y atacando directamente de manera normal. Es cierto que no me he parado mucho a ahondar en los menús como para descubrir si se pueden configurar a los compañeros para tener una IA preestablecida, pero en un primer vistazo no he visto nada similar.
A pesar de esto, los combates no llegan a ser todo lo espectaculares y dinámicos que nos gustaría, las animaciones de ataque se ven bastante toscas y lentas además de automatizadas, convirtiendo prácticamente cada enfrentamiento en clickar una vez sobre el enemigo y quedarnos esperando a que terminen de acabar con él, añadiendo las interacciones justas para no convertirnos en meros espectadores.
Con cada combate finalizado, nuestros héroes recibirán experiencia con la que subir de nivel y posteriormente mejorar sus habilidades. Aquí contamos con el clásico sistema de puntos de atributo -o PA- con los que mejorar a los personajes en 6 características diferentes. A su vez, cada vez que encontremos un nuevo compañero podremos seleccionar su clase -de entre las posibles según el guion, no vamos a poder poner a un arquero como bárbaro por ejemplo-, con lo que podremos crearnos un equipo a medida de nuestras preferencias.
Concluyendo ya, estas primeras impresiones sobre The Waylander me han dejado sensaciones mixtas. Es cierto que el juego tiene muy buenas ideas y el hecho de estar ambientando en el folclore celta y gallego es un plus muy interesante, pero también es cierto que en su estado actual se encuentra bastante verde en muchos de sus aspectos. Tampoco ayuda el hecho de que haya escenas cinemáticas eliminadas que se carguen la coherencia de la trama o personajes con voces desaparecidas, pero eso es algo que se solucionará más adelante. Volveremos a darle otro tiento a principios del año que viene cuando salga de su early access para ver si han conseguido arreglar todos sus defectos y poder valorarlo en condiciones.
Este artículo ha sido realizado mediante una copia cedida por Evolve PR