Análisis

Para hablar de GRID Autosport, hay que echar la vista atrás, hasta 1997 y recordar a todo un clásico de la conducción como fue TOCA: Touring Car Championship. Aunque no es tan evidente a simple vista, TOCA dio lugar a una franquicia cuyo título ha ido mutando a los largo de los años. El primer gran cambio lo encontramos en 2002, con TOCA: Race Driver, el siguiente cambio de nombre vino de la mano de Race Driver: Grid en 2008, y en 2014 fue el lanzamiento inicial del juego que nos ocupa, que volvió a cambiar de denominación. A pesar de no haber recibido ningún juego nuevo de esta franquicia del volante en los últimos años, lo que acabamos de recibir este 2019 es una versión completa de GRID Autosport incluyendo todo su contenido descargable, y añadiendo ciertas mejoras a su juego base. Y las plataformas elegidas han sido los smartphones, y Nintendo Switch, la plataforma que nos ocupa.

Y aunque este lanzamiento para la híbrida de Nintendo ocurra 5 años después de su salida inicial, centrándonos en el catálogo de la máquina, GRID Autosport adquiere una gran transcendencia debido a que el género de la conducción, especialmente en su categoría de conducción realista o simulador, es una asignatura aún pendiente de la máquina, donde apenas hemos visto unos regulares Gear Club Unlimited 2 y V-Rally 4, y un decente WRC 8 FIA World Rally Championship que ya analizamos en 33bits. Por lo tanto, nos encontramos por una apuesta bastante seria para erigirse como mejor simulador de conducción del catálogo de la consola hasta ahora, y como veremos a continuación, lo consigue, aunque no sin taras.

A la hora de ponernos al mando y ver lo que nos ofrece la obra de Codemasters, GRID Autosport, portada al sistema magistralmente por Feral Interactive, las primeras impresiones no pueden ser mejores. Tenemos el modo Trayectoria, el plato fuerte del juego; los Campeonatos Extra, que como su nombre indica reúne el contenido adicional de las versiones iniciales, incluido en esta versión; Copa a Medida, donde podremos creas nuestra propia copa con nuestras reglas; Contrareloj, como su nombre indica, carreras contra el crono; y finalmente Carrera Rápida, para poder jugar en cualquier categoría, con todos los circuitos y coches disponibles. Completa un apartado de opciones muy extenso y bastante configurable, que permitirá regular satisfactoriamente la experiencia de usuario, con la posibilidad de activar varias ayudas que hagan el juego más asequible para el público iniciado en los simuladores de conducción. Ayudas como la trazada dinámica o la asistencia de frenada, entre otras, ayudarán a los inexpertos a familiarizarse con el control, mientras que los jugadores con más experiencia podrán desactivarlo todo para tener una esperanza más realista y placentera.

Y es que si hablamos del manejo de nuestro vehículo, nos sorprenderá ver lo bien conseguida que esta la sensación de conducción, la velocidad, y lo fiable del control, que además, para los que tienen problemas con los gatillos de las consolas de Nintendo por ser digitales y no tener recorrido, el juego es compatible con el mando de Game Cube, adaptador mediante, el último mando de Nintendo con gatillos analógicos. Pocas pegas se le puede poner al título en esta faceta, al que incluso se le ha añadido compatibilidad con el volante de Nintendo Labo en su última actualización. No es más que una curiosidad, pero da gusto ver que Feral Interactive se esmera en que el juego sea algo más que un simple port. Otra novedad, aunque lamentablemente no tan bien implementada ha sido el control por movimiento, que no es que falle, pero es quizá demasiado sensible y jugar en portátil por ejemplo se vuelve una odisea, por lo que se agradece la opción, pero sin controles por movimiento será como seguramente jugaremos las infinitas horas que GRID Autosport atesora.

Volviendo a los modos de juego, vamos a centrarnos en el modo estrella, el modo Trayectoria, que es el que nos sirve para entender todo el juego, y los demás modos. En el modo Trayectoria, seremos un piloto que debe elegir una escudería. Habrán diferentes opciones, unas tendrán unos coches, otras otros, unas nos permitirán conseguir más experiencia que otras, pero a costa de objetivos más ambiciosos, por lo que podremos elegir como queremos afrontar la temporada. Cada temporada, nuevas escuderías se ofrecerán a contratarnos siguiendo el mismo modelo. Cada temporada tendremos que elegir entre cinco tipo de competición, por lo que podremos jugar a la que más nos guste, y dejar de lado los otros tipos. estos tipos son Touring, con carreras en circuitos y vehículos de gran octanaje, Endurance, en pistas nocturnas por tiempo, en lugar de por vueltas, Open Wheel con coches de Fórmula, Tunner con coches tunning y drifts, y Street con coches con turismos comerciales, en circuitos urbanos.

Una vez elegida la categoría, e iniciada la temporada, iremos jugando campeonatos, y consiguiendo experiencia. Cada categoría se juega diferente, con diferentes vehículos y circuitos, incluso la sensación del control cambia entre un tipo de vehículos y otros, por lo que dominar las cinco categorías, aunque es voluntario, nos llevará muchísimas horas. Aunque el juego deja jugar a lo que al jugador le guste, si conseguimos un mínimo de experiencia en cada una de las cinco categorías, desbloquearemos una sexta, la categoría GRID, cuyos campeonatos van mezclando pruebas de las anteriores cinco categorías, por lo que queda reservado para los expertos que se hayan dominado las otras cinco categorías. Al ser parte de una escudería, habrá siempre otro piloto con nosotros, el cual es manejado por la IA, y supuestamente podremos dar ordenes durante la carrera para que nos ayude a contener a los rivales, pero esta opción no acaba de dar una ventaja real y podría estar mejor desarrollada, por lo que al final iremos a lo nuestro y lo acabaremos ignorando.

El apartado audiovisual de GRID Autosport es sin duda uno de los puntos fuertes del título. La conversión no se ha limitado a trasladar a Nintendo Switch el juego tal cual lo conocimos, sino que lo ha mejorado en la medida de las posibilidades de la máquina. Tendremos gráficos realistas, iluminación dinámica, reflejos en los coches, incluso en las repeticiones nos acercaremos al fotorrealismo. Era impresionante en su día y lo sigue siendo ahora, donde además se nos da la opción a elegir entre tres modos gráficos, un modo de alta calidad donde los frames se bloquean en 30 fps totalmente estables a cambio de que el juego se dispare en calidad gráfica y detalles, un modo rendimiento donde baja la calidad gráfica pero los fps suben hasta 60, y finalmente y especialmente pensado para jugar en portátil, por el tema de la batería, un modo de bajo consumo donde jugaremos a 30 fps y con la calidad gráfica en medio.

Adicionalmente, se ha lanzado un paquete gratuito de texturas en alta definición que mejora la calidad aun más si cabe cuando jugamos en el dock. El único punto negativo reseñable del apartado técnico es que los interiores de los vehículos no tienen el mismo mimo que los modelados exteriores, y se ven bastante genéricos, estaría bien otro pack de texturas para mejorar esto. Respecto al sonido, las carreras transcurren prácticamente sin música, que quedan relegadas al menú, y tampoco se echan de menos, por la presencia omnipresente de los efectos de sonido, perfectamente recreados y que se adueñan de las carreras desde el primer instante. Las voces de nuestro equipo las escucharemos en perfecto castellano, todo un detalle.

GRID Autosport da una de cal y una de arena. A pesar de no ser un título nuevo, aunque pasó bastante desapercibido en su día, tiene los suficientes ingredientes, mecánicas, y contenido como para ser la apuesta más seria del género de la simulación de conducción para la consola de Nintendo. Encontraremos multitud de modos de juego, cuya estrella es el modo Trayectoria, donde podremos decantarnos entre cinco categorías muy bien diferenciadas en cuanto a vehículos, trazados, y manejo. Pero el gran «pero» de esta versión, y a falta de ver si se cumple la promesa de ser incluido mediante una actualización, es el modo multijugador. Las versiones iniciales del juego tenían multijugador online, y ahora encontraremos que es el gran ausente en Nintendo Switch, aunque los chicos de Feral Interactive han dicho que están en ello, y viendo el gran trabajo realizado con esta conversión, y con su última gran conversión también lanzada para Nintendo Switch, Alien Isolation, podríamos darle un voto de confianza.

Por lo demás, estamos ante el mejor juego de conducción realista del sistema. Codemasters ha acertado en elegir este título para estrenarse en la consola de Nintendo, por lo completo, competente, y porque como ya hemos puntualizado, en 2014 pasó muy desapercibido por lanzarse en la anterior generación con las máquinas actuales en la calle. Y también ha acertado dejando el desarrollo en manos de Feral Interactive, con una amplia trayectoria de ports para Mac de juegos de PC, que han querido ir más allá, ofreciendo características extra como el control por movimiento, la vibración HD, los tres modos de rendimiento, la compatibilidad con Nintendo Labo y con el mando de Nintendo Game Cube, y veremos que más se le ocurre a estos chicos, aunque la guinda sería la implementación del multijugador local y online, entones nuestra nota sería más alta de lo que ya es.