Un año más, nos llega una nueva entrega de uno de los simuladores más famosos por excelencia: Farming Simulator 22, el juego en el que nos pondremos a manos de nuestra propia granja en la que cultivar plantas y cuidar animales. Farming Simulator 22 viene, nuevamente, de la mano de GIANTS Software tanto en el desarrollo como en la distribución y se lanza en Playstation 4/5, Xbox One/Series y PC. Arrancamos el tractor y nos ponemos manos a la obra.
A cada nueva entrega, la franquicia Farming Simulator ha ido añadiendo cada vez más novedades para ofrecer un realismo extremo en sus mecánicas, siendo la última entrega lanzada en 2020 y recibiendo críticas mixtas. Farming Simulator 22 viene dispuesto a añadir nuevo contenido con el que no solo convertirnos en granjeros, sino tener la libertad de decidir en qué sector queremos basar nuestra economía, pues la granja no lo es todo.
Para los nuevos jugadores que se unan a la saga a partir de esta entrega, es importante decirles que quizás no es la entrega más idónea para ello, pues GIANTS Software ha querido centrar su target en los jugadores de toda la vida que llevan ahí desde las primeras entregas o ya tienen mucha experiencia en la saga. ¿Qué quiere decir esto? Pues que quien juegue a Farming Simulator 22 ya tiene que venir enseñado de casa y conocer sus mecánicas, pues el juego no viene dispuesto a facilitarnos el aprendizaje.
En una decisión un tanto polémica, el juego no cuenta con tutorial alguno, algo que le hace falta como el comer y esperemos que se acabe añadiendo en un futuro. Lo único que tendremos en su lugar será la sección de Ayuda dentro del menú del juego, en el que nos cuentan a grandes rasgos como se juega, las mecánicas básicas o información sobre los productos y las épocas de siembra, pero aun así es una ayuda que sirve de poco y acaba siendo incluso más confuso para el jugador. Lo que realmente hace falta es un tutorial ingame que nos vaya guiando paso a paso, que nos diga lo que hacer y qué botones pulsar, pero eso no lo vamos a ver por ninguna parte. Porque sí, yo puedo saber que para sembrar un campo tengo que acoplar la sembradora al tractor y añadirle semillas que luego ir esparciendo, pero no tengo ni idea de como hacerlo ni qué combinación de botones usar -y ya digo que lo he intentado de mil maneras-
El verdadero tutorial del juego -y aquí viene lo realmente polémico- no se encuentra dentro del juego ni en el menú de ayuda. Si queremos aprender a jugar al título en profundidad, la desarrolladora nos insta a visitar su canal de youtube en el que irán colgando videos explicativos, así como una enorme guía escrita y dividida por secciones -actualmente no disponible- que solo podremos leer a través de la página web de la franquicia. Sinceramente, me parece una manera mucho más enrevesada y complicada de aprender a jugar en lugar de incluir un tutorial dentro del propio juego, que hubiese sido más cómodo y los jugadores, tanto los nuevos como los veteranos, lo habrían agradecido más.
Ya entrado dentro de la propia jugabilidad, podremos escoger tres tipos de dificultades: fácil, normal y difícil. En la primera de ellas, ya tendremos nuestra propia granja con todos los elementos y un colchón de dinero importante para empezar a trabajar directamente, en la segunda solamente tendremos el terreno y lo demás tendremos que conseguirlo por nuestra cuenta, y la tercera, que es la más dura, nos propone empezar totalmente desde cero sin tener ni un mísero dólar que gastar, por lo que tendremos que hacer trabajos externos para ganar algo de dinero y empezar a despegar.
En esta ocasión tendremos tres diferentes entornos para elegir: Elmcreek, que recuerda a las habituales granjas sureñas de Estados Unidos, Haut-Beyleron que está inspirado en la campiña francesa y Erlengrat, basada en las regiones alpinas donde predominan los terrenos nevados. Escoger cualquiera de ellas propicia el tipo de producto que podemos sembrar o el modelo de negocio que podremos enfrentar, pues quizás en las regiones nevadas no es conveniente centrarse en la agricultura y es preferible centrarnos en la ganadería, por ejemplo.
Hay que decir que en cuanto a realismo y profundidad es bastante completo, pues para sacar adelante nuestra granja tendremos que realizar todos los pasos y acciones que se requieren en la vida real, y esto va desde acoplar el tractor a los diferentes aperos para modificar el terreno, abonar el campo, ir a la tienda a comprar semillas, almacenar el producto en silos, echar gasolina, etc…De todas formas, si no queremos hacer todo esto y queremos ver como crece nuestra granja sin mover un dedo, siempre podemos contratar a trabajadores que se manchen las manos por nosotros.
La conducción de los vehículos nos deja sensaciones opuestas. Los tractores y camiones se controlan bien y no tendremos problemas con ellos, pero a la hora de coger nuestro utilitario para viajar a la ciudad veremos que el control es absolutamente nefasto, con unas físicas totalmente irreales y unos giros bruscos que lo convierten en totalmente incontrolable y hacen que usar el coche sea una auténtica pesadilla. A veces más vale viajar a pie o en los propios tractores que en el coche personal.
La novedad principal de Farming Simulator 22 es la de poder construir nuestra propia ciudad y decorar la región como más nos plazca. Con un menú similar al de los clásicos juegos de gestión y construcción -que sinceramente no entiendo que para acceder a este modo solo se pueda hacer a través del menú de compra de vehículos-, podremos seleccionas diferentes edificios, negocios o decoración con la que construir nuestra ciudad a nuestra manera. Esto, por supuesto, tiene un coste y cada elemento que coloquemos nos obligará a pasar por caja con una buena cantidad de dinero, por lo que más vale hacerlo cuando tengamos bastantes ahorros si no queremos ver como nos vamos rápidamente a la bancarrota.
Pasando al apartado audiovisual, en lo gráfico el juego cumple sin más, no se nota una gran mejoría respecto a juegos anteriores pero la verdad es que no luce mal del todo. En el sonido nos llevamos una sorpresa, pues la radio ingame cuenta con diferentes emisoras de varios géneros y canciones licenciadas de artistas conocidos, lo que nos da variedad y distracción a la hora de afrontar las largas y pesadas tareas agrícolas. Los textos por suerte se encuentran en castellano y la verdad es que lo agradecemos de cara a leernos constantemente la sección de ayuda.
En definitiva, Farming Simulator 22 ofrece todo lo que los fans de los simuladores esperan de la franquicia. Aunque no se puede decir que la evolución haya sido enorme ya que la base sigue siendo la misma, las novedades introducidas en esta edición se agradecen y le aportan un toque de frescura para que no resulte un más de lo mismo. La pena es, como ya hemos comentado, las muchas trabas que se va a encontrar el jugador novel para aprender todos los fundamentos del título y sacarle partido a todas sus opciones.
Este análisis ha sido realizado en Playstation 4 mediante una copia cedida por TNPR.
