El espacio puede ser aterrador, sobre todo el espacio que nos propone Rockfish Games con Everspace. Estamos ante una aventura espacial de acción con elementos roguelike. Con ello ya estamos garantizando que la muerte nos espera ahí fuera. Y es que en Everspace la muerte nos servirá para aprender, para mejorar y para ir mejor preparados en busca de nuestro destino.

La propuesta es sencilla, con un hilo argumental suficientemente interesante para no descartarlo inmediatamente, nos pondremos en el pellejo de un piloto que consigue escapar del cautiverio al que está sometido sin saber por qué, ya que como recurso manido, nuestro héroe sufre amnesia y no recuerda absolutamente nada, solo que usando la nave con la que acaba de escapar, tiene que llegar a «su» destino. Quizá allí encuentre las respuestas que busca.

Para llegar a ese destino, hay varios sectores por los que tendremos que avanzar saltando de uno a otro. Los habrá más pacíficos, más problemáticos, con más suministros o con menos, pero todos estos parámetros serán generados aleatoriamente a principio de nuestra aventura, o mejor dicho, a principio de cada una de nuestras aventuras, porque cada vez que muramos, el espacio se volverá a resetear y reconfigurar.

Rockfish Games ha sabido aunar una aventura espacial convincente junto a unos elementos roguelike que para ser honestos, le sientan muy bien. A pesar de ello, estas mecánicas también tienen su impacto negativo que trataremos más adelante. Sin embargo este punto dependerá de lo que nos haya enganchado el juego, porque si lo estamos disfrutando, sus puntos oscuros no nos parecerán para tanto.

Y es que el elemento que hace diferente a Everspace con otros arcades de acción espacial es la muerte. Vamos a morir, nuestra nave y nosotros mismos no estamos preparados para el viaje que nos espera. Ya sea por fuego enemigo, por quedarnos sin combustible, por un fallo técnico en nuestros sistemas, o por una mala decisión que tomaremos muchísimas veces, acabaremos con nuestros restos esparcidos en el cosmos. Aunque no será el final, pues volveremos a empezar ,con el espacio reconfigurado, eso sí, pero más listos y mejor preparados y ¿equipados?

Porque aquí es donde reside la esencia del juego, cada vez que muramos y reaparezcamos desde el principio, lo haremos con el dinero que hubiéramos conseguido en las vueltas anteriores, y las mejoras que hubiésemos aplicado a la nave. Con este dinero podremos comprar nuevas mejoras, mejores escudos, más armas u otras naves. Y con la nave mejor preparada, podremos llegar más lejos cada vez, hasta que seamos capaces y lo suficientemente fuertes para llegar al final de nuestro destino.

Así pues, la clave de nuestra aventura es la repetición. Empezaremos, avanzaremos, lucharemos, nos abasteceremos y moriremos. Y vuelta a empezar, aunque cada vez seremos más poderosos y más experimentados. Aquí es donde surge el primer inconveniente, y es que sí tendremos una sensación real de avance y mejora, y que se genere todos los sectores otra vez le dará variedad, pero claro, los primeros sectores se convertirán pronto en meros trámites, pues nos ofrecerán muy poco riesgo al ir cada vez mejor preparados, y el reto de verdad, la diversión de esos combates a cara de perro cada vez nos pillarán más lejos.

A pesar de esta sensación de puro trámite, si el juego nos engancha, no será algo tan acusado, pues disfrutaremos también de otras acciones, como la obtención de recursos, el comercio con NPCs, o la investigación. Y es que en cada sector por los que nos vamos moviendo, tendremos varias opciones, una, la obvia, es saltar al sector siguiente, aunque para ello hay que tener en cuenta que nuestra nave necesita combustible y mantenimiento, y mejoras, si queremos vivir un poco más. También podremos retrasar nuestra marcha para explorar, conseguir recursos abandonados, negociar con NPCs neutrales, o conseguirlos por las bravas, ya sea contra piratas espaciales o bandidos o contra naves civiles. La decisión es solo nuestra y todo tendrá consecuencias; quizá te asegures un buen botín y una muerte segura por ello.

Nuestras naves, hasta cuatro contando la de la expansión, tienen infinidad de mejoras, y además esas mejoras tendrán varios niveles, con lo que nos podremos ir configurando nuestras naves a nuestro gusto, desde auténticos «tanques» espaciales que resisten lo que sea, hasta auténticos arsenales volantes que harán temblar hasta a las descomunales fragatas. Nosotros decidimos qué nos va mejor, y ya si eso, el juego decide lo lejos que vamos a llegar.

Hay que destacar que el propio argumento, por sencillo que sea, está pensado para dar una explicación a la continua muerte y resurrección, todo un detalle para engancharte más a un título de estas características.

Everspace es un juego muy visual, muy bonito, artísticamente impecable, bello, con el Unreal Engine 4 sacando músculo. Tendremos una vista en tercera persona y una vista desde la cabina, ambas muy conseguidas y espectaculares, y cada sección será distinta con diferentes elementos como asteroides, satélites, nebulosas, restos de naves, de cargueros, de batallas, efectos de luces y partículas que nos dejarán embobados mirando la pantalla por un buen rato. Desafortunadamente la versión que nos toca, la de Switch, recibe más recortes que los deseados. Sí, sigue siendo impresionante, pero palidece con sus hermanos mayores, aunque no hay que olvidar que la consola de Nintendo es una portátil, y poder jugar una aventura espacial así en portátil no tiene precio.

El apartado sonoro no está mal, siendo bastante amplio: hasta 60 canciones que nos acompañarán durante nuestros vuelos. Los efectos de sonido están muy conseguidos, sobre todo en nuestras batallas.

El control de la nave es rápido y fiable, aunque se echa de menos un poco más de versatilidad. Un barrel roll le hubiera quedado de muerte, pero claro, esto no es un Starfox. A los pocos minutos tendremos los controles dominados, y será suficiente para enfrentarnos a lo que el oscuro y aterrador espacio nos presente.

La Stellar Edition que sale para Switch incluye la expansión Encounters que añade una nave, nuevos objetos, nuevas misiones, enemigos y NPCs. La podréis conseguir por 39,99€, quizá un precio un tanto elevado, aunque si te gusta el género, y te atrae la propuesta, puede ser una buena y divertida inversión.

 


Este análisis ha sido realizado mediante una copia cedida por Plan of Attack